Internacional
Bandera británica ondea en Belfast tras sexta noche de violencia
La llamada Unión Jack (bandera británica) fue izada este miércoles a toda asta en el Ayuntamiento de la capital de Irlanda del Norte, por primera vez desde hace más de un mes
LONDRES, GRAN BRETAÑA (09/ENE/2013).- La bandera británica ondea de nuevo en el Ayuntamiento de Belfast para conmemorar el cumpleaños de la duquesa de Cambridge y esposa del príncipe Guillermo, Katherine Middleton, tras una sexta noche de violencia y protestas por su retiro.
La llamada "Unión Jack" (bandera británica) fue izada este miércoles a toda asta en el Ayuntamiento de la capital de Irlanda del Norte, por primera vez desde hace más de un mes, cuando el Consejo Municipal decidió limitar los días que ondea la insignia en el edificio público.
El Consejo Municipal de Belfast aprobó el 3 de diciembre una moción para permitir que la bandera británica se coloque sólo 17 días al año en el edificio del Ayuntamiento, en vez de todo el año como se había venido haciendo desde hace más de un siglo.
La restricción al izamiento de la bandera desató la ira de jóvenes nacionalistas británicos que salieron en diciembre por más de una semana a las calles a manifestarse en contra, desatando actos de violencia, disturbios y enfrentamientos con la policía.
Aunque, la violencia se reactivó el jueves pasado, luego de que las autoridades no lograron un acuerdo para responder a la demanda de los manifestantes de ondear ininterrumpidamente la enseña británica en el edificio de gobierno de Belfast.
La bandera británica se izó este miércoles para conmemorar el cumpleaños número 31 de la duquesa de Cambridge y representa uno de los 17 días fijados por el Consejo norirlandés para que ondeara en el Ayuntamiento de Belfast, tras una sexta noche de violencia.
El Servicio de la Policía en Irlanda del Norte (PSNI) informó este miércoles que al menos ocho personas fueron detenidas la víspera por su participación en los disturbios y enfrentamientos contra sus oficiales en el este de la capital norirlandesa.
Los manifestantes, en su mayoría jóvenes pro británicos, lanzaron piedras, botellas y bombas molotov contra la policía, desoyendo la advertencia de las autoridades de que la violencia callejera sería castigada, según un reporte del diario Belfast Telegraph en Internet.
En una declaración, el PSNI indicó que por sexta noche consecutiva, la policía antidisturbios se enfrentó a cientos de hombres enmascarados en una de las principales carreteras del este de Belfast, armados con piedra, pelotas de golf y bombas de gasolina.
La Policía destacó que en esta ocasión ninguno de sus uniformados resultó herido y que contario a los días anteriores, anoche no fue necesario el usos de cañones de agua, ni balas de goma para contener a los manifestantes.
Al menos 112 personas han sido detenidas y 64 agentes de la policía han resultado heridos, algunos de gravedad, en los últimos seis días de protestas y actos de violencia protagonizados por nacionalistas que exigen la permanencia de la bandera británica en el Ayuntamiento.
Ante la violencia, que según la Confederación de la Industria Británica (CBI) podría provocar la perdida de empleos y el cierre de comercios a menos de que se ponga un fin inmediato al problema, el gobierno convocó a una reunión para examinar la situación.
El primer ministro de Irlanda del Norte, Peter Robinson, confirmó esta mañana que representantes de los distintos partidos se reunirán mañana jueves para discutir el problema y buscar una solución definitiva a los disturbios.
La llamada "Unión Jack" (bandera británica) fue izada este miércoles a toda asta en el Ayuntamiento de la capital de Irlanda del Norte, por primera vez desde hace más de un mes, cuando el Consejo Municipal decidió limitar los días que ondea la insignia en el edificio público.
El Consejo Municipal de Belfast aprobó el 3 de diciembre una moción para permitir que la bandera británica se coloque sólo 17 días al año en el edificio del Ayuntamiento, en vez de todo el año como se había venido haciendo desde hace más de un siglo.
La restricción al izamiento de la bandera desató la ira de jóvenes nacionalistas británicos que salieron en diciembre por más de una semana a las calles a manifestarse en contra, desatando actos de violencia, disturbios y enfrentamientos con la policía.
Aunque, la violencia se reactivó el jueves pasado, luego de que las autoridades no lograron un acuerdo para responder a la demanda de los manifestantes de ondear ininterrumpidamente la enseña británica en el edificio de gobierno de Belfast.
La bandera británica se izó este miércoles para conmemorar el cumpleaños número 31 de la duquesa de Cambridge y representa uno de los 17 días fijados por el Consejo norirlandés para que ondeara en el Ayuntamiento de Belfast, tras una sexta noche de violencia.
El Servicio de la Policía en Irlanda del Norte (PSNI) informó este miércoles que al menos ocho personas fueron detenidas la víspera por su participación en los disturbios y enfrentamientos contra sus oficiales en el este de la capital norirlandesa.
Los manifestantes, en su mayoría jóvenes pro británicos, lanzaron piedras, botellas y bombas molotov contra la policía, desoyendo la advertencia de las autoridades de que la violencia callejera sería castigada, según un reporte del diario Belfast Telegraph en Internet.
En una declaración, el PSNI indicó que por sexta noche consecutiva, la policía antidisturbios se enfrentó a cientos de hombres enmascarados en una de las principales carreteras del este de Belfast, armados con piedra, pelotas de golf y bombas de gasolina.
La Policía destacó que en esta ocasión ninguno de sus uniformados resultó herido y que contario a los días anteriores, anoche no fue necesario el usos de cañones de agua, ni balas de goma para contener a los manifestantes.
Al menos 112 personas han sido detenidas y 64 agentes de la policía han resultado heridos, algunos de gravedad, en los últimos seis días de protestas y actos de violencia protagonizados por nacionalistas que exigen la permanencia de la bandera británica en el Ayuntamiento.
Ante la violencia, que según la Confederación de la Industria Británica (CBI) podría provocar la perdida de empleos y el cierre de comercios a menos de que se ponga un fin inmediato al problema, el gobierno convocó a una reunión para examinar la situación.
El primer ministro de Irlanda del Norte, Peter Robinson, confirmó esta mañana que representantes de los distintos partidos se reunirán mañana jueves para discutir el problema y buscar una solución definitiva a los disturbios.