Iraq no puede pagar a General Electric por servicios

BAGDAD, IRAQ - El primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, dijo el sábado que su Gobierno no podría pagar a General Electric por sus servicios y reprendió al Parlamento por retrasar su pronunciamiento sobre una venta de bonos de tres mil millones de dólares.

En mayo, el Gabinete de Iraq aprobó la venta de bonos del tesoro, de los que dos mil 400 millones de dólares estaban destinados a pagar la modernización del ruinoso sector de electricidad de Iraq.

La falta de electricidad es una gran queja entre los iraquíes, especialmente en el intenso calor del verano.

El ministro de Electricidad de Iraq había dicho que esperaba que el Parlamento ratificara la decisión del Gabinete a inicios de junio, pero los legisladores dejaron de trabajar la semana pasada por el receso del verano sin hacerlo, y el Parlamento no se volverá a reunir hasta el 8 de septiembre.

"El Ministerio de Electricidad no puede contar con dos mil 400 millones de dólares para pagar a GE y no podemos forzar al Parlamento a aprobar nuestro proyecto. Como resultado este proceso se detendrá (la producción de electricidad)", dijo Maliki el viernes en una reunión de líderes tribales.

"¿Quién es responsable de esto? Son las agendas políticas (de algunos partidos)", dijo Maliki.

En el 2008, Iraq firmó acuerdos de muchos miles de millones de dólares con General Electric y Siemens para agregar cerca de nueve mil megavatios de capacidad durante los años próximos.

Disputas políticas entre grupos étnicos y sectarios de Iraq han estancado el proceso legislativo y generado un retraso de los proyectos que requieren ratificación.

Maliki dijo que se había reunido con funcionarios de GE durante su viaje del mes pasado a Estados Unidos, quienes le dijeron que ya habían manufacturado equipos destinados a Iraq y se habían quejado por el incumplimiento de pagos.

Iraq tuvo que reducir su presupuesto del 2009 tres veces debido a una fuerte caída de los precios del petróleo desde el año pasado. Casi todos los ingresos de Irak son derivados de las ventas de sus reservas, las terceras mayores del mundo.