Berlusconi denuncia intento de deslegitimar su gobierno

ROMA, ITALIA (16/JUL/2010).- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, denunció hoy un intento continuo de deslegitimar su Gobierno por parte de la izquierda política y de su prensa afín, que están detrás, según él, de los últimos escándalos que pretenden "enfangar y debilitar" a su gabinete.

En un mensaje divulgado a través de la página web del movimiento Promotores de la Libertad, vinculado a su partido, Berlusconi se defendió de las últimas polémicas surgidas en su entorno, la más reciente la que motivó el pasado miércoles la dimisión del subsecretario italiano de Economía, Nicola Consentino.

"Trabajando con serenidad, que no nos ha abandonado nunca, como siempre hemos hecho, completaremos en la legislatura nuestro programa de gobierno, sin dejarnos condicionar por los continuos intentos de deslegitimación de una oposición que en la realidad sigue perdiendo peso y votos", comentó el primer ministro.

Lo hacen "ellos y sus periódicos, que prosiguen con los chismorreos, los insultos, las calumnias, los falsos teoremas para intentar enfangar y debilitar un gobierno que trabaja, concretamente y de modo adecuado, en el interés de todos los italianos", agregó.

Con el mensaje, dedicado en un principio a mostrar su satisfacción por los éxitos de su Ejecutivo en la lucha contra la mafia, el político insistió en la idea de que su gobierno seguirá en pie, después de que varias voces hayan cuestionado recientemente su fortaleza por la división interna surgida en el seno de su partido, el Pueblo de la Libertad (PDL).

Esa división quedó patente con la última polémica que afecta al PDL y que llevó a Cosentino a presentar su dimisión, tras conocerse que la Fiscalía de Roma le investiga por una supuesta trama que pretendía influir en la magistratura a favor del gobierno.

Ello motivó que la oposición planteara una moción de censura que estaba dispuesta a secundar un ala del propio partido de Berlusconi.

"Este es un mensaje preciso que limpia, incluso, el clima absurdo y jacobino creado por algunos periódicos que llevan a cabo un nuevo montaje vergonzoso ya desmentido por los hechos, intentando implicar al presidente del gobierno y al Pueblo de la Libertad en asuntos poco claros de los que estamos a años luz", dijo Berlusconi.

"Estamos ante el enésimo intento de la izquierda de tumbar por vía judicial el resultado de las urnas. Estamos ante la eterna pretensión y el eterno sueño de la izquierda de convertir en mayoría la minoría, con un juego de desprestigio", añadió.

Berlusconi informó, además, de que "pronto" llevará a "buen puerto" la llamada "ley mordaza", que limita el uso y difusión de las escuchas telefónicas en investigaciones judiciales y por la que el 9 de julio llevaron a cabo una huelga los periodistas que trabajan en los medios de comunicación italianos.

La nueva ley devolverá a los italianos "la libertad de usar el teléfono sin correr el riesgo de ver publicados en los periódicos sus propios asuntos privados, como ocurre ahora", apuntó el mandatario, quien en los últimos meses ha asistido a la dimisión de tres miembros de su gobierno por distintas polémicas.