Internacional
Juicio contra ex colaboradores de Lula terminaría a fines de 2013
Un total de 25 políticos, empresarios y banqueros acusados han sido declarados culpables de haber participado en un sistema de compra de votos de diputados entre 2003 y 2005
BRASILIA, BRASIL (26/OCT/2012).- El megajuicio iniciado en agosto en la Corte Suprema de Brasil que declaró culpables de corrupción a excolaboradores del expresidente Lula entró en la fase de sentencias, pero recién terminará a fines de 2013, estiman analistas.
Un total de 25 de los 37 políticos, empresarios y banqueros acusados han sido declarados culpables de haber participado en un sistema de compra de votos de diputados en el Congreso entre 2003 y 2005, durante el primer mandato del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva.
El escándalo, conocido como 'mensalao', hizo tambalear el gobierno de Lula, aunque éste consiguió ser reelecto y dejó la presidencia en 2010 con una popularidad récord de más de 80%.
El miércoles, la Corte Suprema condenó a 40 años y un mes de cárcel al empresario publicitario Marcos Valerio, acusado de la mayor cantidad de delitos (corrupción activa, lavado de dinero, peculado, asociación para delinquir y desvío de fondos). También deberá pagar una multa de 1,4 millones de dólares.
Valerio es considerado el operador de la red de corrupción implementada por el gobernante Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) de Lula para pagar sobornos a diputados de cuatro partidos de la coalición, a cambio de apoyo en el Congreso.
Los jueces también condenaron a un exsocio de Valerio, Ramon Hollerbach, a más de 14 años de prisión y a una multa de 800 mil dólares.
Penas provisorias
El juicio fue interrumpido el jueves de noche y se reanudará el 7 de noviembre porque el juez relator, Joaquim Barbosa, debe viajar a Alemania a recibir un tratamiento para una afección en la columna.
Las penas de cárcel de Valerio y Hollerbach serían reducidas en futuras sesiones.
"Estas condenas son provisorias, y serán revisadas", precisó Claudio Abramo, director de la ONG Transparencia Brasil, una ONG de lucha contra la corrupción.
"Los abogados de la defensa podrán presentar recursos para intentar reducir las penas de cárcel y las multas también podrán ser revisadas", explicó a la AFP.
"Para que las condenas sean oficiales, deben ser redactadas y publicadas y esto puede llevar meses, dada la cantidad de acusados. Este proceso no terminará antes de fines de 2013", subrayó, y explicó que los abogados de los condenados "harán todo lo posible para retrasar su encarcelamiento".
La defensa buscará "que el proceso se alargue para que algunos delitos prescriban. Es un juicio muy complicado, y además los jueces están muy mal organizados", criticó Abramo.
"Menos tolerancia con la corrupción"
Las condenas de los "acusados políticos" del escándalo, entre ellos el exjefe de gabinete de Lula de 2003 a 2005, José Dirceu, y el expresidente del PT, José Genoino, serán definidas cuando recomience el juicio en noviembre.
Estos dos exguerrilleros y el extesorero del PT Delubio Soares fueron declarados culpables de corrupción activa y de asociación para delinquir.
Los jueces coincidieron en que los tres distribuían dinero a parlamentarios a través del publicista Marcos Valerio y que Dirceu era quien dirigía el sistema.
"Para el Estado brasileño, el aspecto jurídico de este proceso es más importante que su aspecto político. Se condena por primera vez a acusados por delitos de corrupción. Es fundamental porque esta posición será seguida por otros jueces. Habrá menos tolerancia con la corrupción" que provoca desde siempre una gangrena en la vida política de Brasil, dijo Abramo.
Un total de 25 de los 37 políticos, empresarios y banqueros acusados han sido declarados culpables de haber participado en un sistema de compra de votos de diputados en el Congreso entre 2003 y 2005, durante el primer mandato del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva.
El escándalo, conocido como 'mensalao', hizo tambalear el gobierno de Lula, aunque éste consiguió ser reelecto y dejó la presidencia en 2010 con una popularidad récord de más de 80%.
El miércoles, la Corte Suprema condenó a 40 años y un mes de cárcel al empresario publicitario Marcos Valerio, acusado de la mayor cantidad de delitos (corrupción activa, lavado de dinero, peculado, asociación para delinquir y desvío de fondos). También deberá pagar una multa de 1,4 millones de dólares.
Valerio es considerado el operador de la red de corrupción implementada por el gobernante Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) de Lula para pagar sobornos a diputados de cuatro partidos de la coalición, a cambio de apoyo en el Congreso.
Los jueces también condenaron a un exsocio de Valerio, Ramon Hollerbach, a más de 14 años de prisión y a una multa de 800 mil dólares.
Penas provisorias
El juicio fue interrumpido el jueves de noche y se reanudará el 7 de noviembre porque el juez relator, Joaquim Barbosa, debe viajar a Alemania a recibir un tratamiento para una afección en la columna.
Las penas de cárcel de Valerio y Hollerbach serían reducidas en futuras sesiones.
"Estas condenas son provisorias, y serán revisadas", precisó Claudio Abramo, director de la ONG Transparencia Brasil, una ONG de lucha contra la corrupción.
"Los abogados de la defensa podrán presentar recursos para intentar reducir las penas de cárcel y las multas también podrán ser revisadas", explicó a la AFP.
"Para que las condenas sean oficiales, deben ser redactadas y publicadas y esto puede llevar meses, dada la cantidad de acusados. Este proceso no terminará antes de fines de 2013", subrayó, y explicó que los abogados de los condenados "harán todo lo posible para retrasar su encarcelamiento".
La defensa buscará "que el proceso se alargue para que algunos delitos prescriban. Es un juicio muy complicado, y además los jueces están muy mal organizados", criticó Abramo.
"Menos tolerancia con la corrupción"
Las condenas de los "acusados políticos" del escándalo, entre ellos el exjefe de gabinete de Lula de 2003 a 2005, José Dirceu, y el expresidente del PT, José Genoino, serán definidas cuando recomience el juicio en noviembre.
Estos dos exguerrilleros y el extesorero del PT Delubio Soares fueron declarados culpables de corrupción activa y de asociación para delinquir.
Los jueces coincidieron en que los tres distribuían dinero a parlamentarios a través del publicista Marcos Valerio y que Dirceu era quien dirigía el sistema.
"Para el Estado brasileño, el aspecto jurídico de este proceso es más importante que su aspecto político. Se condena por primera vez a acusados por delitos de corrupción. Es fundamental porque esta posición será seguida por otros jueces. Habrá menos tolerancia con la corrupción" que provoca desde siempre una gangrena en la vida política de Brasil, dijo Abramo.