Internacional
Irán se prepara contra eventuales sanciones
La República Islámica desestima las amenazas que bloquearían la importación de hidrocarburos, por su negativa a suspender su programa nuclear
TEHERÁN, IRÁN.- Irán está preparado para hacer frente a cualquier tipo de sanciones internacionales, incluidas las que se pudieran imponer a la importación de gasolina, afirmó el director general para la distribución de productos del Ministerio de Petróleo, Farid Amerí.
En declaraciones divulgadas por la agencia de noticias Ilna, el funcionario subrayó que su país ha logrado “almacenar grandes cantidades de combustible” y señaló que “las refinerías existentes en Irán pueden producir lo suficiente como para cubrir el consumo nacional”.
“Las reservas de gasolina se han incrementado en más de mil millones de litros durante el actual año iraní, que concluye el 20 de marzo”, cantidad que eleva a dos mil 400 millones de litros almacenados.
Irán está considerado el tercer país del mundo en riquezas probadas de petróleo y gas, pero tiene una precaria industria de refinado que le obliga a importar 40% de la gasolina que consume.
El pasado año, reveló que pretendía utilizar las refinerías petroquímicas para producir alrededor de 14 millones de litros al día, lo que elevaría la producción diaria a 58.5 millones de litros cada 24 horas.
Las grandes potencias occidentales, con Estados Unidos a la cabeza, acusan a Irán de ocultar, bajo su programa civil, otro de naturaleza clandestina y aplicaciones bélicas cuyo objetivo sería la adquisición de armamento nuclear, alegación que Teherán rechaza.
La secretaria de Estado de la Unión Americana, Hillary Clinton, aseguró que se han logrado “grandes progresos” para que el Consejo de Seguridad de la ONU comience a debatir nuevas sanciones contra la República Islámica. “Esperamos que en los próximos 30 a 60 días veamos nuevas resoluciones que sancionen” a Irán, dijo Clinton en una audiencia del Senado de su país.
El conflicto se ha agravado en las últimas semanas después de que el régimen iraní desestimara un acuerdo para intercambiar uranio a 3.5% otro enriquecido a 20%, en las condiciones que dice necesitarlo para el citado reactor de Teherán.
La decisión ha impulsado a Washington, apoyado por Londres, París y Berlín entre otras capitales, a retomar con más determinación la opción de imponer nuevas sanciones al régimen iraní.
Pero Moscú anunció que no apoyará sanciones “paralizantes” contra Teherán, incluyendo cualquiera que se aplique a sus sectores bancarios o energéticos.
Teherán enfrenta
Aliados advierten
Estados Unidos ha advertido de sancionar a Irán en varios rubros. Una de las alternativas, ya aprobada por el Congreso estadounidense, es imponer medidas punitivas a aquellas empresas que vendan gasolina al régimen de los ayatolas.
La República Islámica tiene 16% de las reservas probadas de gas y 11% de las reservas de petróleo a nivel mundial, pero necesita desesperadamente inversiones para desarrollarlas. La inversión entra en un grado de riesgo si proceden las acciones de los aliados de Estados Unidos.
En declaraciones divulgadas por la agencia de noticias Ilna, el funcionario subrayó que su país ha logrado “almacenar grandes cantidades de combustible” y señaló que “las refinerías existentes en Irán pueden producir lo suficiente como para cubrir el consumo nacional”.
“Las reservas de gasolina se han incrementado en más de mil millones de litros durante el actual año iraní, que concluye el 20 de marzo”, cantidad que eleva a dos mil 400 millones de litros almacenados.
Irán está considerado el tercer país del mundo en riquezas probadas de petróleo y gas, pero tiene una precaria industria de refinado que le obliga a importar 40% de la gasolina que consume.
El pasado año, reveló que pretendía utilizar las refinerías petroquímicas para producir alrededor de 14 millones de litros al día, lo que elevaría la producción diaria a 58.5 millones de litros cada 24 horas.
Las grandes potencias occidentales, con Estados Unidos a la cabeza, acusan a Irán de ocultar, bajo su programa civil, otro de naturaleza clandestina y aplicaciones bélicas cuyo objetivo sería la adquisición de armamento nuclear, alegación que Teherán rechaza.
La secretaria de Estado de la Unión Americana, Hillary Clinton, aseguró que se han logrado “grandes progresos” para que el Consejo de Seguridad de la ONU comience a debatir nuevas sanciones contra la República Islámica. “Esperamos que en los próximos 30 a 60 días veamos nuevas resoluciones que sancionen” a Irán, dijo Clinton en una audiencia del Senado de su país.
El conflicto se ha agravado en las últimas semanas después de que el régimen iraní desestimara un acuerdo para intercambiar uranio a 3.5% otro enriquecido a 20%, en las condiciones que dice necesitarlo para el citado reactor de Teherán.
La decisión ha impulsado a Washington, apoyado por Londres, París y Berlín entre otras capitales, a retomar con más determinación la opción de imponer nuevas sanciones al régimen iraní.
Pero Moscú anunció que no apoyará sanciones “paralizantes” contra Teherán, incluyendo cualquiera que se aplique a sus sectores bancarios o energéticos.
Teherán enfrenta
Aliados advierten
Estados Unidos ha advertido de sancionar a Irán en varios rubros. Una de las alternativas, ya aprobada por el Congreso estadounidense, es imponer medidas punitivas a aquellas empresas que vendan gasolina al régimen de los ayatolas.
La República Islámica tiene 16% de las reservas probadas de gas y 11% de las reservas de petróleo a nivel mundial, pero necesita desesperadamente inversiones para desarrollarlas. La inversión entra en un grado de riesgo si proceden las acciones de los aliados de Estados Unidos.