Mientras que en Járkov - la segunda ciudad más grande en Ucrania- a el viernes pasado, a 82 días del inicio de las operaciones militares, el ejército ruso emprendió la retirada, en una aparente derrota en esa zona de la invasión, en Moscú empieza a crecer una sensación de incertidumbre, pero no por las maniobras militares que no marchan de acuerdo a lo planeado, sino por las señales que surgen alrededor del Kremlin y que pudieran ser la confirmación que Vladimir Putin estaría enfermo y cada día más mermado de sus facultades físicas. Putin, quien tiene 69 años y poco más de dos décadas en el poder -lo asumió el 31 de diciembre de 1999-, en sus últimas y menos frecuentes apariciones en público ha dado muestras de ciertas limitaciones físicas y hasta muestras de dolor.En dos video que le han dado la vuelta al mundo, se le ve caminando -dentro del Kremlin- con el brazo izquierdo inmovil, casi pegado al costado, mientras que el brazo derecho se balancea libremente, según publicó recientemente el diario britanico The Sun. Además, en algunas escenas donde se le ve encabezando una reunión con uno de sus miembros de su gabinete, se le notan sus piernas en permanente movimiento y apretando la mesa intermitentemente con su mano derecha durante 12 minutos.Según la publicación inglesa Putin tiene la enfermedad de Parkinson. Valery Solovey, exjefe del Departamento de Relaciones Públicas del Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú, dijo el mes pasado que Putin “pudiera estar luchando contra el cáncer”, además de estar afectado por la enfermedad de Parkinson. Los rumores de la enfermedad de Putin iniciaron desde que las operaciones de invasión arrancaron en Ucrania. Y muchos se preguntan, si esta orden sería la última de trascendencia por parte del presidente ruso antes de verse obligado a dejar el cargo por motivos de salud y si eso significaba el fin de de la intenciones inversionistas de Rusia. Muchos analistas internacionales piensan que en caso de que así sucediera la política rusa podría reestructurarse y posiblemente dar marcha atrás en las en los planes del Kremlin de intentar regresar a su órbita a los países que quedaron fuera de su esfera después de la desaparición de las Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), sin embargo todo parece indicar que dentro de los muros que dan a la Plaza Roja en Moscú se piensa de manera diferente. De acuerdo con la Constitución rusa, en caso de que el presidente deje el cargo por cualquier circunstancia, sería el Primer Ministro -en este caso Mikhail Mishustin- quien asumirá la responsabilidad, sin embargo algunos observadores internacionales dicen que ya se dan los pasos necesarios para que quien se quedara en el cargo fuera un “sucesor digno de confianza a los actuales intereses”, y por ello se piensa que sobre el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, quedaría la responsabilidad al frente del Kremlin.Si las especulaciones sobre la posible enfermedad de Putin no son ciertas, el presidente ruso tiene garantizado que estará en el poder hasta el 2036, ya que hace algunos meses firmó una ley que le permite postularse por dos periodos más en el 2024 y en el 2030. Ahora bien, en caso de que se ausentara, será Sergei Shoigu quien tome las riendas, llegando a la conclusión de que con Putin o sin él desafortunadamente continuará la operación en Ucrania y con ello las consecuencias que en todo el mundo hemos tenido ¿Usted, qué opina?.