Investigadores de todo el mundo estudian todos los días al Sol y hay una región que ha llamado su atención desde hace una semana: la mancha solar 4079, por su tamaño, ángulo de incidencia sobre la Tierra y los posibles efectos en nuestro planeta y sociedad. Las manchas solares son percibidas como zonas oscuras de nuestra estrella, con una temperatura inferior a la del resto de la esfera (unos 3 mil 315°C contra 5 mil 537°C) y, por lo tanto, menos luz. Son formadas por la naturaleza del plasma, material de que está formado el Sol, un estado de la materia que no es sólido ni líquido ni gaseoso, aunque se semeja a este último, pero con una carga eléctrica que lo hace fluir y "enredarse". Esta maraña impide, precisamente, que el calor vaya a la superficie. Cuando por fin se libera, puede traer problemas, pues ocurre el fenómeno de las erupciones o llamaradas solares: una explosión de energía que libera radiación electromagnética que puede golpear a la Tierra.Además de las erupciones solares, las manchas también están relacionadas con las tormentas solares, fenómeno parecido pero distinto, donde lo que se expulsa al espacio es parte de la masa coronal y del campo magnético del Sol. Este fenómeno puede crear las hermosas auroras en lugares inusuales, como las percibidas el año pasado en México, pero también terribles consecuencias.Ambas, las erupciones y las tormentas solares, pueden afectarnos con:Estos efectos son los que preocupan a los científicos y los mantienen atentos a la mancha 4079.La mancha (en realidad un conjunto de ellas) 4079 se extiende a lo largo de casi 140 mil kilómetros, se mueve por la superficie del Sol y con el movimiento de rotación del mismo astro: "A medida que se acerca al centro de la cara solar, se encuentra frente a la Tierra... Si se produce alguna erupción solar importante mientras esté frente a la Tierra, recibiremos un impacto directo de energía solar y partículas solares, lo que desencadenará una tormenta geomagnética", especificó Brenda Culbertson, embajadora del sistema solar del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA para el medio KSNT en una entrevista del pasado 3 de mayo.En el pasado este tipo de impactos causó eventos como apagones, fallas en redes eléctricas e incendios en estaciones de telégrafos (en un evento de 1859). En nuestro tiempo, donde la electricidad y los satélites son esenciales para nuestra comunicación, los riesgos aumentan.La NASA y otras dependencias similares monitorean la mancha solar 4079 con la idea de, en caso de ser necesario, emitir una alerta por tormenta geomagnética de manera temprana y así minimizar las consecuencias.Con la información adecuada, se podría resguardar satélites y tomar previsiones para la aviación y la defensa militar. Como personas comunes, desconectar nuestros aparatos eléctricos los salvaría de las fluctuaciones de voltaje.