Entretenimiento
Folclor e innovación en Intermoda
El evento de moda más importante de América Latina, Intermoda abre paso a las tendencias llenas de color, forma y cultura
VEA AQUÍ LA FOTOGALERÍA
VEA AQUÍ EL VIDEO
GUADALAJARA, JALISCO (23/JUL/2010).- La creatividad y el color fueron los grandes protagonistas de la noche de ayer en la pasarela que celebró, con diseños exclusivos de tres grandes figuras de de la industria textil, la pasión por el diseño y el Bicentenario de la Independencia.
Medios de comunicación y representantes de las más importantes casas de alta costura se dieron cita en el salón de pasarelas de Intermoda 2010, en Expo Guadalajara, para ser testigos del diseño inspirado en la cultura mexicana.
Con glamur y belleza, se exhibieron las piezas de los diseñadores mexicanos Alexia Ulibarri, Kris Goyri y Lydia Lavín.
La primera en entrar a escena fue Alexia Ulibarri, cuyo singular dinamismo se marcó en cada una de sus piezas, una colección inspirada en la innovación y elegancia exclusiva para la mujer. Las faldas asimétricas en tonos grisáceos y los vestidos de corte recto, destacaron en telas brillantes que jugaban con detalles de encaje y fondos cromados, incrustaciones de bisutería y estampados florales.
Por su parte el modista Kris Goyri, propuso una línea cálida y sencilla con blusones de caída holgada. Los vestidos de gala sorprendieron con tirantes trenzados, que dejan al descubierto la espalda y acentúan delicadamente la silueta femenina. Posteriormente, los cortes asimétricos volvieron aparecer en la pasarela con estampados de la naturaleza, entre los que destacaban las flores, reluciendo holanes de encaje oscuro sobreexpuestos a telas blancas, y barbas que ofrecen un movimiento libre -al caminar- en las prendas de dos piezas compuestas por blusas y pantalones. Los tonos predominantes fueron el azul, salmón, rosa y tornasol.
Con un cierre espectacular, lleno de aplausos y totalmente mexicano, Lydia Lavín reafirmó su amor por México con diseños que rescatan la vestimenta de los pueblos indígenas de Oaxaca y Yucatán. Tomó como base los típicos rebozos y zarapes, prendas que figuraron en cada pieza y que generó un juego de texturas y relieves en detalles de terciopelo. La diversidad fue evidente en los vestidos largos que desfilaron y ofrecieron un bufet de colores representativos de este país, como los rojos, verdes oscuros, naranjas y tonos ocres.
La diseñadora acompañó sus creaciones con accesorios que dan mayor impacto a las prendas: cinturones de chaquira, bordados artesanales florales y collares dorados de corcholatas deformadas. Así y junto a su hija, Lydia culminó la pasarela agradeciendo a los asistentes su reconocimiento.
VEA AQUÍ EL VIDEO
GUADALAJARA, JALISCO (23/JUL/2010).- La creatividad y el color fueron los grandes protagonistas de la noche de ayer en la pasarela que celebró, con diseños exclusivos de tres grandes figuras de de la industria textil, la pasión por el diseño y el Bicentenario de la Independencia.
Medios de comunicación y representantes de las más importantes casas de alta costura se dieron cita en el salón de pasarelas de Intermoda 2010, en Expo Guadalajara, para ser testigos del diseño inspirado en la cultura mexicana.
Con glamur y belleza, se exhibieron las piezas de los diseñadores mexicanos Alexia Ulibarri, Kris Goyri y Lydia Lavín.
La primera en entrar a escena fue Alexia Ulibarri, cuyo singular dinamismo se marcó en cada una de sus piezas, una colección inspirada en la innovación y elegancia exclusiva para la mujer. Las faldas asimétricas en tonos grisáceos y los vestidos de corte recto, destacaron en telas brillantes que jugaban con detalles de encaje y fondos cromados, incrustaciones de bisutería y estampados florales.
Por su parte el modista Kris Goyri, propuso una línea cálida y sencilla con blusones de caída holgada. Los vestidos de gala sorprendieron con tirantes trenzados, que dejan al descubierto la espalda y acentúan delicadamente la silueta femenina. Posteriormente, los cortes asimétricos volvieron aparecer en la pasarela con estampados de la naturaleza, entre los que destacaban las flores, reluciendo holanes de encaje oscuro sobreexpuestos a telas blancas, y barbas que ofrecen un movimiento libre -al caminar- en las prendas de dos piezas compuestas por blusas y pantalones. Los tonos predominantes fueron el azul, salmón, rosa y tornasol.
Con un cierre espectacular, lleno de aplausos y totalmente mexicano, Lydia Lavín reafirmó su amor por México con diseños que rescatan la vestimenta de los pueblos indígenas de Oaxaca y Yucatán. Tomó como base los típicos rebozos y zarapes, prendas que figuraron en cada pieza y que generó un juego de texturas y relieves en detalles de terciopelo. La diversidad fue evidente en los vestidos largos que desfilaron y ofrecieron un bufet de colores representativos de este país, como los rojos, verdes oscuros, naranjas y tonos ocres.
La diseñadora acompañó sus creaciones con accesorios que dan mayor impacto a las prendas: cinturones de chaquira, bordados artesanales florales y collares dorados de corcholatas deformadas. Así y junto a su hija, Lydia culminó la pasarela agradeciendo a los asistentes su reconocimiento.