La aseveración de Alexi Lalas, en el sentido de que la actual generación de futbolistas mexicanos es una de las mejores de todos los tiempos, tiene base. No se limita a ser piropo gratuito, ni la clásica declaración diplomática (decir “¡Qué bonito perrito…!” mientras te agachas a recoger la piedra), ni lleva, según todos los indicios, la intención de tender la camita a la selección estadounidense que esta noche será su rival, en Columbus, en el arranque del hexagonal que repartirá los boletos para el Mundial de Rusia-2018 correspondientes al área de la Concacaf.*Hay un hecho incuestionable: hoy en día hay más futbolistas mexicanos enrolados en equipos europeos, que hace cuatro, ocho o 12 años.Después de que Hugo Sánchez, con su desempeño sobresaliente en el Real Madrid, abrió las puertas del futbol europeo para sus compatriotas, varios de ellos, en efecto, cruzaron el charco. Pocos, empero, dieron el kilo. La mayoría volvió de esa aventura con más pena que gloria en sus respectivos historiales.*Las cosas cambiaron. Y aunque ningún mexicano ha sido tan exitoso en Europa como lo fue el precursor de esa diáspora hacia el Viejo Continente, es incuestionable que los Márquez, Pardo, Guardado, “Chicharito” y demás actuales representantes del futbol mexicano en ligas reputadas entre las mejores del mundo, acusan, por encima de sus virtudes técnicas —nada despreciables, ciertamente… aunque nada, tampoco, que permita clasificarlos como “cracks” en toda la extensión de la palabra—, la madurez anímica necesaria para no desmerecer en ese mercado.*Ahora bien: que los futbolistas mexicanos que han tenido la oportunidad de emigrar al futbol del Primer Mundo hayan superado los complejos que antaño los limitaban, y estado, en consecuencia, a la altura de las exigencias, de ninguna manera significa que sólo ellos hayan acusado progresos en lo que a profesionalismo, carácter y personalidad respecta.Ahora mismo, hondureños, costarricenses, guatemaltecos, jamaiquinos y demás vecinos del área de la Concacaf, militan en equipos europeos. Y, por supuesto, para no incurrir en la ingenuidad de que Lalas observa con envidia lo que ocurre con los futbolistas mexicanos, cabe destacar que otro tanto sucede con los futbolistas estadounidenses. Por una parte, sus Ligas nacionales han crecido cualitativamente en la medida en que se han enriquecido con la presencia de jugadores de renombre. Por la otra, sus mejores futbolistas también figuran en equipos europeos.De manera que…