Tras tomar posesión como presidente de Estados Unidos (EU), Joe Biden firmó 17 decretos para eliminar acciones ejecutivas en materia migratoria, medio ambiente y salud, principalmente, implementadas por su predecesor, Donald Trump.

Entre las medidas más importantes está poner fin a la construcción del muro fronterizo con México, solicitando la cancelación de la emergencia nacional decretada por la pasada administración para destinar financiamiento a ese fin.

Ordenó también salvaguardar el programa que protege de la deportación a los “dreamers”, revisar las medidas a la hora de arrestar a inmigrantes indocumentados y contarlos de nuevo en el censo de población. 

Guadalupe González, analista internacional del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), resaltó que en materia de migración, el actual mandatario estadounidense busca evitar que la gente salga de sus países. “Ya se anunció un plan de ayuda para Centroamérica para enfrentar la crisis económica”.

Biden solicitó también que EU regrese al Acuerdo de París sobre el clima y anular la retirada de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Con relación al COVID-19, emitió una orden para que los estadounidenses usen mascarilla durante los primeros 100 días de su Gobierno.

Luego de que Twitter le entregara la cuenta oficial, el primer mensaje del demócrata fue sobre estas acciones ejecutivas: “No hay tiempo que perder cuando se trata de enfrentar las crisis que vivimos”.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador resaltó que coincide con los tres planteamientos de su homólogo: la necesidad de un nuevo plan migratorio, la reactivación económica y la atención de la pandemia.

CLAVES

Medidas de urgencia

Luego de asumir el cargo, el Presidente Joe Biden aprobó 17 medidas con carácter de urgente, para revertir decisiones tomadas en la pasada administración, algunas de éstas son: 

Muro. Cancelar la emergencia nacional que su predecesor Donald Trump había decretado para desviar fondos y financiar así la construcción del muro fronterizo con México, que por el momento queda en el aire.

Cubrebocas. Firmó una orden urgiendo a los estadounidenses a que usen mascarilla —que solo es obligatoria en algunos estados— durante los primeros 100 días de su presidencia para hacer frente a la pandemia. 

Acuerdo. Solicitará el reingreso de Estados Unidos al Acuerdo Climático de París, un proceso que tardará 30 días en hacerse efectivo, después de que Trump aprobase su salida en 2017.

OMS. Suspendió la salida de Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

Veto. Anuló el veto impuesto a los viajeros de 11 países, de mayoría musulmana. 

Soñadores. Ordenó salvaguardar el programa DACA, que protege de la deportación a unos 650 mil indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños, conocidos como "dreamers" o "soñadores".

Deportaciones. Extendió hasta el 30 de junio de 2022 la suspensión de las deportaciones y los permisos laborales para cerca de cuatro mil liberianos en EU, bajo un programa especial para refugiados de ese país.

Indocumentados. Ordenó la revisión de las prioridades del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) a la hora de arrestar a inmigrantes indocumentados. 

Censo. Contar de nuevo a los inmigrantes indocumentados en el censo de población, que se lleva a cabo cada 10 años y que sirve para asignar fondos y representación política.

Revisión. Congeló la implementación de medidas reguladoras aprobadas por Trump en las últimas horas de su Gobierno para revisarlas con detenimiento.

EFE

Biden y AMLO podrían ‘chocar’ en medio ambiente y seguridad

Pese a que apenas comienza la administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expertos en materia política y asuntos internacionales, consideran que podría haber diferencias muy marcadas con el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador en temas de medio ambiente y seguridad. 

Eduardo González, profesor de Relaciones Internacionales del Tecnológico de Monterrey, resaltó que las posiciones de los dos gobiernos “parecen opuestas en cuanto al apoyo que dará Biden a energías verdes, la Cuarta Transformación (4T), al contrario. En el papel será uno de los puntos donde pueda haber mayor discrepancias”.

Insistió en que no será fácil que todas las políticas ambientalistas lleguen a buen puerto entre ambas administraciones. “Incluso podría haber enfrentamientos con Canadá que no tiene políticas tan verdes como pensaríamos”.

Pese a considerar que podría haber un acercamiento en el tema de seguridad, por el discurso brindado por Biden con relación a ser más transparentes en este rubro, recordó que el problema se podría presentar en el caso del extitular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), general Salvador Cienfuegos y el control que pretende imponer México a agentes extranjeros, entre éstos los que integran la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés). 

Armando Zacarías, jefe del Departamento de Estudios Políticos de la Universidad de Guadalajara (UdeG), coincidió en que  habrá una relación complicada en la agenda de medio ambiente. “Habrá un choque constante por el cambio de óptica que se tiene sobre la utilización de estas energías. La 4T se inclina por el petróleo. La diferencia de criterios implicará discusiones profundas e importantes”, señaló. 

Advirtió que las discrepancias en el rubro de seguridad irán creciendo en las próximas semanas. “Habrá mucho trabajo diplomático para reconducir cómo harán en el tema de seguridad, que implica la seguridad migratoria en la frontera Sur de México”. 

Guadalupe González Chávez, analista internacional del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), destacó que ambos países trabajan en el control de armamento y mejorar las estrategias para enfrentar la delincuencia organizada. 

En materia económica, consideraron que podría haber menos conflicto. Eduardo González, académico del Tec de Monterrey, declaró que “las relaciones comerciales no sufrirán grandes transformaciones con la nueva administración demócrata”.

PRESIDENCIA

“Que le vaya muy bien”: López Obrador

El Presidente Andrés Manuel López Obrador, deseó “que le vaya muy bien en su gestión” a Joe Biden, quien ayer asumió la presidencia de Estados Unidos, recordando que es necesario no olvidar que en el vecino país del Norte trabajan 38 millones de mexicanos. 

“He estado leyendo y coincido en sus tres planteamientos principales: el que se atienda de inmediato a la pandemia, que les está afectando mucho, igual que a otros pueblos y a otras naciones. Eso es una prioridad”. 

El otro, dijo, la reactivación de la economía por la crisis generada por la pandemia. “El que se destinen fondos con ese propósito. Esto, adicionalmente nos beneficia, nos ayuda, por la integración económica que existe entre Estados Unidos y México”.

Añadió que el tercero, relacionado al tema migratorio, es el que tiene una relación más directa con México. “Hemos estado planteando que se debe regularizar a nuestros paisanos, que llevan años trabajando en ese país, contribuyendo al desarrollo de esa gran nación”.

Sobre los decretos firmados por Biden para generar nuevas políticas públicas en la materia, López Obrador subrayó que éstas permitirán enfrentar el fenómeno migratorio con desarrollo y bienestar.

“Este planteamiento se lo presenté al señor Biden desde hace ocho, nueve años (…). Ahí hablo de que se debe de regularizar la situación de nuestros paisanos que trabajan en Estados Unidos, y hablo también del plan de desarrollo conjunto para detener la migración, ofreciendo mejores condiciones de vida y de trabajo a los mexicanos”.

Llama a la unidad

Durante su primer mensaje, tras asumir como el presidente número 46 de Estados Unidos, Joe Biden hizo un llamado “a la unidad” de todos los estadounidenses.

“Hoy celebramos el triunfo no de un candidato sino de una causa, la causa de la democracia. La voluntad del pueblo se ha escuchado y la voluntad del pueblo se ha tomado en cuenta. Hemos aprendido otra vez que la democracia es valiosa. La democracia es frágil. En este momento, amigos míos, la democracia ha prevalecido”, destacó frente al Capitolio que dos semanas atrás fue asaltado por simpatizantes de su predecesor, Donald Trump. 

Recordó que pocas personas en la historia de su nación han tenido que enfrentarse a las dificultades que atraviesan actualmente, en referencia al COVID-19. Señaló que el virus ha tomado “tantas vidas” en un año (402 mil), como las que se perdieron durante la Segunda Guerra Mundial.  

El mandatario demócrata subrayó que es necesario enfrentar y vencer el extremismo político, el supremacismo blanco y el terrorismo interno. Para superar este desafío, dijo, se requiere unidad. “Hoy, en este día de enero, toda mi alma está en esto, uniendo a Estados Unidos, uniendo a nuestra gente, uniendo a nuestra nación, y le pido a todos los estadounidenses que se unan a nosotros en esta causa”. 

Reconoció que las fuerzas que dividen al país son reales y profundas. Por ello reiteró que será Presidente de todos los estadounidenses. “Les prometo que lucharé tan duro por aquellos que no me apoyaron como por aquellos que lo hicieron”.

Biden aseguró también que repararán las alianzas y reconectarán con el resto del mundo. 

Estuvo acompañado por Kamala Harris, quien hizo historia al convertirse en la primera mujer, persona de color y de origen asiático, en asumir la vicepresidencia de Estados Unidos.

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