Milla Jovovich, mujer de armas tomar

GUADALAJARA, JALISCO (17/SEP/2010).- Al igual que los cómics, los videojuegos se han convertido en una continua fuente de inspiración para nuevas franquicias en Hollywood. Sin embargo, a diferencia de los personajes emanados de las viñetas y el papel, los títulos electrónicos no han gozado de mucho éxito al ser adaptados al celuloide. La excepción a esta regla es Resident Evil, saga nacida en la consola de videojuegos PlayStation que esta semana estrenó en el cine la cuarta parte de su historia: Resident Evil 4: La Resurrección.

A la cabeza de esta cinta reaparece Milla Jovovich, una mujer que gusta de tomar papeles que involucren mucha acción y que de paso encanta al público masculino.

Sin embargo, debajo de esa imagen de mujer ruda que se pasea entre balazos, explosiones y zombies, se encuentra una actriz ávida de ser reconocida como una artista sólida. Por eso, la misma semana en que estrenó Resident Evil 4 presentó en el prestigiado Festival de Toronto, Canadá, la película Stone, donde comparte roles con Edward Norton y Robert De Niro.

La actriz, quien arrancó su trayectoria en el mundo del modelaje, señaló al respecto que: “El mundo de Resident Evil es asombroso. Amo las películas de acción y amo las historias que hemos contado allí. Pero hacer películas más ‘pequeñas’ e íntimas como Stone me permite ejercitar músculos que como actriz no uso cuando destruyo a los zombies en pantalla (risas)”.

Cuatro y contando

La historia de Resident Evil comenzó como un videojuego en 1996 y ya era famoso antes de llegar al cine. El jugador debe escapar vivo de una serie de escenarios devastados por un holocausto radioactivo, que ha convertido a los habitantes de una pequeña ciudad en zombies.
Esta premisa fue llevada al cine en 2002 casi sin cambios, aunque el protagonista masculino del juego fue sustituido por una mujer llamada Alice, quien debe guiar a un pequeño grupo de sobrevivientes a un lugar seguro, luego de que un virus creado en un laboratorio se sale de control y convierte a cientos de personas e incluso animales en peligrosos zombies.

Ocho años después, la historia, con grandes dosis de acción, peleas y terror llega a su cuarto capítulo en un planeta que se encuentra al borde del apocalipsis. Lo que comenzó en un pueblo ahora se extiende por toda la Tierra y Alice es una de las últimas representantes de la raza humana que no se ha convertido en zombie.

Con una sonrisa, Jovovich confiesa que jamás ha tenido miedo de quedar encasillada en el papel de Alice: “Creo que soy una mujer muy, muy afortunada. ¿Cuántos actores pueden presumir tener una franquicia de películas que llegue a cuatro con el éxito en taquilla y el cariño de los fanáticos como Resident Evil? Yo veo estas cintas como una bendición”.

La razón acompaña las palabras de Milla, pues Resident Evil 4 es la secuela más exitosa de la saga (en su primer fin de semana en Estados Unidos recaudó más de 27 millones de dólares) y representa un empujón al género de acción protagonizado por mujeres.

Lo cierto es que la buena recepción del público ha motivado a Jovovich a confirmar lo que ya era un rumor insistente: Habrá una quinta parte de Resident Evil muy pronto en las pantallas. “Probablemente será una de las primeras películas en las que hemos hablado con los fanáticos para ver qué quieren y a qué personajes quieren ver. Va a ser un proceso más interactivo”, explicó la actriz a través de su cuenta de red social Twitter.

Con la suerte de su lado

Durante la década pasada, la regla no escrita en Hollywood marcaba que un buen juego de video no hace una buena película.
Aunque esta regla ya no está vigente gracias a cintas como Resident Evil, Tom Raider y El Príncipe de Persia, los ejemplos de grandes videojuegos que fracasan en el Séptimo Arte abundan: Mario Bros, Double Dragon, Mortal Kombat, Street Fighter, Bloodrayne, Hitman y Max Payne son algunos de los que no lograron “transportar” su magia de las consolas a la pantalla.