La semana pasada, en conjunto con las organizaciones no gubernamentales ProCienciaMx y la Red Nacional de Consejos y Organismos Estatales de Ciencia y Tecnología (Rednacecyt), presentamos una propuesta ciudadana de Ley General de Ciencia, Tecnología e Innovación, que busca renovar la política científica del país y responder a los nuevos retos que la pandemia nos ha dejado.Lo más importante de esta propuesta es que nace de las experiencias y conocimientos de la comunidad científica. Desde finales de 2019, ProCienciaMx y Rednacecyt, recuperaron las opiniones de miles de personas que colaboran en universidades, instituciones de educación superior y centros públicos de investigación, pertenecientes a todas las entidades del país. Así, trabajadores, estudiantes, personas investigadoras, científicas y titulares de estas instituciones, tuvieron la oportunidad de construir dos iniciativas que hicieron públicas en sus respectivas páginas web.Al no poder presentar estas iniciativas directamente en alguna de las Cámaras del Congreso de la Unión, estas organizaciones tuvieron a bien reunirse conmigo y mi equipo de trabajo para solicitarnos ser el canal que permitiera que su voz se recuperara cabalmente ante el Pleno del Senado. Así, a través del diálogo y la construcción de acuerdos, ProCienciaMx, Rednacecyt y un servidor, logramos consensuar una sola propuesta legislativa que recuperó los temas que, la comunidad que trabaja en pro de la ciencia, tecnología e innovación, consideran esenciales para que todas las personas participen y se beneficien del conocimiento científico generado en el país.Nuestro proyecto de Ley General busca ser tomado en cuenta y reducir la intervención de una propuesta gestada en la polémica como es la que entregó la Dra. María Elena Álvarez-Buylla, directora del Conacyt, al Presidente Andrés Manuel López Obrador para ser presentada ante el Congreso.Estamos convencidos que no tomar en cuenta a ProCienciaMx, Rednacecyt y las miles de personas que dieron su opinión para construir una propuesta ciudadana, hará que la ciencia, tecnología e innovación en México se siga estancando, como ya se demostró con la desaparición de los fideicomisos, la falta de apoyo para la producción de vacunas COVID-19, la reducción de los presupuestos a los institutos nacionales e instituciones de educación superior y, en general, que la política nacional esté condenada al fracaso.La Ley General que presentamos la semana pasada, y a la cual agradezco la suscripción del Senador Emilio Álvarez Icaza a esta propuesta, entre otras cosas, promueve una participación igualitaria de los sectores público, social y privado en la conformación del órgano rector de la ciencia en México; propone aumentar al 2% del PIB nacional la inversión en este sector y crea la Banca Nacional para el Desarrollo de la Ciencia, Tecnología e Innovación; da autonomía de investigación; y, fortalece el reconocimiento e incentivos para las personas e instituciones que dedican su vida a la ciencia, tecnología e innovación.Les invito a conocer la iniciativa y a proponer cualquier mejora, su opinión será tomada en cuenta.
