El vicealcalde de Trece Martires, Alex Lubigan, fue asesinado en un tiroteo hoy en esa ciudad del norte de Filipinas, en la tercera muerte violenta de un oficial local que se registra en una semana.Lubigan se dirigía a su domicilio familiar en un automóvil cuando le dispararon varias veces desde otro coche que se acercó, según los informes preliminares de la policía regional.El vicealcalde murió en el acto, mientras que su chófer, Romulo Guillemer, también fue alcanzado por las balas y trasladado al Hospital Emilio Aguinaldo, donde falleció mientras era intervenido.Lubigan es el tercer funcionario de un gobierno local asesinado esta semana, después de las muertes violentas de Antonio Halili, alcalde de Tanauan, también en el norte filipino, y de Ferdinand Bote, regidor de General Tinio, en la misma región.Los dos crímenes están aún bajo investigación policial, aunque se sospecha que el asesinato de Halili, el lunes a plena luz del día durante un acto oficial, tiene que ver con el tráfico de drogas.De hecho, Halili figuraba en la polémica "narcolista", un documento con los nombres de funcionarios públicos implicados en el tráfico de narcóticos que el presidente, Rodrigo Duterte, ordenó elaborar en el marco de su guerra contra las drogas.Paradójicamente, Halili, que fue uno de los alcaldes que más apoyó esa campaña de Duterte, fue muy polémico porque impulsó los llamados "paseos de la vergüenza", en los que la policía exhibía públicamente a los detenidos por presunta posesión de drogas.El caso del alcalde Bote, asesinado el martes a tiros mientras iba en su coche, no parece de momento vinculado con el tráfico de drogas.La Liga Nacional de Municipios de Filipinas, que agrupa a 68 alcaldes de las principales ciudades del país, solicitó esta misma semana un diálogo directo con Duterte para expresar su preocupación sobre la posible relación de los asesinatos y la "narcolista".Durante el mandato de Duterte han sido asesinados cinco alcaldes que figuraban en ese listado, que en la actualidad cuenta con los nombres de 96 políticos supuestamente implicados en el tráfico de drogas.
