Pekín.- China y la Unión Europea desarrollan un plan para enterrar dióxido de carbono de la atmósfera, uno de los causantes del efecto invernadero, en los fondos marinos del país asiático, informa hoy el diario estatal "China Daily".El proyecto, establecido en 2006 por las dos partes y que abarca también otras medidas para frenar la contaminación, estudia usar para ello yacimientos de petróleo abandonados en el mar de Bohai, un cerrado y muy contaminado mar en el norte de China y otras plataformas marinas más al sur.El comisario europeo de Ciencia e Investigación, Janez Potocnik, de visita en Pekín, señaló al rotativo que el proyecto está ahora en fase de estudio, pero espera que pronto comience la etapa de puesta en práctica y se logren los primeros resultados hacia 2015.El plan también incluye la construcción de centrales térmicas alimentadas por carbón (la principal fuente de energía de China) con baja emisión de dióxido de carbono, en las que ese gas contaminante será almacenado y enterrado.Aunque los yacimientos petrolíferos abandonados son "una buena elección" en opinión de Potocnik, grupos ecologistas internacionales como Greenpeace han expresado sus dudas sobre la idoneidad de estas técnicas, asegurando que el almacenamiento de CO2 en el subsuelo podría entrañar riesgos.Potocnik y otros ocho comisarios europeos forman una delegación en China encabezada por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, en la que ambas partes debaten medidas para afrontar el cambio climático.Los asuntos medioambientales son el primer punto de la agenda, pero también se espera que Durao Barroso trate con los líderes comunistas chinos otros temas como la situación de los derechos humanos en China o las protestas en el Tíbet.EFE 25-04-08 ERL.
