Internacional
Kerry anuncia ayuda ''no letal'' por 60 MDD para rebeldes sirios
Participa en reunión a nivel ministerial que concluye con llamado al régimen de Bashar al Assad a detener bombardeos
ROMA, ITALIA (28/FEB/2013).- El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, anunció hoy en la capital italiana ayudas "no letales" por 60 millones de dólares a la oposición siria, "para facilitar la transición política" en el país asiático.
Kerry participó en la sede de la cancillería italiana en una reunión a nivel ministerial que concluyó con un llamado al régimen de Bashar al Assad a "detener inmediatamente los bombardeos" contra civiles.
Además, con una promesa de mayor apoyo político y material a la coalición opositora, reconocida como la única representante legítima del pueblo sirio.
"Hoy, a nombre del presidente Barack Obama puedo anunciar que Estados Unidos dará ayudas por 60 millones de dólares (a la oposición siria) para facilitar la transición", declaró el funcionario estadunidense en rueda de prensa.
Dijo que la democracia en Siria no será posible mientras al Assad se mantenga en el poder y acusó al dictador sirio de recientes ataques con misiles Scud que ocasionaron decenas de víctimas.
Por su parte, el canciller italiano Giulio Terzi dijo que en la reunión de Roma se logró dar "un paso adelante" para resolver la crisis siria.
"Los sufrimientos del pueblo sirio nos imponen el deber de ir más allá de los esfuerzos hechos hasta ahora y multiplicar nuestro compromiso para alcanzar un cambio efectivo en la crisis", señaló.
En la reunión también participaron los cancilleres de Reino Unido, William Hague y de Turquía, Ahmet Davutoglu, además de los responsables de la diplomacia de Egipto, Jordania, Qatar y Arabia Saudita.
En una segunda reunión, tomó parte el jefe de la coalición opositora siria, Moaz al-Khatib, quien exhortó a que Occidente vea "la sangre de los niños sirios" y no "las largas barbas de los rebeldes".
En ese sentido, rechazó que la oposición siria se inspire en el fundamentalismo islámico.
En el documento conclusivo del doble encuentro se informó que al-Khatib dio las últimas noticias sobre el desarrollo de la situación en el terreno y denunció "los sufrimientos del pueblo sirio", así como el creciente aumento de refugiados.
Los participantes exigieron "detener inmediatamente los bombardeos indiscriminados en áreas urbanas", a los que calificaron como "crímenes contra la humanidad que no quedarán sin castigo".
Los ministros también "estigmatizaron el flujo continúo de armas a favor del régimen (de al Assad) por parte de terceros países" y prometieron "mayor apoyo político y material a la coalición opositora, única representante legítima del pueblo sirio".
Anunciaron asimismo una mayor asistencia al interior del país asiático con el objetivo de favorecer "una mutación de las relaciones de fuerza en el terreno".
Kerry participó en la sede de la cancillería italiana en una reunión a nivel ministerial que concluyó con un llamado al régimen de Bashar al Assad a "detener inmediatamente los bombardeos" contra civiles.
Además, con una promesa de mayor apoyo político y material a la coalición opositora, reconocida como la única representante legítima del pueblo sirio.
"Hoy, a nombre del presidente Barack Obama puedo anunciar que Estados Unidos dará ayudas por 60 millones de dólares (a la oposición siria) para facilitar la transición", declaró el funcionario estadunidense en rueda de prensa.
Dijo que la democracia en Siria no será posible mientras al Assad se mantenga en el poder y acusó al dictador sirio de recientes ataques con misiles Scud que ocasionaron decenas de víctimas.
Por su parte, el canciller italiano Giulio Terzi dijo que en la reunión de Roma se logró dar "un paso adelante" para resolver la crisis siria.
"Los sufrimientos del pueblo sirio nos imponen el deber de ir más allá de los esfuerzos hechos hasta ahora y multiplicar nuestro compromiso para alcanzar un cambio efectivo en la crisis", señaló.
En la reunión también participaron los cancilleres de Reino Unido, William Hague y de Turquía, Ahmet Davutoglu, además de los responsables de la diplomacia de Egipto, Jordania, Qatar y Arabia Saudita.
En una segunda reunión, tomó parte el jefe de la coalición opositora siria, Moaz al-Khatib, quien exhortó a que Occidente vea "la sangre de los niños sirios" y no "las largas barbas de los rebeldes".
En ese sentido, rechazó que la oposición siria se inspire en el fundamentalismo islámico.
En el documento conclusivo del doble encuentro se informó que al-Khatib dio las últimas noticias sobre el desarrollo de la situación en el terreno y denunció "los sufrimientos del pueblo sirio", así como el creciente aumento de refugiados.
Los participantes exigieron "detener inmediatamente los bombardeos indiscriminados en áreas urbanas", a los que calificaron como "crímenes contra la humanidad que no quedarán sin castigo".
Los ministros también "estigmatizaron el flujo continúo de armas a favor del régimen (de al Assad) por parte de terceros países" y prometieron "mayor apoyo político y material a la coalición opositora, única representante legítima del pueblo sirio".
Anunciaron asimismo una mayor asistencia al interior del país asiático con el objetivo de favorecer "una mutación de las relaciones de fuerza en el terreno".