“Dos libros recomendables para leer”
Llegaron a mis manos un par de libros que me gustaron y por eso los recomiendo, ambos publicados como parte del constante y productivo trabajo editorial de El Colegio de Jalisco, que ojalá siga en ese espíritu divulgador que empezaran, casi como un sueño, hace más de cuarenta años, Alfonso de Alba Martín y José María Murià, quienes tuvieron que vencer la tibieza y desinterés de que somos acusados los tapatíos y que ha sido secundado por muchos buenos directores de esa institución en otros aspectos, pero que por fortuna a mi juicio no han descuidado la edición y ahora está siendo dirigida por Roberto Arias de la Mora quien, apoyado ya por muy buen equipo, ha publicado este par de obras que yo desconocía.
El primero al que me referiré es una reimpresión del libro Antonio Moreno y Oviedo, un distinguido laguense, escrito por mi multiadmirado Alfonso de Alba, quien -no me pesa decirlo muchas veces- es uno de los autores fundamentales del estado, del cual no conozco toda su bibliografía pero me basta y sobra con haber tenido del placer de leer El alcalde de Lagos, que es una obra que los jaliscienses hemos tenido la gloria de gozar y el libro a que me refiero se reedita con motivo del centenario del nacimiento de su autor, oriundo de la Atenas de Jalisco, de tan gratos recuerdos de juventud para el suscrito y que formaron con Moreno, el Dr. Fernando Reina, el Dr. Mariano Azuela -eminente autor, y padre y abuelo de ministros de la Corte-, Lauro Gallardo, José Becerra, y el farmacéutico y poeta don Francisco González León un grupo de intelectuales. Créame, mi solitario lector, que siempre es un gozo leer lo que escribió don Alfonso de Alba, a mí me encantó.
El segundo libro a comentar es obra de Enrique Ibarra Pedroza, de quien ya antes había conocido una obra sobre El puente de las damas y en la presentación de forros se mencionan otras que yo no conozco. Pero al que me refiero aquí es El nacimiento de Jalisco 1808-1825: de la lucha por la autonomía a los debates fundacionales, un tema interesante y poco tratado a pesar de versar sobre nuestro estado, y de su no reconocida hasta ahora importancia histórica en un país y Estado que Ramos Arizpe definió como federalismo teórico y centralismo práctico, pues para efectos de nuestra realidad histórica “los provincianos” no existimos; este libro nos saca de muchas dudas ratificando cuestiones históricas que aunque poco mencionadas ya se conocían, como la declaración de independencia que hiciera en San Pedro, Pedro Celestino Negrete tres meses antes de que se realizara en la capital de la República, eso para narrar con precisión los hechos que llevaron a Jalisco a comenzar lo que es, sin falsos elogios pero reconociendo la grandeza de quienes lo hicieron y a quienes debemos, cuando menos el reconocimiento.
@enrigue_zuloaga