Adiós al 2009 en Europa

La tradición madrileña de las uvas salta rápidamente a la memoria al pensar en despedir el año en Europa, pero el viejo continente guarda muchas otras alborotosas sorpresas para aquél que decida aventurarse a explorar otras de sus legendarias ciudades durante la última noche del año.
Ámsterdam.

Ahí los cohetes comienzan a explotar desde las once en las calles que rodean el Nieuwmarkt Square del barrio chino de la ciudad. El Ámsterdam más tradicional, el de los canales y puentes floridos, se disfruta esa noche iluminado por las luces de las bengalas en la zona entre los puentes Prinsengracht und Bloemgracht.

La terraza del moderno Centro NEMO de las ciencias, se mantiene abierta también para desde sus alturas ver cómo el espectáculo de pirotécnica ilumina toda la ciudad.

Las fiestas más a la holandesa se celebran en las plazas de Leidseplein, Rembrandtplein y en la de Dam frente al Palacio Real.
Después de los fuegos la bohemia continúa en muchas de las discotecas y clubes de la ciudad durante toda la noche.

Si elige Holanda como su destino, la línea aérea holandesa KLM (www.klm.com) celebra sus 90 años de servicio con interesantes ofertas al aeropuerto de Schiphol en Ámsterdam. Con el Holland Pass (34 euros) podrá obtener hasta cinco entradas gratis y descuentos de hasta el 50% en los principales museos, atracciones y restaurantes de Ámsterdam y otras ciudades de Holanda.

Londres

Ahí los mejores fuegos artificiales se disfrutan en el área del London Eye. Desde la orilla contraria del río Támesis o desde alguna de las muchas pantallas que retransmiten el colorido espectáculo por toda la ciudad, ésta será testigo de cómo la gigantesca rueda de 135 metros se convierte esa noche en una plataforma de cohetes y luces. Las 12 campanadas del Big Ben mantienen la tradición y se dejan escuchar a través de altavoces colocados a lo largo de la orilla del río.

En la plaza de Trafalgar la fiesta es pública y bastante concurrida, por eso muchos londinenses reservan entrada en su Pub favorito y pasan la despedida en las animadas fiestas que éstos organizan. Reservar es importante para no quedarse tocando a la puerta.

El primero de enero no se quede en la cama sino que acompañe al más de medio millón de londinenses que animan la tradicional London New Year Parade. El desfile se inicia a al mediodía en Piccadilly y termina su recorrido de dos millas en Parliament Street a las tres de la tarde. Una manera alegre y extravagante de comenzar en año.

París

Los Champs-Elysees y su hermosa decoración navideña de luces y guirnaldas junto con la posibilidad de ver la Torre Eiffel mágicamente alumbrada hacen merecedor un viaje a París en Navidad. La torre y los parques a su alrededor son el escenario de los fuegos artificiales en la ciudad.

Los parisinos no son muy dados a festejar en medio del tumulto callejero pero hay ciertos lugares de la ciudad que se han convertido en un imán para celebrar la despedida del año. Uno de estos son los barcos que recorren el río Sena y que ofrecen además de un inolvidable recorrido fluvial cena y entretenimiento de gala durante esta noche. También en la Plaza de la Concorde se organiza espontáneamente la celebración así como en las alturas del barrio de Montmartre en cuyas calles y frente a su iglesia de Sacre-Coeur se reúnen artistas, músicos y gentes de todo el mundo a desearse un "bon année" disfrutando de la vista de París convertida bajo los fuegos artificiales en una verdadera ciudad luz.

En la página web parisinfo.com encontrará rebajas de hasta 60% en la reserva de hoteles así como útiles consejos para organizar su viaje a París. Asegúrese de preguntar en los hoteles seleccionados por especiales para la despedida del año.

Berlín

Inolvidablemente clásica y animada resulta la despedida de año bajo la puerta de Brandenburgo en Berlín. Ahí se organiza cada año la multitudinaria fiesta Berlín Open End. En el tramo de dos kilómetros que separan la Siegessäule o Columna de la Victoria de la Puerta de Brandenburgo se reúne cerca de un millón de personas para disfrutar no sólo del despliegue de fuegos artificiales que iluminan el histórico monumento sino de la música, los espectáculos y la oferta gastronómica que se ofrecen a lo largo del tramo.

Si la manera teutónica de celebrar Silvester - como se le llama ahí a la despedida del año- le resulta intimidante o excesiva en calorías y alcohol, Berlín ofrece también otras formas únicas de celebrar. Una de éstas es el tradicional Silvesterkonzert Unter den Linden, un concierto clásico en el principal teatro de ópera de la ciudad localizado en el hermoso boulevard Unter den Linden. En esa noche y luego de una cena de gala el coro de esta ópera y la Berliner Staatskapelle interpretan la clásica sinfonía Nr. 9 de Ludwig van Beethoven, este año bajo la batuta de Daniel Barenboim. Qué mejor que esta oda a la alegría para recibir las bondades del año nuevo.

La página web Visit Berlin en su ventana de "Packages" ofrece hasta el 31 de diciembre la oferta "Discover Berlin" que incluye 48 horas de transportación pública gratis y descuentos en las principales atracciones de la ciudad con la Berlin WelcomeCard así como dos noches de hotel con desayuno desde 74 euros a 109 euros por la habitación doble. También en la ventana "New Year's Eve in Berlin!" se encuentran las ofertas de cena, fiesta y hospedaje que ofrecen para esta noche los principales hoteles de la ciudad.

Otras opciones encantadoras

Otros lugares espectaculares desde donde despedir el año en Europa son las ciudades de Zurich y de Viena. En Zurich las luces de las casas de la ciudad y de las poblaciones alrededor de su famoso lago se apagan antes de que el reloj marque las doce para así hacer más impresionante el despliegue de fuegos artificiales sobre el lago.

En Viena el centro antiguo de la ciudad se transforma en un Silvesterpfad o sendero de Silvester. Ya desde temprano la música comienza a sonar en las calles del centro. Los más supersticiosos pueden en la Glücksmeile o milla de la suerte dejarse leer la fortuna para el año nuevo. Dos minutos antes de las doce comienza en el parque central de la ciudad la carrera del Vals Vienés (Walzerlauf ) en donde la meta se cruza preferiblemente bailando un vals de Johann Strauss como manera de "deslizarse" simbólicamente en el nuevo año. Las doce campanadas de la catedral Stephansdom dan la señal para el comienzo de los fuegos artificiales que se lanzan desde el Prater, el tradicional parque vienés de diversiones, e iluminan el cielo de la ciudad.

Enlaces:
www.iamsterdam.com
www.londonparade.co.uk
www.parisinfo.com
www.visitberlin.de