Entretenimiento
Cannes alista su alfombra roja
La fiesta de cine celebrada en Francia presenta en su cartelera a nombres bien conocidos por los cinéfilos
CANNES, FRANCIA (11/MAY/2010).-
El festival de Cannes tiene todo listo para arrancar el próximo miércoles, con una selección de películas donde predominan los nombres consagrados y hay poco margen para las propuestas comerciales. Ejemplo de esto son las cintas de Ridley Scott, Woody Allen u Oliver Stones, que están fuera de la selección oficial.
Dieciocho filmes -frente a los 20 ó 22 habituales- optarán por la Palma de Oro.
Biutiful, de Alejandro González Iñárritu, con Javier Bardem como protagonista, es una de las cintas más esperadas, junto a la segunda parte de Quemados por el Sol, que presentará Nikita Mikhalkov; Outrage, del siempre sorprendente Takeshi Kitano, o Another year, de Mike Leigh, la única muestra del cine británico a competición.
El veterano realizador Bertrand Tavernier llevará a Cannes una historia de capa y espada, La princesse de Montpensier, en tanto que el chino Wang Xiaoshuai -un nombre habitual en el palmarés de otro gran festival, el de la Berlinale- llegará con Rizhao Chongqing y el iraní Abbas Kiarostami con Copie conforme, con Juliette Binoche de protagonista.
Una de las novedades de este año es la solitaria presencia de Doug Liman como representante de Estados Unidos en la competición. Con un reparto atractivo -Seann Penn y Naomi Watts en cabeza-, Liman concursará en Cannes con Fair game, basada en la historia de la agente de la CIA Valerie Plame.
Francia contará con una fuerte presencia, como siempre en Cannes, con cuatro filmes a competición. Además de Tavernier, estarán Mathieu Amalric, con Tournée; Xavier Beauvois, con Des hommes et des dieux y Rachid Bouchareb, con Hors la loi.
De Corea del Sur, The Housemaid, de Im Sangsoo; y Poetry, de Lee Chang-dong, ganador de varios galardones en Venecia en 2002 con Oasis; y de Italia Daniele Luchetti, con La nostra vita.
Y para los amantes de historias incomprensibles, seguro que el tailandés Apichatpong Weerasethakul no defraudará con Lung Boonmee raluek chat, cuya traducción es El tío Boonmee que recuerda sus vidas pasadas.
Completan la selección oficial el ucraniano Sergei Loznitsa, con Schastye Moe; el chadiano Mahamat-Saleh Haroun, con Un homme qui crie, y el húngaro Kornél Mundruczó, con Szelid Teremtés. A Frankenstein terv.
Dieciocho filmes que conforman una heterogénea sección oficial y a uno de los cuales irá a parar la Palma de Oro, concedida por un jurado mas heterogéneo si cabe, presidido por el director estadounidense Tim Burton y acompañado, entre otros por el realizador español Víctor Erice y el actor boricua Benicio del Toro.
Redondean sus opciones
Fuera de la competición oficial se podrán ver algunos de los filmes más atractivos para el público, con nombres que suelen impactar las taquillas de todo el mundo.
Como la enésima versión de Robin Hood, de Ridley Scott, que abrirá el festival con Russell Crowe y Cate Blanchett, o lo último de Woody Allen, You will meet a tall dark stranger, con Naomi Watts, Anthony Hopkinks, Josh Brolin y Antonio Banderas (cuya presencia no está confirmada en Cannes).
También la segunda parte de Wall Street, con Michael Douglas de nuevo en la piel de Gordon Gekko, el tiburón de las finanzas que en esta ocasión está recién salido de la cárcel. Una historia que parece sacada de la más absoluta actualidad.
Y entre todos estos nombres, dos de los más veteranos del cine, ambos en la sección paralela Un certain regard. El portugués Manoel de Oliveira, con 101 años el más anciano de los directores en activo, que llevará a Cannes O Estranho Caso de Angélica, con la española Pilar López de Ayala. Un poco más joven, el francés Jean-Luc Godard, de 79 años, con Film Socialisme, con la cantante Patti Smith.
Títulos de filmes a los que se unirán un sinfín de caras conocidas, algunas para promocionar sus trabajos y otras simplemente para dejarse ver.
Entre las figuras cuya asistencia se tienen contempladas se cuentan nombres como Diane Kruger, Eva Longoria, Laetitia Casta, Evangeline Lily, Milla Jovovich, Cheryl Cole o Mick Jager. Y muchos rumores que hablan de la presencia de los habituales de Cannes Brad Pitt y Angelina Jolie o del joven vampiro Robert Pattinson.
Atentos a la naturaleza
Ceniza volcánica, invitada incomoda
A pocas horas del arranque del Festival de Cine de Cannes, los organizadores se encuentran pendientes del cielo, pero no por miedo a la lluvia, sino a las cenizas del volcán islandés Eyjafjallajökull que amenazan con “aguar la fiesta”.
Las partículas nórdicas obligaron a cancelar el pasado fin de semana más e veintena de vuelos que debían aterrizar o despegar desde Niza, el aeropuerto más cercano a la Croisette, la mayoría de ellos de la compañía de vuelos económicos EasyJet.
El director del Festival, Thierry Frémaux, asegura que no está preocupado, dado que las previsiones de la Dirección General de la Aviación Civil son, por el momento, alentadoras.
El teniente de alcalde de la ciudad de la Costa Azul, David Lisnard, prefirió tomarse con humor el asunto: “Ya veo que todo el mundo quiere venir a Cannes, incluso la nube”.
Si ahora el riesgo viene de arriba, el martes pasado un violento vendaval sacudió la costa mediterránea francesa y olas de seis metros se llevaron por delante los preparativos del Festival a ocho días del inicio.
Están siendo necesarias largas jornadas de duro trabajo para reconstruir los “importantes daños” provocados por el mar que ascienden a varios millones de euros.
Lisnard prometió entonces que “todo estaría listo, limpio, impecable y soleado” a tiempo, aunque “el festival no se desarrollará como estaba previsto”.
Esta no es la única edición en la que la naturaleza amenaza a la que es una de las manifestaciones más importantes del mundo del cine.
En 2003 fue el Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG) y el año pasado, la gripe H1N1. “Ahora nos tocan las cenizas volcánicas”, señalan en el servicio de comunicación del festival, como recoge el periódico francés Le Figaro.
Thierry Frémaux, director del festival, espera que las cenizas del volcán islandés Eyjafjallajökull no afecten demasiado las actividades al aire libre en Cannes.
Dieciocho filmes -frente a los 20 ó 22 habituales- optarán por la Palma de Oro.
Biutiful, de Alejandro González Iñárritu, con Javier Bardem como protagonista, es una de las cintas más esperadas, junto a la segunda parte de Quemados por el Sol, que presentará Nikita Mikhalkov; Outrage, del siempre sorprendente Takeshi Kitano, o Another year, de Mike Leigh, la única muestra del cine británico a competición.
El veterano realizador Bertrand Tavernier llevará a Cannes una historia de capa y espada, La princesse de Montpensier, en tanto que el chino Wang Xiaoshuai -un nombre habitual en el palmarés de otro gran festival, el de la Berlinale- llegará con Rizhao Chongqing y el iraní Abbas Kiarostami con Copie conforme, con Juliette Binoche de protagonista.
Una de las novedades de este año es la solitaria presencia de Doug Liman como representante de Estados Unidos en la competición. Con un reparto atractivo -Seann Penn y Naomi Watts en cabeza-, Liman concursará en Cannes con Fair game, basada en la historia de la agente de la CIA Valerie Plame.
Francia contará con una fuerte presencia, como siempre en Cannes, con cuatro filmes a competición. Además de Tavernier, estarán Mathieu Amalric, con Tournée; Xavier Beauvois, con Des hommes et des dieux y Rachid Bouchareb, con Hors la loi.
De Corea del Sur, The Housemaid, de Im Sangsoo; y Poetry, de Lee Chang-dong, ganador de varios galardones en Venecia en 2002 con Oasis; y de Italia Daniele Luchetti, con La nostra vita.
Y para los amantes de historias incomprensibles, seguro que el tailandés Apichatpong Weerasethakul no defraudará con Lung Boonmee raluek chat, cuya traducción es El tío Boonmee que recuerda sus vidas pasadas.
Completan la selección oficial el ucraniano Sergei Loznitsa, con Schastye Moe; el chadiano Mahamat-Saleh Haroun, con Un homme qui crie, y el húngaro Kornél Mundruczó, con Szelid Teremtés. A Frankenstein terv.
Dieciocho filmes que conforman una heterogénea sección oficial y a uno de los cuales irá a parar la Palma de Oro, concedida por un jurado mas heterogéneo si cabe, presidido por el director estadounidense Tim Burton y acompañado, entre otros por el realizador español Víctor Erice y el actor boricua Benicio del Toro.
Redondean sus opciones
Fuera de la competición oficial se podrán ver algunos de los filmes más atractivos para el público, con nombres que suelen impactar las taquillas de todo el mundo.
Como la enésima versión de Robin Hood, de Ridley Scott, que abrirá el festival con Russell Crowe y Cate Blanchett, o lo último de Woody Allen, You will meet a tall dark stranger, con Naomi Watts, Anthony Hopkinks, Josh Brolin y Antonio Banderas (cuya presencia no está confirmada en Cannes).
También la segunda parte de Wall Street, con Michael Douglas de nuevo en la piel de Gordon Gekko, el tiburón de las finanzas que en esta ocasión está recién salido de la cárcel. Una historia que parece sacada de la más absoluta actualidad.
Y entre todos estos nombres, dos de los más veteranos del cine, ambos en la sección paralela Un certain regard. El portugués Manoel de Oliveira, con 101 años el más anciano de los directores en activo, que llevará a Cannes O Estranho Caso de Angélica, con la española Pilar López de Ayala. Un poco más joven, el francés Jean-Luc Godard, de 79 años, con Film Socialisme, con la cantante Patti Smith.
Títulos de filmes a los que se unirán un sinfín de caras conocidas, algunas para promocionar sus trabajos y otras simplemente para dejarse ver.
Entre las figuras cuya asistencia se tienen contempladas se cuentan nombres como Diane Kruger, Eva Longoria, Laetitia Casta, Evangeline Lily, Milla Jovovich, Cheryl Cole o Mick Jager. Y muchos rumores que hablan de la presencia de los habituales de Cannes Brad Pitt y Angelina Jolie o del joven vampiro Robert Pattinson.
Atentos a la naturaleza
Ceniza volcánica, invitada incomoda
A pocas horas del arranque del Festival de Cine de Cannes, los organizadores se encuentran pendientes del cielo, pero no por miedo a la lluvia, sino a las cenizas del volcán islandés Eyjafjallajökull que amenazan con “aguar la fiesta”.
Las partículas nórdicas obligaron a cancelar el pasado fin de semana más e veintena de vuelos que debían aterrizar o despegar desde Niza, el aeropuerto más cercano a la Croisette, la mayoría de ellos de la compañía de vuelos económicos EasyJet.
El director del Festival, Thierry Frémaux, asegura que no está preocupado, dado que las previsiones de la Dirección General de la Aviación Civil son, por el momento, alentadoras.
El teniente de alcalde de la ciudad de la Costa Azul, David Lisnard, prefirió tomarse con humor el asunto: “Ya veo que todo el mundo quiere venir a Cannes, incluso la nube”.
Si ahora el riesgo viene de arriba, el martes pasado un violento vendaval sacudió la costa mediterránea francesa y olas de seis metros se llevaron por delante los preparativos del Festival a ocho días del inicio.
Están siendo necesarias largas jornadas de duro trabajo para reconstruir los “importantes daños” provocados por el mar que ascienden a varios millones de euros.
Lisnard prometió entonces que “todo estaría listo, limpio, impecable y soleado” a tiempo, aunque “el festival no se desarrollará como estaba previsto”.
Esta no es la única edición en la que la naturaleza amenaza a la que es una de las manifestaciones más importantes del mundo del cine.
En 2003 fue el Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG) y el año pasado, la gripe H1N1. “Ahora nos tocan las cenizas volcánicas”, señalan en el servicio de comunicación del festival, como recoge el periódico francés Le Figaro.
Thierry Frémaux, director del festival, espera que las cenizas del volcán islandés Eyjafjallajökull no afecten demasiado las actividades al aire libre en Cannes.