Internacional
Canal de Panamá rechaza iniciativa de consorcio para evitar paro
Proponen al Canal un cofinanciamiento de los sobrecostos para continuar su ampliación
PANAMÁ, PANAMÁ (20/ENE/2014).- La Autoridad del Canal de
Panamá (ACP) rechazó hoy una última propuesta del consorcio internacional encargado de la ampliación de la vía interoceánica, para recurrir al cofinanciamiento de los sobrecostos para evitar la suspensión en las obras.
"No hay ninguna posibilidad de hacer acuerdos fuera del contrato. Además, las propuestas deben ser presentadas formalmente", indicó la ACP en un escueto comunicado.
El Grupo Unidos por el Canal de Panamá (GUPC), encargado de la obra, propuso a la ACP un cofinanciamiento de los sobrecostos para continuar con la ampliación del Canal y anunció una prórroga a su ultimátum de suspensión de las obras.
El consorcio integrado por la española Sacyr-Vallehermoso, la italiana Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA emplazó a la ACP a pagar mil 600 millones de dólares por sobrecostos para evitar la suspensión de la obra en cualquier momento desde este lunes.
La ACP sostiene que cualquier reclamo debe ser sometido a las tres instancias contempladas en el contrato de 2009 por tres mil 221 millones de dólares para el diseño y construcción de un tercer juego de esclusas en el Canal.
El GUPC aseguró que los sobrecostos, relacionados con supuesto trabajo adicional al estipulado en el contrato, llevaron al consorcio a la actual "difícil situación financiera" y que si se llega a un acuerdo las obras estarán listas en 2015.
En contraste con lo que afirma la ACP, el GUPC afirmó que "no hay discusión sobre la existencia de estos costes imprevistos, lo único que se discute es quién los tiene que pagar, si el contratista o el cliente".
"En caso de que no se llegue a ningún acuerdo sobre la financiación, las obras no terminarán en los plazos previstos y supondrá un grave retraso, con perjuicio para todas las partes", advirtió el grupo.
Para el martes se prevé una reunión de la aseguradora Zurich International con la ACP y el GUPC para abordar la situación derivada de los reclamos del consorcio.
Las labores del GUPC registraron el lunes entre 25 y 30 por ciento de su capacidad, porcentaje que se ha mantenido en las últimas semanas.
"El preaviso enviado el día 30 da derecho al consorcio a suspender las obras en cualquier momento a partir del día 21 sin que en este momento ese escenario este contemplado", indicó el GUPC al descartar por ahora la suspensión de obras.
La ACP consideró inválido el aviso de suspensión de trabajos y acusó al GUPC de violar el contrato para la construcción del tercer juego de esclusas, el principal componente de la ampliación de la ruta marítima.
Para solventar el problema de falta de liquidez del GUPC, la ACP propuso adelantar el pago de 100 millones de dólares, pero el consorcio pidió 400 millones de dólares, lo cual fue rechazado por la entidad canalera.
La expansión para añadir un carril adicional a los dos existentes inició en 2007 con una inversión de cinco mil 250 millones de dólares, para finalizar el 21 de octubre de 2014, pero ahora sufre un retraso de unos nueve meses.
"No hay ninguna posibilidad de hacer acuerdos fuera del contrato. Además, las propuestas deben ser presentadas formalmente", indicó la ACP en un escueto comunicado.
El Grupo Unidos por el Canal de Panamá (GUPC), encargado de la obra, propuso a la ACP un cofinanciamiento de los sobrecostos para continuar con la ampliación del Canal y anunció una prórroga a su ultimátum de suspensión de las obras.
El consorcio integrado por la española Sacyr-Vallehermoso, la italiana Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA emplazó a la ACP a pagar mil 600 millones de dólares por sobrecostos para evitar la suspensión de la obra en cualquier momento desde este lunes.
La ACP sostiene que cualquier reclamo debe ser sometido a las tres instancias contempladas en el contrato de 2009 por tres mil 221 millones de dólares para el diseño y construcción de un tercer juego de esclusas en el Canal.
El GUPC aseguró que los sobrecostos, relacionados con supuesto trabajo adicional al estipulado en el contrato, llevaron al consorcio a la actual "difícil situación financiera" y que si se llega a un acuerdo las obras estarán listas en 2015.
En contraste con lo que afirma la ACP, el GUPC afirmó que "no hay discusión sobre la existencia de estos costes imprevistos, lo único que se discute es quién los tiene que pagar, si el contratista o el cliente".
"En caso de que no se llegue a ningún acuerdo sobre la financiación, las obras no terminarán en los plazos previstos y supondrá un grave retraso, con perjuicio para todas las partes", advirtió el grupo.
Para el martes se prevé una reunión de la aseguradora Zurich International con la ACP y el GUPC para abordar la situación derivada de los reclamos del consorcio.
Las labores del GUPC registraron el lunes entre 25 y 30 por ciento de su capacidad, porcentaje que se ha mantenido en las últimas semanas.
"El preaviso enviado el día 30 da derecho al consorcio a suspender las obras en cualquier momento a partir del día 21 sin que en este momento ese escenario este contemplado", indicó el GUPC al descartar por ahora la suspensión de obras.
La ACP consideró inválido el aviso de suspensión de trabajos y acusó al GUPC de violar el contrato para la construcción del tercer juego de esclusas, el principal componente de la ampliación de la ruta marítima.
Para solventar el problema de falta de liquidez del GUPC, la ACP propuso adelantar el pago de 100 millones de dólares, pero el consorcio pidió 400 millones de dólares, lo cual fue rechazado por la entidad canalera.
La expansión para añadir un carril adicional a los dos existentes inició en 2007 con una inversión de cinco mil 250 millones de dólares, para finalizar el 21 de octubre de 2014, pero ahora sufre un retraso de unos nueve meses.