Un momento para la maternidad

GUADALAJARA, JALISCO (24/AGO/2012).- Que los cálculos no fallen. Existen mitos que pueden destantear la planificación familiar, sobre todo cuando ha concluido un embarazo recientemente.

Una de las leyendas urbanas más populares, es aquella que asegura que una mujer en lactancia puede aplazar un nuevo embarazo, y es verdad, aunque no exacto.

El gineco-obstetra Radame Rivas, miembro del Colegio Mexicano de Gineco-obstetricia, explica que durante la lactancia -periodo que corresponde al temporal en que la mujer alimenta a su hijo directamente del seno- se genera la hormona llamada prolactina, la responsable de inhibir la ovulación, que de no producirse constantemente aumenta las posibilidades de fertilidad en ese momento.

“El bebé debe alimentarse por lo menos de 10 a 14 veces al día, de modo que así pudiera ser que la mujer no se embarace, pero definitivamente en muchas ocasiones no es así, siempre hay madres que están lactando de manera irregular al dar pecho y además dan leches de fórmula (de polvo) eso hace que la frecuencia del amamantamiento sea menor y la prolactina disminuye”.

En este sentido, el especialista sugiere establecer medidas de “seguridad” que permitan una planificación familiar deseada, en la que pueden influir diversos factores como la abstención de relaciones sexuales con el fin de dar espacio a que el cuerpo de la madre se regenere, sobre todo cuando el alumbramiento fue a través de una cesaría. De lo contrario, los métodos médicos populares serán una herramienta más certera.

Entre los métodos de protección sexual, el gineco-obstetra sugiere la implementación de una tableta hormonal -especificada por el médico- con el propósito de disminuir el incremento de ovulación y ésta no afecte las propiedades de la leche materna ni genera efectos secundarios en el organismo del bebé y la madre.