En México se sabe más del futbol argentino, que en Argentina del mexicano… Es lógico, puesto que Argentina —avalada por dos campeonatos mundiales— ha sido y sigue siendo, en esa materia, uno de los gigantes del Continente.Es lógico, además, porque los equipos mexicanos, desde los albores del profesionalismo (hace siete décadas), se han abastecido con centenares, cuando no millares, de futbolistas de esa nacionalidad. La participación de jugadores argentinos en conjuntos mexicanos, pues, ha sido significativa, tanto en el aspecto cuantitativo como en el cualitativo; la de mexicanos en clubes argentinos, en cambio, no ha pasado de ser simbólica.*En México se tiene plena conciencia de la popularidad del Boca Juniors en Argentina. Allá, en cambio, apenas si se tiene una noción del fenómeno social que el Guadalajara encarna en estas latitudes. Y es que mientras los medios de comunicación, en México, se afanan por dar seguimiento a la participación de los jugadores nacionales que militan en clubes europeos, en Argentina —como en Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay y demás países exportadores de talento futbolístico— no tienen el mismo afán por seguirles la pista a sus nacionales en otras naciones. Por una razón muy simple: no acabarían nunca.*Cancelada, a partir de este año, la participación de los equipos mexicanos en la Copa Libertadores –el torneo más prestigioso de América, al que los equipos mexicanos se colaron, en un descuido, por la puerta de servicio—, los dirigentes del Guadalajara activaron sus neuronas y movieron sus contactos con sus colegas del Boca Juniors para inventar lo que ayer anunciaron, entre los consabidos cohetes, fanfarrias y tamborazos: el “Duelo de Gigantes”: “Un partido épico —según los imaginativos publicistas que diseñaron los carteles— para definir (‘según San Lucas’…) al coloso del Continente”.*Decía Ambrose Bierce que “Todo panegirista es un calumniador”. Al margen de la cara que pudieran poner los seguidores de otros equipos sudamericanos —Corinthians, Fluminense, Flamengo, Colo-Colo…— cuya popularidad no va a la zaga de los “gigantes” aludidos esta vez, la trascendencia que esta confrontación pudiera tener en el continente americano, aún está por verse…La bolsa —cuyos monto y origen no fueron especificados, por cierto— que irá de por medio, muy bien puede ser, en su capítulo inicial al menos, una motivación para que el dichoso “Duelo de Gigantes” no se limite a ser un fiasco… como tantas veces ha ocurrido.
