Cultura
Larry Braggs quiere conquistar Guadalajara
El reconocido jazzista está ansioso por impartir el Seminario de Voz y compartir el escenario con otros maestros internacionales de la música, en el marco del Festival Tónica
GUADALAJARA, JALISCO (09/JUN/2014).- Aunque se ha presentado en la Ciudad de México, será la primera ocasión en que el legendario vocalista de jazz Larry Braggs visite esta ciudad para tomar parte dentro del Festival Internacional de Jazz en Jalisco Tónica 2014 —del 3 al 13 de julio próximo—, como maestro de un Seminario Internacional de Voz, y también como integrante de un ensamble de profesionales que, como el año anterior, se prevé que clausure el encuentro con un concierto colectivo.
Braggs, nacido en Chicago (Estados Unidos) en 1963, admite su entusiasmo por venir a Guadalajara “para participar en un festival que, para mí, puede significar una experiencia completamente nueva en mi vida; no he estado nunca en Guadalajara y, a pesar de haber tenido presentaciones en la Ciudad de México, ahora tendré la oportunidad de dar clases”.
Graduado en Música Clásica —con especialidad en canto— por la Universidad de Arkansas en Pine Bluffs, para el cantante siempre ha sido importante no alejarse de la docencia, por ello, el seminario que impartirá en Guadalajara, Braggs apunta que su propósito es “enfocarme en las habilidades que ya tienen, porque sé que se tratará de cantantes formados. De esta manera, la idea es probar sus capacidades y enseñar cómo ser profesionales en el escenario, conocer una sección de ritmos, saber lo que acontece detrás de uno, conducir al grupo con el que se trabaja, cosas como esa”.
SU VIDA COMO SOLISTA
El músico detalla que encarar una carrera de solista en este punto “es un riesgo, por supuesto, pero no puedo saber del todo si no lo intento; lo que no puedo es quedarme estático por miedo, entiendo que no debo temer al fracaso porque quienes no fracasan es sólo porque no intentan. En mi caso, no sólo apuesto por un EP sino también, por una compañía de grabación propia; eso es excitante”.
Braggs es consciente de que el negocio de la música no es el mismo al de hace algunos años y se mantiene en constante transformación; por eso fue que prefirió grabar y promover un EP y no un disco “en forma”, no sólo porque la fácil difusión a través de redes sociales y la web, sino “porque la inversión se reduce cuando grabas cinco o seis buenas canciones en lugar de reunir 12 o 13 para un álbum, incrementando los costos y, probablemente, las pérdidas. En cuestiones de marketing se necesita estar siempre atento y hacer uso de lo que funciona”.
UN VOCALISTA INDEPENDIENTE
En diciembre pasado, el cantante abandonó su puesto como vocalista líder para Tower of Power —agrupación con quien trabajó por 14 años—, en buena medida “porque hacíamos cerca de 200 shows en el año, una labor muy intensa; pero también quería hacer cosas distintas en mi carrera. Fue una decisión un tanto agridulce, pero debe hacerse si se quiere crecer en otros aspectos y, ahora, encaro una etapa como solista y me entusiasma que estoy por promover un nuevo disco en solitario, un EP que aparecerá este verano donde colaboran grandes nombres como David Sanborn o Marcus Miller”.
En este punto, el intérprete señala que es “crucial, estoy en un momento en el que he decidido dar un paso adelante y continuar; pude haberme quedado en una posición cómoda y continuar así, trabajando y viajando, lo que no está mal pero, si se desea intentar algo nuevo a veces se necesita realizar un movimiento drástico. En mi caso, no ha sido tan drástico, pero era necesario hacer algo distinto”.
Para Braggs, la cuestión es estar convencido de que “siempre hay algo nuevo por hacer, puede uno reinventarse infinitamente, uno nunca deja de proyectarse metas y aquellos que se sienten completos simplemente dejan de crecer; si uno desea continuar en este crecimiento, se necesita dar vuelta a la página y asumir el reto, buscar llegar siempre a un nivel más alto”.
SUS ORÍGENES
Con una larga carrera en la que ha colaborado con algunos de los más importantes artistas de todos los tiempos en su ámbito, Braggs recuerda que “nací y crecí en un barrio pequeño y pobre de Chicago, de donde salí por mis propios medios, para ser el primer miembro de la familia con educación univrsitaria; además, fui bendecido con una voz fuerte. Si pienso en eso y en que he podido actuar a lado de James Brown, Little Richard o Tom Jones —a quienes admiro muchísimo—, no olvido que lo que aprendí de ellos fue cómo ser un verdadero profesional”.
El intérprete detalla que su estimo hacia ellos se originó, porque “me enseñaron que no importa lo que cante ni cuántas personas lleguen al concierto, uno debe hacer siempre lo mejor que puede sin importar quién se halla en la audiencia; siempre habrá uno que escuche y a ese debemos tocarlo con el don particular que poseemos. Por eso debemos asegurarnos que nuestra actuación sea la mejor en cada momento”.
EL RETO: ACTUAR EN VIVO
Cualquiera puede hacer un disco en la actualidad, según Braggs, gracias a la tecnología, pero “eventualmente, uno deberá actuar en vivo. En lugares como Europa o Latinoamérica aún se aprecia la música en vivo, porque a pesar de los errores, todo lo que sucede en un concierto es novedoso, las versiones son diferentes. Digo, a mí me gusta la música de estudio pero, un concierto en vivo es lo que prueba al artista, ante sí mismo y los demás”.
En Guadalajara se prevé una presentación en vivo al lado de otros maestros internacionales, algo que Braggs espera “con ansia, aunque no he tocado, hasta ahora, con ninguno de los que estarán en la ciudad. Pero realmente no importa si nos conocemos o no, porque sin importar la formación precedente o cuestiones de tipo político. Por eso la música es maravillosa, porque puede romper toda clase de barreras”.
PERFIL
Más que un cantante
Braggs es considerado un auténtico showman, con un enorme rango y control de voz, capaz de transmitir numerosas emociones en cada una de sus interpretaciones.
Fue vocalista de la legendaria banda Tower of Power, de 1999 al 2013, tiempo en el que hizo suyo el repertorio de la agrupación y conquistó miles de fanáticos alrededor del mundo.
Braggs comenzó su formación musical bajo la dirección de Constance F. Duboise y, además de Tower of Power, fue asimismo líder del Coro Vesper, con quienes cantó en la presentación inaugural del edificio de Naciones Unidas en Viena, Austria.
El artista ha compartido el escenario con figuras de la talla de James Brown, Tom Jones, Stevie Ray Vaughan, Lenny Kravitz, entre muchos otros.
Braggs, nacido en Chicago (Estados Unidos) en 1963, admite su entusiasmo por venir a Guadalajara “para participar en un festival que, para mí, puede significar una experiencia completamente nueva en mi vida; no he estado nunca en Guadalajara y, a pesar de haber tenido presentaciones en la Ciudad de México, ahora tendré la oportunidad de dar clases”.
Graduado en Música Clásica —con especialidad en canto— por la Universidad de Arkansas en Pine Bluffs, para el cantante siempre ha sido importante no alejarse de la docencia, por ello, el seminario que impartirá en Guadalajara, Braggs apunta que su propósito es “enfocarme en las habilidades que ya tienen, porque sé que se tratará de cantantes formados. De esta manera, la idea es probar sus capacidades y enseñar cómo ser profesionales en el escenario, conocer una sección de ritmos, saber lo que acontece detrás de uno, conducir al grupo con el que se trabaja, cosas como esa”.
SU VIDA COMO SOLISTA
El músico detalla que encarar una carrera de solista en este punto “es un riesgo, por supuesto, pero no puedo saber del todo si no lo intento; lo que no puedo es quedarme estático por miedo, entiendo que no debo temer al fracaso porque quienes no fracasan es sólo porque no intentan. En mi caso, no sólo apuesto por un EP sino también, por una compañía de grabación propia; eso es excitante”.
Braggs es consciente de que el negocio de la música no es el mismo al de hace algunos años y se mantiene en constante transformación; por eso fue que prefirió grabar y promover un EP y no un disco “en forma”, no sólo porque la fácil difusión a través de redes sociales y la web, sino “porque la inversión se reduce cuando grabas cinco o seis buenas canciones en lugar de reunir 12 o 13 para un álbum, incrementando los costos y, probablemente, las pérdidas. En cuestiones de marketing se necesita estar siempre atento y hacer uso de lo que funciona”.
UN VOCALISTA INDEPENDIENTE
En diciembre pasado, el cantante abandonó su puesto como vocalista líder para Tower of Power —agrupación con quien trabajó por 14 años—, en buena medida “porque hacíamos cerca de 200 shows en el año, una labor muy intensa; pero también quería hacer cosas distintas en mi carrera. Fue una decisión un tanto agridulce, pero debe hacerse si se quiere crecer en otros aspectos y, ahora, encaro una etapa como solista y me entusiasma que estoy por promover un nuevo disco en solitario, un EP que aparecerá este verano donde colaboran grandes nombres como David Sanborn o Marcus Miller”.
En este punto, el intérprete señala que es “crucial, estoy en un momento en el que he decidido dar un paso adelante y continuar; pude haberme quedado en una posición cómoda y continuar así, trabajando y viajando, lo que no está mal pero, si se desea intentar algo nuevo a veces se necesita realizar un movimiento drástico. En mi caso, no ha sido tan drástico, pero era necesario hacer algo distinto”.
Para Braggs, la cuestión es estar convencido de que “siempre hay algo nuevo por hacer, puede uno reinventarse infinitamente, uno nunca deja de proyectarse metas y aquellos que se sienten completos simplemente dejan de crecer; si uno desea continuar en este crecimiento, se necesita dar vuelta a la página y asumir el reto, buscar llegar siempre a un nivel más alto”.
SUS ORÍGENES
Con una larga carrera en la que ha colaborado con algunos de los más importantes artistas de todos los tiempos en su ámbito, Braggs recuerda que “nací y crecí en un barrio pequeño y pobre de Chicago, de donde salí por mis propios medios, para ser el primer miembro de la familia con educación univrsitaria; además, fui bendecido con una voz fuerte. Si pienso en eso y en que he podido actuar a lado de James Brown, Little Richard o Tom Jones —a quienes admiro muchísimo—, no olvido que lo que aprendí de ellos fue cómo ser un verdadero profesional”.
El intérprete detalla que su estimo hacia ellos se originó, porque “me enseñaron que no importa lo que cante ni cuántas personas lleguen al concierto, uno debe hacer siempre lo mejor que puede sin importar quién se halla en la audiencia; siempre habrá uno que escuche y a ese debemos tocarlo con el don particular que poseemos. Por eso debemos asegurarnos que nuestra actuación sea la mejor en cada momento”.
EL RETO: ACTUAR EN VIVO
Cualquiera puede hacer un disco en la actualidad, según Braggs, gracias a la tecnología, pero “eventualmente, uno deberá actuar en vivo. En lugares como Europa o Latinoamérica aún se aprecia la música en vivo, porque a pesar de los errores, todo lo que sucede en un concierto es novedoso, las versiones son diferentes. Digo, a mí me gusta la música de estudio pero, un concierto en vivo es lo que prueba al artista, ante sí mismo y los demás”.
En Guadalajara se prevé una presentación en vivo al lado de otros maestros internacionales, algo que Braggs espera “con ansia, aunque no he tocado, hasta ahora, con ninguno de los que estarán en la ciudad. Pero realmente no importa si nos conocemos o no, porque sin importar la formación precedente o cuestiones de tipo político. Por eso la música es maravillosa, porque puede romper toda clase de barreras”.
PERFIL
Más que un cantante
Braggs es considerado un auténtico showman, con un enorme rango y control de voz, capaz de transmitir numerosas emociones en cada una de sus interpretaciones.
Fue vocalista de la legendaria banda Tower of Power, de 1999 al 2013, tiempo en el que hizo suyo el repertorio de la agrupación y conquistó miles de fanáticos alrededor del mundo.
Braggs comenzó su formación musical bajo la dirección de Constance F. Duboise y, además de Tower of Power, fue asimismo líder del Coro Vesper, con quienes cantó en la presentación inaugural del edificio de Naciones Unidas en Viena, Austria.
El artista ha compartido el escenario con figuras de la talla de James Brown, Tom Jones, Stevie Ray Vaughan, Lenny Kravitz, entre muchos otros.