Ni muy muy, ni tan tan
“Gracias a su liderazgo, se logró un nuevo acuerdo que no solo aleja los aranceles, sino que fortalece la relación comercial bilateral México y Estados Unidos”, señala el documento firmado por 82 parlamentarios de la Cámara de Senadores -Morena, Verde Ecologista y del Trabajo-, donde expresan su apoyo a la presidenta Claudia Sheinbaum tras la prórroga de 90 días de la aplicación de aranceles por parte de Estados Unidos; por su parte, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, dijo que “el manejo que hizo nuestra Presidenta fue espléndido”, mientras que el canciller Juan Ramón de la Fuente estableció que la mandataria “fue muy explícita en sus planteamientos y en sus puntos de vista”. Desde Washington, el embajador de México, Esteban Moctezuma, habló de elogios del cuerpo diplomático asignado en la capital estadounidense, quienes preguntaron “cuál es el secreto en las conversaciones de nuestra presidenta”. En este mismo espacio lo dijimos el viernes: “... fue un éxito para México. Simplemente el hecho de obtener una ventana de 90 días para la posible implementación de la aplicación de los aranceles es una demostración del trato preferencial que tenemos, máxime si nos comparamos con el trato que los países de la comunidad europea y las potencias comerciales han recibido por parte del inquilino de la Casa Blanca”. Pero hasta ahí.
Aún no conocemos el acuerdo sobre seguridad que México y Estados Unidos que esta semana pudiera firmarse, que seguramente fue una de las condicionantes a la postergación de los aranceles, aunque Sheinbaum asegura que será en base a “respeto a la soberanía, mutua confianza, respeto al territorio y colaboración”. Confianza y colaboración son prioritarios, pero respeto a la soberanía -por la forma como han insistido y amenazado nuestros vecinos- estaría por verse y nadie puede asegurar nada.
Hemos obtenido una postergación en los aranceles, pero en otros rubros -en la relación bilateral- ya salimos “raspados”, fuimos “atropellados” y salimos perjudicados. En lo que se refiere al principal ingreso que tiene México, que son las remesas, estas cayeron 16.2 por ciento solamente en el mes de junio -que pudiera representar una disminución anual de alrededor de los 10,500 millones de dólares anuales para nuestro país-, según informó el viernes el Banco de México y que viene a representar la tercera caída mensual consecutiva, en el marco de la política antiinmigratoria del presidente Donald Trump. El mismo viernes la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, informó que del 20 de enero -día que Trump tomó posesión- al 31 de julio, 75,914 connacionales han sido repatriados desde Estados Unidos con la nueva campaña de redadas en el país vecino y la militarización y cierre de la frontera norte.
Fue un logro temporal la postergación de aranceles, pero los daños los tenemos todos los días y los riesgos a nuestro país cada día son más severos en muchos sentidos y se vislumbran algunos nubarrones en el horizonte. Así que, la presidenta “Ni muy muy, ni tan tan”.
Usted, ¿qué opina?