Entre 2008 y 2018, el gasto en el sistema de pensiones se triplicó. Mientras hace una década se destinaron 254 mil millones de pesos para el pago de las jubilaciones, en este año se presupuestaron 793.7 mil millones. El problema es que las proyecciones no son nada favorables, pues la presión del gasto se mantendrá alcista, por lo menos en las próximas tres décadas.

En 2019 se tendrá el mayor incremento, ya que se proyecta una bolsa de 896.7 mil millones, cuando los aumentos entre cada ejercicio presupuestal habían variado entre 30 mil millones y 71 mil millones de pesos. Este último se dio en 2017.

El desembolso seguirá en aumento porque la esperanza de vida se incrementará. Se estima que pase de un promedio de 74 años a 77 años para los hombres y 79 para las mujeres en 2030.

En el estudio del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) “Pensiones en México: 100 años de desigualdad”, se señala que la desorganización y la falta de control en el financiamiento y gasto de las pensiones ha derivado en que el desembolso por este concepto represente 15.5% del Presupuesto de Egresos de la Federación y 3.7% del Producto Interno Bruto, con tendencia a incrementarse en los siguientes años.

“El problema del pago de pensiones en México versa sobre tres ejes, los cuales son fundamentales para su entendimiento: es desigual, insostenible y poco transparente”.

El año pasado, 97% del gasto fue para las pensiones contributivas, el cual fue de alrededor de 700 mil millones de pesos para 4.9 millones de pensionados. “Este tipo de gasto tiende a crecer dado que año con año aumenta el número de trabajadores que se pensionarán bajo los distintos esquemas de reparto, alcanzando un punto máximo en el año 2034 para el IMSS, en 2035 para el ISSSTE, en 2030 para la Comisión Federal de Electricidad, así como en 2055 para Pemex”.

En el documento se agrega que, según estimaciones de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), las obligaciones de pago de pensiones para la generación de transición de las instituciones federales más grandes terminará hasta 2120.

Luis Alberto Güemez, académico de la Escuela de Empresariales de la Universidad Panamericana, destaca que el total de pensionados aumenta cada año a niveles de hasta 4%, “lo que hace que muy pronto empiece a ser un problema mayúsculo”. Sin embargo, acentúa que el problema sería mayor si en la administración del Presidente Ernesto Zedillo no se hubieran realizado los cambios en el sistema de fondeo de las pensiones.

Gasto en pensiones tendrá aumento histórico en 2019

El próximo año, el gasto en pensiones en México podría crecer en alrededor de 103 mil millones de pesos con respecto al actual, al pasar de 793.7 mil millones a 896.9 mil millones de pesos. Esto, de acuerdo con la proyección del Presupuesto federal del próximo año, presentado en días pasados a un grupo de diputados por las autoridades electas encabezadas por Andrés Manuel López Obrador.

Es de los gastos más elevados si se toma en cuenta que representará el 15% del total del presupuesto del próximo año, el cual se estima en 5 billones 677 mil millones de pesos. Incluso, se equipara al rubro de las participaciones federales a las Entidades federativas que en 2019 sería de 892 mil millones de pesos.

Para hacer frente a esta carga financiera que, continuará en aumento en las próximas décadas ante el rápido envejecimiento de la población y el incremento de la esperanza de vida, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, propondrá una reforma en pensiones en la segunda mitad de su sexenio, en la cual se valorará aumentar la edad de jubilación para pasar de 65 a 68 años, confirmó Gerardo Esquivel, próximo subsecretario de Egresos de la Secretaría de Hacienda.

A pesar de que no se ha presentado la iniciativa, esta política sí se implementará en la nueva pensión alimentaria de adultos mayores (que es el subsidio federal), con el fin de cumplir con la cobertura universal anunciada en campaña. Este apoyo del Programa Pensión para Adultos Mayores (PAM) pasará de 580 pesos a mil 160 pesos mensuales.

Actualmente, este beneficio se otorga a 5.3 millones de personas; es decir, se congelará el apoyo con relación a la edad, pero se incluirá también a los afiliados del IMSS e ISSSTE. A todos los adultos mayores.

De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población (Conapo), se estima que en este año, la población de 65 años y más será de 9.1 millones de personas, mientras en 2028 podría aumentar un 40%, para llegar a los 13.2 millones. Para 2050, la proporción será de 79 adultos mayores por cada 100 menores de 15 años.

Luis Alberto Güemez Ortiz, académico de la Universidad Panamericana (UP), destaca que debido a estas proyecciones, la propuesta de nuevo Gobierno es una solución importante y trascendente, “inclusive, algunos organismos y estudiosos del tema de las pensiones, consideran que debería ser de 70 años”.

Reconoce que el tema de pensiones en México es un problema muy grave por esta falta de planeación, “el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), teóricamente, debería tener un fondo para cubrir la mayoría de estas pensiones, pero en el día a día no está o no es suficiente, o es muy pequeño para las necesidades que tienen los mexicanos”.

* Proyección.

Pensión universal será de mil 160 pesos

A partir del próximo año, el programa de Pensión para Adultos Mayores (PAM) entregará mil 160 millones de pesos a los adultos mayores de 68 años. Esto, para cumplir con la promesa de campaña del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de incrementar el monto que se entrega actualmente a esta población.

Hoy se entregan 580 pesos mensuales a 5.3 millones de personas mayores de 65 años, con un presupuesto anual de 39 mil millones de pesos.

Debido a que a este sector de la población se sumarán también los afiliados del IMSS y el ISSSTE, y la edad para acceder a este beneficio se incrementará tres años más, se desconoce a cuánto ascenderá la bolsa presupuestal para este programa de pensión universal, aunque se ha mencionado que podría rebasar los 100 mil millones de pesos.

En la actual administración se aprobaron incrementos, pero éstos fueron menores, al pasar, por ejemplo, de 500 pesos mensuales en 2012 a 580 pesos en este año.

El académico del Departamento de Economía del ITESO, Luis Raúl Rodríguez, comenta que precisamente por el aumento en la esperanza de vida, el pago de este programa y el de pensiones del sector público generarán un compromiso financiero “muy elevado”. Además, reconoce que el cambio de edad en el programa federal sí provocará un impacto en el bienestar de las personas.

“Desde el punto de vista de la situación financiera del sistema de pensiones, pues sí tiene sentido subirla a 68 años. Ahora, desde el punto de vista de la persona, pues obviamente sí pudiera haber una pérdida de ingreso importante, digamos entre 65 y 68 años, sobre todo para las personas que ya tenían programado o pensado su pensión de 65 con ayuda del subsidio que da el Gobierno”.

* Proyección.

México, por arriba del promedio de la OCDE

Si se concreta la propuesta de Andrés Manuel López Obrador para que a la mitad de su mandato se discuta el incremento en la edad de jubilación para pasar de 65 a 68 años de edad, el país se ubicaría por arriba del promedio actual de los países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que es de 64.3 años de edad.

Aunque los mexicanos se pensionarían cuatro años más tarde, con relación a esa media, el académico de la Universidad Panamericana destacó que la tendencia a nivel mundial es incrementar la edad.

“Todos los países, incluyendo los que están agrupados en la OCDE, tienen una presión, si no del mismo tamaño, sí similar al aumentar las edades de pensiones. Realmente el dinero público para los fondos de pensiones no alcanzan, y eso es una idea muy clara entre todos los economistas y entre todos los países de la OCDE”.

Subraya que si México aprueba esa propuesta en el próximo sexenio, sería una legislación de vanguardia, “pero muy probablemente los demás países nos seguirían muy pronto. Por ejemplo, ¿qué está sucediendo en Europa? En España, la edad de jubilación es a los 67 años; en Francia, 62; en Alemania, 67; en Reino Unido, Italia, Holanda y Dinamarca, tienen 68 años como límite. Si nos quedamos en los 68 años estaríamos de vanguardia en la línea de edad más alta, pero no nos saldríamos de lo que está sucediendo en el mundo”.

La Consar

La Comisión Nacional del Sistema del Ahorro para el Retiro (Consar) ha propuesto que se incremente la edad de jubilación, incluso hasta los 70 años de edad, pues permitiría elevar la pensión del trabajador. El año pasado se pronunció porque el incremento fuese por lo menos a los 67 años.

GUÍA

Suman “100 años de desigualdad”

• Las generaciones pensionadas por el Régimen de Beneficio pueden recibir, al menos, el 40% de su último salario; en cambio, los de cuentas individuales, sólo alcanzan 30%. Eso es el 57% del gasto público en pensiones.
• El 57% del  gasto público en pensiones por el sistema de reparto se asigna a la Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León, Jalisco y Veracruz, mientras que los 27 Estados restantes reciben solamente 43% de dicho desembolso.
• La mayor diferencia, entre lo asignado por pensionado y por institución, se encuentra entre la CFE y Pemex, quienes reciben en promedio 8.8 y 6.7 veces más que un pensionado del IMSS.
• Existe una problemática importante en cuanto a la tasa de contribución y la de reemplazo: en el IMSS, se ahorra 6.5% del salario, mientras que en el ISSSTE, 11.3%; en la CFE, 16.7%, y en Pemex, 23.0 por ciento.
• La mayor parte de la población cotiza en el IMSS, con más de 18 millones de personas, a una tasa muy baja, que resulta en que la tasa de reemplazo sea también baja al momento de la jubilación, con únicamente 26 por ciento.
• El gasto en pensiones de beneficio definido tenderá a crecer hasta 2030-2035, dependiendo de la institución, cuando alcance su máximo, para después descender y extinguirse entre 2090 y 2120. 

LA VOZ DEL EXPERTO

Incremento en la edad de jubilación debe ser parejo 

Luis Alberto Güemez Ortiz (académico de la Escuela de Empresariales de la Universidad Panamericana)

La propuesta del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para incrementar la edad de jubilación en México, para pasar de 65 años a 68 años de edad, deberá aplicar para todos, incluida la burocracia del país, considera el académico de la Universidad Panamericana.

“Teóricamente así debería de ser; es decir, no debiera haber diferenciales si lo que busca es realmente una legislación sin desigualdad. Entonces tendríamos, obviamente, todos los trabajadores que sujetarnos a una edad fija de jubilación”.

Actualmente, en las instancias federales, el gasto promedio por pensionado al año es muy dispar. Mientras un pensionado del IMSS cuesta alrededor de 90 mil 741 pesos, uno de Petróleos Mexicanos (Pemex) alcanza hasta los 574 mil 953 pesos. Sin embargo, los de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) son los más caros, pues cuestan alrededor de 759 mil 035 pesos. Esto, de acuerdo con datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

“Hay compañías o empresas públicas en donde las pensiones son mucho más a amplias, mucho más generosas, y por lo mismo se jubilan en una edad anterior, y se jubilan con prestaciones adicionales”.

Opina que así como Andrés Manuel López Obrador promovió una iniciativa para que ningún funcionario gane más que el Presidente, así debería suceder con la jubilación, “a lo mejor así habría que hacerlo para que todos los funcionarios del Estado, a partir de este momento, se pensionen o se jubilen a una misma edad”.

CLAVES

Los sistemas

• En México, existen más de mil sistemas, modelos o esquemas de pensiones distintos. Incluye al IMSS, el cual captura al 75% de la población jubilada bajo el esquema de pensiones contributivas; al ISSSTE, con el 10.3% de los pensionados, hasta llegar a los esquemas de pensiones de las empresas productivas del Estado, al sistema judicial, bancos, universidades y municipios.
• Actualmente se transita de un esquema de reparto, sistema que se rige por la ley de 1973 en el IMSS y que se reformó en 1997, a uno de cuentas individuales. El ISSSTE, por su parte, se reformó en 2007, donde igualmente se migró de un sistema de beneficio definido a uno de contribución definida.
• En el caso de la CFE, a partir de 2008, se transitó a un régimen de cuentas individuales, en el que se adhiere al IMSS y crea un esquema complementario: Cijubila. Pemex, por su parte, se incorporó a un régimen de cuentas individuales en 2016, del cual aún no hay personas jubiladas.

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¿La edad jubilatoria debe ser igual para la población en general y para la burocracia?

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