El teatro de Bayreuth recibirá el bicentenario de Wagner

BERLÍN, ALEMANIA (05/MAR/2013).- El viejo teatro de Bayreuth, construido por orden de Richard Wagner, recibirá la peregrinación de wagnerianos a esa ciudad bávara, coincidiendo con el bicentenario del nacimiento del compositor, con un andamio en su fachada, necesitada de reforma.

Fuentes del teatro informaron hoy de que no es posible retirar el andamiaje ni para el concierto conmemorativo del nacimiento de Wagner, el 22 de mayo de 1813, ni para la apertura de la temporada del festival de ópera, el 25 de julio.

La estructura se montó el pasado otoño, para impedir que se resquebrajase una parte del revestimiento de la fachada, y desde entonces no se han podido realizar las reformas que se precisan.

El responsable administrativo del teatro, Toni Schmid, confirmó que no se retirará, porque sería una irresponsabilidad, y que con toda probabilidad seguirá ahí para el concierto del aniversario, que dirigirá Christian Thielemann, como para el festival, que se prolongará desde finales de julio a la última semana de agosto.

La apertura del festival Richard Wagner deriva año a año en una peregrinación de wagnerianos de todo el mundo, encabezados por la canciller Angela Merkel, asidua a Bayreuth desde sus tiempos de jefa de la oposición.

Schmid recuerda que el teatro entero necesita una reforma en profundidad, cuestión que se ha ido postergando por razones presupuestarias y también por no romper con la tradición de celebrar el festival de verano en el edificio que ordenó construir Wagner.

Este 2013 es el menos indicado para cerrarlo temporalmente, ya que coincidirán del nacimiento de Wagner (Leipzig, mayo de 1813) y el 130 de su muerte (Venecia, febrero de 1883).

El festival incorporará en su programa el estreno de una nueva producción del "Anillo del Nibelungo", obra del provocador Frank Castorf.

Richard Wagner colocó la piedra fundacional de su teatro, considerado por el compositor ideal para sus óperas, en 1872 e inauguró el primer festival en 1876.

Entonces, la ciudad donó el gran solar, sobre la denominada Verde Colina de esa ciudad de provincias bávara, a lo que se unió la generosa financiación del rey Luis II de Baviera, el gran mecenas y admirador de Wagner.

El viejo teatro ha vivido desde entonces varias reformas epidérmicas, en el escenario o la fachada, pero para la reforma en profundidad que ahora se precisa está estimada en unos 50 millones de euros (cerca de 829.280 millones de pesos).