Cautivado por la historia y tradición de México, el artista francés Gaal D. Cohen llegó hasta el poblado de San Pablito Pahuatlán, en Puebla, en donde desarrolló su más reciente propuesta visual “Testigos” (Witnesses), colección fotográfica en la que comparte parte de la vida de los artesanos que han puesto en la en la mira internacional al legendario papel amate.La fascinación y respeto que Gaal tiene hacia el papel amate no es nuevo, al recordar que “Testigos” tiene su origen desde años atrás cuando conoció el trabajo artesanal de Genaro Fuentes Trejo, quien desde la sierra norte de San Pablito ha contribuido a que esta tradición se mantenga vigente y cada vez más valorada entre las nuevas generaciones.La serie de retratos que Gaal capturó con su cámara tienen su debut en Guadalajara, siendo el Museo de Arte Raúl Anguiano (MURA) el espacio que marcará todo un recorrido que contempla llegar a Puebla, al Museo de Artes Populares de la Ciudad de México, entre otras ciudades.Gaal destaca las distintas vertientes y lecturas que “Testigos” propone: por un lado, mostrar los ojos y labios de los habitantes/artesanos de San Pablito Pahuatlán, para dar testimonio de las diversas generaciones que conservan y promueven su tradición, desde los recién nacidos hasta aquellos que se han visto transitar la vida y legado de su comunidad; por otra parte, llevar estos retratos a la tradición misma al imprimirlos en gran formato en la belleza y textura del papel amate.“Surgió la idea de hacer varios retratos de personas del mismo pueblo, que es la cuna del papel amate, imprimir sus rostros, desde una bebita que acaba de nacer, hasta sus ancianos. Mostrar el ciclo de la vida con retratos, con 10 años de diferencia entre estos personajes. Considero que ellos son testigos de la vida de San Pablito, un pueblo que tiene 1600 años reconocidos de historia; ellos son testigos de la historia del continente”, comentó el artista durante un recorrido por la muestra.Desde 2018 Gaal comenzó a forjar este proyecto al que se sumó el Museo de las Américas, de la ciudad de Denver, Colorado, al otorgarle una beca con la que el artista francés logró instalarse en la comunidad de San Pablito para documentar el acontecer cotidiano y legendario de sus habitantes.“Los lienzos muestran solo sus ojos y labios porque también quise honrar a todos los pueblos indígenas de toda América. Los ojos y labios también pueden ser indígenas de Chile, Chiapas, Vancouver, o de dónde sea a pesar de que son de San Pablito los que muestro. Creo que todos los pueblos originarios tienen su arte”.Gaal señala que “Testigos” puede ser el detonante de proyectos mayúsculos que tengan otro impacto en la comunidad de San Pablito, pues visualiza recaudar fondos para desarrollar una escuela para la comunidad otomí, por ejemplo.“Es un proyecto que también estamos buscando para apoyar a esta comunidad. No puedes hacer un proyecto solo de arte hablando de comunidades indígenas, también interviene el sentido social, cultural, artesanal, tratar de abarcar y apoyar en diversos aspectos”, finaliza. JL
