Política económica de España no se verá afectada por plan de ajuste: Zapatero

ELCHE, ESPAÑA (23/MAY/2010).- El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, negó hoy que el plan de ajuste contra la crisis aprobado el pasado jueves por su Ejecutivo suponga cambios en la política económica, sino que responde a las circunstancias actuales.

El drástico paquete de medidas incluye bajadas salariales para los empleados públicos, congelación de pensiones y recorte en la inversión, con el propósito de acelerar la reducción del déficit y situarlo en el tres por ciento del PIB en 2013.

En un acto multitudinario con simpatizantes y militantes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), celebrado hoy en la ciudad española de Elche (este), Rodríguez Zapatero quiso dejar claro que el sacrificio que "necesariamente" ha pedido a la sociedad española "no es en vano", sino que "sirve" y que "es útil".

A los dos colectivos más afectados por los recortes, empleados públicos y pensionistas, les dijo que "contribuyen al porvenir de este país" y a asegurar la solvencia, la credibilidad y la confianza de España en el mundo.

Además de simpatizantes y militantes del gubernamental PSOE, unos cinco mil alcaldes y concejales siguieron la intervención del presidente español, la primera desde que se dio a conocer plan de ajuste económico.

Ante ellos quiso "rendir cuentas" y explicarles en qué momento está la lucha contra la crisis, por qué se adoptaron las medidas de recorte y con qué objetivos, especialmente con el fin de preservar el Estado del bienestar para las próximas generaciones.

En la que fue su única referencia a una hipotética subida de impuestos a los que tienen más, Rodríguez Zapatero apuntó que "a quienes más posibilidades económicas tienen hay que pedirles más esfuerzo, y así lo haremos".

"No tengáis ninguna duda de que el rumbo que hemos trazado dará sus resultados, que volveremos a la creación de empleo y a la riqueza económica", proclamó.

Tras estimar que los ciudadanos valorarán en su momento las decisiones responsables de unos y otros, el jefe del Ejecutivo español rechazó algunas críticas que "no son justas" y esgrimió que la reducción en gasto social que representan las medidas aprobadas es del 1.5 por ciento.