Domingo, 16 de Junio 2024
Internacional | La caída del régimen soviético marcó la historia de Europa en el siglo XX

Se conmemoran 20 años del fin de la Unión Soviética

La caída del régimen soviético desencadenó la degradación de las infraestructuras, el empobrecimiento de la población y conflictos locales

Por: AFP

La dimisión de Gorbachov puso punto final a siete décadas del imperio comunista soviético. ARCHIVO  /

La dimisión de Gorbachov puso punto final a siete décadas del imperio comunista soviético. ARCHIVO /

MOSCÚ, RUSIA (23/DIC/2011).- El 25 de diciembre de 1991, el presidente soviético Mijail Gorbachov anunciaba su dimisión ante la televisión, poniendo punto final a siete décadas de imperio comunista y a un orden mundial basado en  la rivalidad con Estados Unidos.

"Viendo la situación (...), dejo de ejercer mis funciones en el cargo de  presidente de la URSS", dijo Gorbachov en la declaración histórica que concluía  meses de agonía del régimen soviético. Después de su partida, la bandera roja  con la hoz y el martillo era retirada del Kremlin.

Así se extinguió el imperio comunista que desempeñó un papel fundamental en  la victoria contra los nazis y envió al primer hombre al espacio, pero cuyos dirigentes eliminaron a millones de sus conciudadanos.

Asimismo era el fin definitivo de la Guerra Fría y de un mundo bipolar,  dejando paso a un panorama en el que Estados Unidos era la única superpotencia  mundial.

La mayoría de las 15 repúblicas soviéticas se convertían en independientes por primera vez en su historia y se veían ante el desafío de crear una  identidad nacional y una economía sólida, objetivos que muchas aún no han  logrado. Por su lado, Rusia sufre de haber perdido su status de superpotencia.

El hombre fuerte del país, Vladimir Putin, presidente entre 2000 y 2008 y  actualmente primer ministro, que anunció que intentará volver al Kremlin en la  elección presidencial de marzo de 2012, ha venido mostrando de forma cada vez  más abierta su nostalgia de la URSS.  

La Unión Soviética no era otra cosa que "la gran Rusia", declaró Putin, ex  agente del KGB, alimentando el nacionalismo de los rusos y en un momento  delicado para su gobierno, por las acusaciones de fraude en las legislativas de  comienzos de diciembre, que ganó su partido.

Su predecesor Boris Yeltsin, muerto en 2007, consideraba sin embargo que el  desmantelamiento de la Unión Soviética era ineluctable.

La URSS cayó sin causar un cataclismo, pero los años siguientes estuvieron  marcados por la degradación de las infraestructuras, el empobrecimiento de la  población y conflictos locales que costaron la vida a cientos de miles de  personas.

Tayikistán sufrió una guerra civil entre comunistas e islamistas. Armenia y  Azerbaiyán se enfrentaron por el control del territorio separatista de Nagorny  Karabaj. Rusia efectuó dos campañas sangrientas en su pequeña república rebelde  de Chechenia, en el Cáucaso, y Georgia combatió a los separatistas prorrusos en  Abjasia y Osetia del Sur.

Ninguno de esos conflictos ha quedado definitivamente solucionado, ya que  los islamistas siguen siendo una amenaza en Tayikistán, Nagorny Karabaj vive  una paz frágil, y en el Cáucaso ruso se ha extendido ahora una rebelión  islamista.

Por primera vez desde la caída de la URSS, Rusia envió sus tanques en  agosto de 2008 a una ex república soviética, Georgia, que quiso recuperar el  control de Osetia del Sur.

Después de varias tentativas de reformas liberales primero entusiastas  y  luego impopulares bajo la presidencia de Boris Yeltsin, Rusia mira al pasado  desde la llegada al poder de Vladimir Putin, que en 2005 calificó la  desaparición de la URSS como "la mayor catástrofe geopolítica del siglo XX".

El ex agente del KGB recuperó el himno soviético, impuso un control del  Estado sobre los medios de comunicación y dio a Rusia un papel preponderante  para federar a su alrededor a sus antiguos satélites.

Tras las dificultades de los años 1990, Moscú vuelve a manifestar sus  ambiciones de potencia mundial, oponiéndose por ejemplo a la extensión de la  OTAN en su antigua zona de influencia y a Estados Unidos por su proyecto de  escudo antimisiles en Europa.

Rusia, que mantiene relaciones especiales con viejos aliados de la época  soviética como Corea del Norte, Irán, Cuba y Siria, emplea sin complejos su  derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU para frenar con la ayuda  de China algunas iniciativas occidentales, por ejemplo contra el régimen de  Damasco.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones