Economía
México, sin aumentar nivel de importación de alimentos
Según analistas se debe transformar las políticas agropecuarias para generar un campo más productivo
CIUDAD DE MÉXICO (19/MAY/2013).- México ha mantenido en los dos últimos años un nivel similar de importación de alimentos, que si bien ayuda a contener un alza mayor de precios en algunos casos, lo ideal es transformar las políticas agropecuarias para generar un campo más productivo, coincidieron analistas.
Para el titular de la cátedra de Proyectos Agropecuarios Internacionales del Centro de Alta Dirección en Economía y Negocios de la Universidad Anáhuac, Julio Escandón, se requiere una transformación de las políticas del campo, que incluyan una regularización en la tenencia de la tierra, en específico en los ejidos.
Ejemplificó que la reciente eliminación de aranceles para la importación de limón y tomate es una medida de corto plazo, y que podría acarrear una mala señal a quienes estarían dispuestos a invertir en el campo mexicano y generar producción nacional de los productos que hoy tienen escasez.
Escandón llamó en ese sentido a crear políticas de fondo de mediano y largo plazos, con consensos entre todos los actores políticos, que generen un campo más productivo y que esté en condiciones de afrontar coyunturas como las sequías y heladas que propician escasez de alimentos.
Y es que de 2011 a 2012, México importó alimentos por un volumen de 66 mil 912.5 millones de kilogramos y un importe de 54 mil 811.2 millones de dólares entre productos agropecuarios, agroindustriales y pesqueros.
En promedio, estas importaciones registran niveles similares entre los dos años de referencia: 33 mil 487. 1 millones de kilos en 2011 y 33 mil 425. 4 millones de kilos en 2012, por un importe de 27 mil 066.8 millones de dólares y 27 mil 744.4 millones de dólares, respectivamente, de acuerdo con información de la Secretaría de Agricultura.
El especialista de la Universidad Anáhuac ve díficil que en la actual coyuntura de precios altos en ciertos productos agropecuarios, los comerciantes "en automático bajen los precios" ante el anuncio de la eliminación de aranceles.
Comentó que si bien la fortaleza del peso frente al dólar favorece en este momento las importaciones, tampoco será definitiva su subvaluación.
"En el mediano plazo tal vez logre contener el incremento en los precios, pero no veo que se logre empujar muy fuerte hacia la baja a los precios; continuará la presión", aseguró.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en abril pasado el Índice Nacional de Precios al Consumidor, general fue de 0.7 por ciento y la acumulada de 4.65 por ciento.
Cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revelan que de marzo de 2012 a igual mes de 2013, México registró los precios más altos entre las 34 naciones que conforman el organismo, al aumentar 8.4 por ciento.
En tanto que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura (FAO) señala que durante el primer trimestre del año, el índice de precios de frutas y hortalizas en México experimentó un abrupto ascenso de 8.7 por ciento, lo que impactó en dos terceras partes del incremento general en el índice de precios de los alimentos.
Durante el lapso de referencia, el alza en el precio de las frutas representó 40 por ciento en el aumento total de la canasta alimentaria rural de México, que pasó de 823.96 pesos en diciembre de 2012, a 838.18 pesos en marzo de 2013.
Así, en 2011 y de acuerdo con datos de la Sagarpa, los principales productos agropecuarios que México importó fueron por orden de mayor a menor volumen maíz amarillo, habas de soya, trigo común (duro), semilla de nabo, maíz blanco (harinero), sorgo de grano, algodón sin cardar ni peinar, quesos y requesón; trigo, semillas, frutos y esporas, para siembra.
En tanto que la compra de productos agroindustriales en ese año de mayor a menor volumen fueron despojos de la industria alimentaria, carnes y despojos de aves de corral; carne de porcino, fresca o refrigerada, carne de bovino, fresca o refrigerada, leche concentrada con azúcar y fructosa.
Así como preparaciones alimenticias, carnes y despojos de otras especies, aceite de palma, chocolate y otros con cacao.
Y en cuanto a las importaciones pesqueras en 2011 de mayor a menor volumen: filetes y demás carne de pescado, pescado congelado, excepto filete, crustraceos, excepto camarón congelado; pescado seco, salado o en salmuera; camarón congelado, moluscos y peces vivos.
Mientras que en 2012, los tres principales productos agropecuarios de importación fueron maíz amarillo con ocho mil 076.8 millones de kilos, por un valor de dos mil 427.5 millones de dólares.
Le sigue habas de soya con un valor de mil 991.8 millones de dólares y un volumen de tres mil 477.2 millones de kilos.
En tercer lugar se encuentra trigo común con tres mil 483.9 millones de kilos, por un monto económico de mil 130.9 millones de dólares.
Para el titular de la cátedra de Proyectos Agropecuarios Internacionales del Centro de Alta Dirección en Economía y Negocios de la Universidad Anáhuac, Julio Escandón, se requiere una transformación de las políticas del campo, que incluyan una regularización en la tenencia de la tierra, en específico en los ejidos.
Ejemplificó que la reciente eliminación de aranceles para la importación de limón y tomate es una medida de corto plazo, y que podría acarrear una mala señal a quienes estarían dispuestos a invertir en el campo mexicano y generar producción nacional de los productos que hoy tienen escasez.
Escandón llamó en ese sentido a crear políticas de fondo de mediano y largo plazos, con consensos entre todos los actores políticos, que generen un campo más productivo y que esté en condiciones de afrontar coyunturas como las sequías y heladas que propician escasez de alimentos.
Y es que de 2011 a 2012, México importó alimentos por un volumen de 66 mil 912.5 millones de kilogramos y un importe de 54 mil 811.2 millones de dólares entre productos agropecuarios, agroindustriales y pesqueros.
En promedio, estas importaciones registran niveles similares entre los dos años de referencia: 33 mil 487. 1 millones de kilos en 2011 y 33 mil 425. 4 millones de kilos en 2012, por un importe de 27 mil 066.8 millones de dólares y 27 mil 744.4 millones de dólares, respectivamente, de acuerdo con información de la Secretaría de Agricultura.
El especialista de la Universidad Anáhuac ve díficil que en la actual coyuntura de precios altos en ciertos productos agropecuarios, los comerciantes "en automático bajen los precios" ante el anuncio de la eliminación de aranceles.
Comentó que si bien la fortaleza del peso frente al dólar favorece en este momento las importaciones, tampoco será definitiva su subvaluación.
"En el mediano plazo tal vez logre contener el incremento en los precios, pero no veo que se logre empujar muy fuerte hacia la baja a los precios; continuará la presión", aseguró.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en abril pasado el Índice Nacional de Precios al Consumidor, general fue de 0.7 por ciento y la acumulada de 4.65 por ciento.
Cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revelan que de marzo de 2012 a igual mes de 2013, México registró los precios más altos entre las 34 naciones que conforman el organismo, al aumentar 8.4 por ciento.
En tanto que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura (FAO) señala que durante el primer trimestre del año, el índice de precios de frutas y hortalizas en México experimentó un abrupto ascenso de 8.7 por ciento, lo que impactó en dos terceras partes del incremento general en el índice de precios de los alimentos.
Durante el lapso de referencia, el alza en el precio de las frutas representó 40 por ciento en el aumento total de la canasta alimentaria rural de México, que pasó de 823.96 pesos en diciembre de 2012, a 838.18 pesos en marzo de 2013.
Así, en 2011 y de acuerdo con datos de la Sagarpa, los principales productos agropecuarios que México importó fueron por orden de mayor a menor volumen maíz amarillo, habas de soya, trigo común (duro), semilla de nabo, maíz blanco (harinero), sorgo de grano, algodón sin cardar ni peinar, quesos y requesón; trigo, semillas, frutos y esporas, para siembra.
En tanto que la compra de productos agroindustriales en ese año de mayor a menor volumen fueron despojos de la industria alimentaria, carnes y despojos de aves de corral; carne de porcino, fresca o refrigerada, carne de bovino, fresca o refrigerada, leche concentrada con azúcar y fructosa.
Así como preparaciones alimenticias, carnes y despojos de otras especies, aceite de palma, chocolate y otros con cacao.
Y en cuanto a las importaciones pesqueras en 2011 de mayor a menor volumen: filetes y demás carne de pescado, pescado congelado, excepto filete, crustraceos, excepto camarón congelado; pescado seco, salado o en salmuera; camarón congelado, moluscos y peces vivos.
Mientras que en 2012, los tres principales productos agropecuarios de importación fueron maíz amarillo con ocho mil 076.8 millones de kilos, por un valor de dos mil 427.5 millones de dólares.
Le sigue habas de soya con un valor de mil 991.8 millones de dólares y un volumen de tres mil 477.2 millones de kilos.
En tercer lugar se encuentra trigo común con tres mil 483.9 millones de kilos, por un monto económico de mil 130.9 millones de dólares.