Cultura
Hernán Rivera Letelier crea en papel la ''Hada del cine''
El escritor aborda la historia de una niña con un talento especial en el libro ''La contadora de películas''
CIUDAD DE MÉXICO (22/ABR/2011).- Una niña que vive en la pampa salitrera chilena, y tras un terrible accidente que deja a su padre paralítico y a su familia sin madre, encuentra su única diversión narrando filmes, lo que la llevará a ser conocida como el "Hada del cine", es la historia que plantea el más reciente libro de Hernán Rivera Letelier, "La contadora de películas".
A lo largo de 43 capítulos, el escritor chileno relata la historia de María Margarita, quien en compañía de sus cuatro hermanos varones se disputan el título de ser el mejor contador de películas, pues el ganador podrá asistir cada semana y platicarle a los demás las historias que se proyectan en la pantalla grande.
La fama de Margarita incrementa al grado que las personas prefieren escucharla a ella, en lugar de asistir a las salas de cine, sin embargo, los problemas surgen con la llegada de la televisión que amenaza con desaparecer el séptimo arte y con ello las narraciones de la conocida "Hada del cine".
"La contadora de películas" es parte de los 11 novelas que ha escrito Rivera Letelier. Según declaraciones que ha realizado el autor, esta historia surgió mientras trabajaba en "El arte de resurrección" (2010).
Asimismo ha manifestado que se inspiró en la anécdota que le contó un amigo, de que tenía un primo con un talento especial, como narrador oral. Tan bueno era que su familia, muy pobre, ahorraba para enviarlo al cine, de modo que a la vuelta le contara a todos la película que había visto.
La historia enamoró al escritor, razón por la que suspendió la escritura de su novela sobre el cristo de Elqui, para centrar su atención en escribir una novela breve no de un contador de películas, sino de una contadora, María Margarita.
Hernán Rivera Letelier nació en Talca en 1950. Vivió hasta los 11 años en la oficina salitrera Algorta, lugar al que se refiere constantemente en sus novelas.
Años más tarde se trasladó con su familia a Antofogasta, donde murió su madre. Razón por la que sus hermanos se fueron a casa de sus tías y él se quedó sólo en esta ciudad, donde tuvo que vender diarios para sobrevivir.
Posteriormente trabajó como mensajero en la empresa Anglo Lautaro y a los 18 años entró a un taller eléctrico. Pero su espíritu aventurero lo llevó a recorrer, por tres años, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador y Argentina.
En 1973 regresó a Antofagsata e ingresó a trabajar en la empresa Mantos Blancos. Se casó con una niña de 17 años teniendo él 24 y continuó estudiando en la escuela nocturna séptimo y octavo grados, mientras que en Inacap obtuvo su licencia de enseñanza media.
Actualmente vive en Antofagasta con su esposa y cuatro hijos. Ha obtenido en dos oportunidades el Premio Consejo Nacional de Libro (1994 y 1996).
A lo largo de 43 capítulos, el escritor chileno relata la historia de María Margarita, quien en compañía de sus cuatro hermanos varones se disputan el título de ser el mejor contador de películas, pues el ganador podrá asistir cada semana y platicarle a los demás las historias que se proyectan en la pantalla grande.
La fama de Margarita incrementa al grado que las personas prefieren escucharla a ella, en lugar de asistir a las salas de cine, sin embargo, los problemas surgen con la llegada de la televisión que amenaza con desaparecer el séptimo arte y con ello las narraciones de la conocida "Hada del cine".
"La contadora de películas" es parte de los 11 novelas que ha escrito Rivera Letelier. Según declaraciones que ha realizado el autor, esta historia surgió mientras trabajaba en "El arte de resurrección" (2010).
Asimismo ha manifestado que se inspiró en la anécdota que le contó un amigo, de que tenía un primo con un talento especial, como narrador oral. Tan bueno era que su familia, muy pobre, ahorraba para enviarlo al cine, de modo que a la vuelta le contara a todos la película que había visto.
La historia enamoró al escritor, razón por la que suspendió la escritura de su novela sobre el cristo de Elqui, para centrar su atención en escribir una novela breve no de un contador de películas, sino de una contadora, María Margarita.
Hernán Rivera Letelier nació en Talca en 1950. Vivió hasta los 11 años en la oficina salitrera Algorta, lugar al que se refiere constantemente en sus novelas.
Años más tarde se trasladó con su familia a Antofogasta, donde murió su madre. Razón por la que sus hermanos se fueron a casa de sus tías y él se quedó sólo en esta ciudad, donde tuvo que vender diarios para sobrevivir.
Posteriormente trabajó como mensajero en la empresa Anglo Lautaro y a los 18 años entró a un taller eléctrico. Pero su espíritu aventurero lo llevó a recorrer, por tres años, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador y Argentina.
En 1973 regresó a Antofagsata e ingresó a trabajar en la empresa Mantos Blancos. Se casó con una niña de 17 años teniendo él 24 y continuó estudiando en la escuela nocturna séptimo y octavo grados, mientras que en Inacap obtuvo su licencia de enseñanza media.
Actualmente vive en Antofagasta con su esposa y cuatro hijos. Ha obtenido en dos oportunidades el Premio Consejo Nacional de Libro (1994 y 1996).