Al menos trece rebeldes sirios aliados de Turquía murieron anoche y otros 25 resultaron heridos por el estallido de una mina en la ciudad siria de Afrín, cuyo control arrebataron ayer las fuerzas turcas y los insurgentes a las milicias kurdosirias.Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, las tropas de la operación Rama de Olivo, como Turquía ha bautizado su ofensiva en la región de Afrín, situada en el noroeste de Siria, desarrollan labores de limpieza en la urbe homónima tras hacerse con su dominio.Un grupo de esas fuerzas ha saqueado tiendas, viviendas y coches de ciudadanos, lo que ha desencadenado una pelea con otro grupo que se negaba a que esto se produjera, aseguró la fuente.La ONG siria agregó que seis miembros de facciones sirias proturcas perdieron la vida ayer por un ataque con cohetes contra su vehículo en el área de Rayu, en ese enclave.Turquía y sus aliados iniciaron el 20 de enero una operación militar en Afrín, que estaba controlado por la milicia kurdosiria Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo).Ankara considera a las YPG terroristas por sus vínculos con la guerrilla kurda presente en su territorio, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).Desde el inicio de la ofensiva, al menos 515 efectivos de la operación Rama de Olivo han muerto, entre ellos 78 soldados turcos, así como mil 500 milicianos kurdos, de acuerdo a los datos del Observatorio.También han perecido 91 efectivos progubernamentales sirios que habían acudido a Afrín a ayudar a las YPG a protegerlas del ataque turco.Durante la ofensiva, además, han perdido la vida 289 civiles, entre ellos 43 menores y 28 mujeres.
