Deportes
Aficionados de Liverpool, expectantes por los cambios
Los seguidores del Liverpool están encantados con la idea de que los propietarios del club se vayan, pero no recibirán con los brazos abiertos a los nuevos
Liverpool se ‘pondría Medias Rojas’
LIVERPOOL, INGLATERRA (07/OCT/2010).- Los seguidores del Liverpool están encantados con la idea de que los propietarios del club del futbol inglés, Tom Hicks y George Gillett, puedan ser obligados a alejarse de Anfield, aunque no recibirán a sus reemplazantes con los brazos abiertos.
Si la firma New England Sports Ventures (NESV) completa su propuesta de compra del club de la Liga Premier, es poco probable que banderas de Estados Unidos repentinamente se pongan de moda en la tribuna principal del mítico estadio del Liverpool.
"Los nuevos dueños no están llegando a un club de aficionados con los brazos abiertos", aclaró ayer un comunicado del grupo de aficionados denominado “Spirit of Shankly”.
"Habrá una amable mano extendida de bienvenida y otra con una lista de preguntas que exigirán honestidad y respuestas abiertas antes de que cualquier bienvenida se convierta en cálida", agregó.
La expresión de “Spirit of Shankly” y otros grupos es una demostración del rechazo que Hicks y Gillett se fueron ganando en los últimos tres años.
Después de haber recibido promesas de que el club no pediría préstamos y de que un nuevo estadio era inminente, la confusión surgió en los hinchas y fue seguida de frustración y furia.
Les Lawson, presidente del club oficial de aficionados del Liverpool, acepta que cualquier nuevo dueño querrá hacer dinero, aunque espera que quienes lleguen aprendan de los errores de los estadounidenses Hicks y Gillett.
"Cuando ellos asumieron en 2007, el Liverpool estaba por jugar su segunda final de la Liga de Campeones en tres años", recordó Lawson.
"Bajo su mala gestión del club, no nos clasificamos a la Liga de Campeones la temporada pasada y ahora estamos entre los tres últimos (de la Liga Premier), luego de no haber invertido dinero en los últimos cuatro mercados de pases".
Lawson mostró su enojo y, aunque reconoció que el club era un medio para conseguir dinero, instó a que se le dé importancia al futbol.
"Todo lo que ellos querían era hacer dinero, yo no les daría ni el dinero para el taxi hasta el aeropuerto Speke", expresó el aficionado.
"El Liverpool es una de las marcas deportivas más importantes del mundo y eso es algo que puede aprovecharse para hacer dinero, pero cuando uno tiene éxito en la cancha, eso trae éxito fuera de ella".
LIVERPOOL, INGLATERRA (07/OCT/2010).- Los seguidores del Liverpool están encantados con la idea de que los propietarios del club del futbol inglés, Tom Hicks y George Gillett, puedan ser obligados a alejarse de Anfield, aunque no recibirán a sus reemplazantes con los brazos abiertos.
Si la firma New England Sports Ventures (NESV) completa su propuesta de compra del club de la Liga Premier, es poco probable que banderas de Estados Unidos repentinamente se pongan de moda en la tribuna principal del mítico estadio del Liverpool.
"Los nuevos dueños no están llegando a un club de aficionados con los brazos abiertos", aclaró ayer un comunicado del grupo de aficionados denominado “Spirit of Shankly”.
"Habrá una amable mano extendida de bienvenida y otra con una lista de preguntas que exigirán honestidad y respuestas abiertas antes de que cualquier bienvenida se convierta en cálida", agregó.
La expresión de “Spirit of Shankly” y otros grupos es una demostración del rechazo que Hicks y Gillett se fueron ganando en los últimos tres años.
Después de haber recibido promesas de que el club no pediría préstamos y de que un nuevo estadio era inminente, la confusión surgió en los hinchas y fue seguida de frustración y furia.
Les Lawson, presidente del club oficial de aficionados del Liverpool, acepta que cualquier nuevo dueño querrá hacer dinero, aunque espera que quienes lleguen aprendan de los errores de los estadounidenses Hicks y Gillett.
"Cuando ellos asumieron en 2007, el Liverpool estaba por jugar su segunda final de la Liga de Campeones en tres años", recordó Lawson.
"Bajo su mala gestión del club, no nos clasificamos a la Liga de Campeones la temporada pasada y ahora estamos entre los tres últimos (de la Liga Premier), luego de no haber invertido dinero en los últimos cuatro mercados de pases".
Lawson mostró su enojo y, aunque reconoció que el club era un medio para conseguir dinero, instó a que se le dé importancia al futbol.
"Todo lo que ellos querían era hacer dinero, yo no les daría ni el dinero para el taxi hasta el aeropuerto Speke", expresó el aficionado.
"El Liverpool es una de las marcas deportivas más importantes del mundo y eso es algo que puede aprovecharse para hacer dinero, pero cuando uno tiene éxito en la cancha, eso trae éxito fuera de ella".