Jugoterapia: recetas y beneficios para tu salud
Prepara deliciosas bebidas que complementarán una alimentación balanceada al integrar frutas y verduras
Estar en casa nos permite generar o retomar hábitos saludables, como mantener una alimentación balanceada y nutritiva, un reto que ahora más que nunca debemos asumir con responsabilidad y creatividad.
Sin lugar a dudas, el consumo de frutas y vegetales son básicos en la dieta diaria de cualquier persona y si estamos un poco cansados de las opciones cotidianas, darle un giro a la preparación de tus platillos es una excelente opción para que el ánimo no decaiga y mantengamos al cuerpo en óptimas condiciones.
Los jugos naturales son grandes aliados al momento de establecer una alimentación equilibrada y aunque los clásicos de naranja, zanahoria y piña no pueden faltar, puedes explorar nuevos sabores y texturas con combinaciones creativas y bastante coloridas para incluir más frescura a tus días.
Es importante que antes de consumir un jugo natural tengas la posibilidad de tener una asesoría básica con un experto en nutrición, especialmente si tienes algún padecimiento o disposición a enfermedades como la diabetes e hipertensión, para así conocer las cantidades recomendadas de azúcar natural para tu organismo.
También es aconsejable conocer los horarios más oportunos para el consumo de jugos, particularmente si se trata de frutas más ácidas para el estómago como lo pueden ser la naranja y la toronja, que en ayunas pueden desencadenar malestares como gastritis o inflamación.
Al momento de hacer tu surtido de frutas y vegetales, opta por una selección variada, y aunque no lo parezca, frutas como el melón, la papaya, fresa, sandía, manzana y hasta el plátano, son perfectos para combinarse y hasta generar aguas más frescas y ligeras que no requieren de endulzantes artificiales.
Los vegetales también son opciones para complementar los jugos y para muestra está el tradicional betabel, la zanahoria, el apio y hasta el jengibre, que te ayudarán a dar mayor textura y más nutrientes a la alimentación diaria en cuestión de un sorbo.
Recuerda lavar y desinfectar correctamente tus frutas y vegetales, tener un poco de agua natural o hasta leche (de tu preferencia) y un par de hielos picados si prefieres una presentación más divertida y vanguardista al puro estilo de frappe o smoothie.
A continuación, te proponemos algunas ideas de preparación que puedes realizar en la comodidad de tu hogar, según lo que necesites en el momento del antojo:
• Energía. Si te sientes con un poco de fatiga por el aburrimiento, un preparado de plátano con avena será tu mejor aliado. Solo necesitas licuar un vaso de leche, dos cucharadas de avena, un poco de miel si quieres un sabor más dulce y un par de almendras, y parte de tu desayuno estará listo. Si deseas una textura más cremosa y fresca, puedes añadir un par de cubos de hielo.
• Ligereza. Mejorar la digestión siempre es una buena idea y para ello, el apio y la piña son los reinantes para depurar toxinas y equilibrar tu organismo. Un cuarto de piña y al menos tres palitos de apio serán básicos para mezclar con un vaso de agua y media naranja. Procura beber este jugo después de haber consumido alimento sólido.
• Relajación. La zanahoria es reina de los jugos por su sabor dulce y si combinas unas 10 o 15 zanahorias medianas con un betabel mediano con un poco de piña o toronja, tendrán un refrescante aperitivo para beber disminuir la sensación de nerviosismo.
• Frescura inmediata. El calor no da tregua y la primavera nos dejó frutos frescos como la pera y el pepino. Mezcla dos tazas de estas frutas -de preferencia sin cáscara- y añade de dos a cuatro limones pequeños para dar un toque especial. Puedes complementar con una pequeña taza de semillas de chía para tener una bebida más integral.
• Postre ligero. Si eres más fan de los sabores tradicionales y quieres un postre ligero después de tu comida principal del día, las fresas no pueden faltar. Ya sea que mezcles un par de fresas congeladas -previamente desinfectadas- con un poco de leche para un ligero smoothie, o si prefieres algo fresco no dudes en licuar tus fresas con agua y un toque de miel natural.