El colectivo de búsqueda Luz de Esperanza cumple dos años de ser fundado en medio del dolor y la angustia de sus integrantes por no encontrar a sus familiares desaparecidos.En la Glorieta de las personas desaparecidas, integrantes del colectivo de búsqueda realizaron una pequeña verbena con comida, botanas, bebidas, pasteles y la repartición de zapatos donados para las mujeres del colectivo.Liliana Meza, presidenta de Luz de Esperanza, dijo que esperan cumplir muchos años más, aunque ya no como colectivo de búsqueda, sino como asociación civil en favor de los derechos humanos y que ya no haya desapariciones.“Ya tenemos 2 años consolidados como colectivo y próximamente como asociación civil para poder ayudar a más y más personas. Esperemos que sean muchos años, pero que, en determinado momento, pueda esto parar, que cesen las desapariciones y quede como un colectivo de derechos humanos”.La verbena representó momentos de felicidad en medio del dolor de tener a uno o varios familiares desaparecidos: se partió un pastel y al grito de “¡Mordida!, ¡Mordida!”, los familiares embarraron de pastel a Liliana Meza y también a Héctor Flores, vocero del colectivo.“Mientras el problema persista porque ya es un problema muy grave, un problema social en Jalisco, pues vamos a tener que estar en pie de lucha independientemente de si encontremos a nuestros familiares”, dijo Héctor Flores.Además, recibieron la donación de 100 pares de zapatos y fueron repartidos entre los integrantes del colectivo de búsqueda; los que sobren, serán repartidos a la población en situación de calle de la zona de Pueblo Quieto.Los menores que han perdido a su mamá o papá por desaparición, tuvieron la oportunidad de divertirse rompiendo dos piñatas.El colectivo inició con 5 familias y ahora ya suman más de 300 familias que son parte de Luz de Esperanza.MM
