Internacional
Hillary Clinton 'asume responsabilidad' sobre manejo del ataque en Libia
El presidente Barack Obama ha estado bajo fuego de sus detractores en este tema, y el gesto de Clinton es visto como un intento de desligarlo del asunto
LIMA, PERÚ (15/OCT/2012).- La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton dijo el lunes a medios de su país en Perú que asumirá la responsabilidad por las deficiencias que existieran en el manejo del ataque contra el consulado estadounidense en la ciudad libia de Bengasi.
"Asumo la responsabilidad", dijo Clinton, según las cadenas CNN y Fox, que la entrevistaron durante su visita a Lima.
"Estoy a cargo del Departamento de Estado, de sus 60 mil personas, más otros 275 puestos en el resto del mundo", afirmó a la CNN, en una breve declaración en la que intentó quitar la responsabilidad del caso al presidente Barack Obama.
"Las decisiones acerca de la seguridad son hechas por profesionales de la seguridad, pero vamos a revisar todo para asegurarnos de que estamos haciendo lo que debe hacerse en un entorno cada vez más riesgoso", dijo también Clinton, según Fox News.
El 11 de septiembre el asalto al complejo diplomático en Bengasi provocó la muerte del embajador Chris Stevens y otros tres funcionarios estadounidenses.
Desde entonces, Obama ha estado bajo el fuego cruzado de sus detractores y el gesto de Clinton es visto como un intento de desligarlo del asunto, a tres semanas de las elecciones del 6 de noviembre en las que el mandatario es candidato a la reelección.
Inmediatamente después del ataque al consulado en Bengasi, funcionarios de Washington relacionaron el hecho con las protestas en el mundo musulmán contra una película rodada en Estados Unidos considerada insultante a la fe islámica.
Pero desde entonces ha trascendido que los principales sospechosos del ataque, ahora percibido como un acto deliberado, son militantes islamistas relacionados con la red terrorista Al-Qaida.
El rival de Obama en noviembre, el republicano Mitt Romney, ha acusado al gobierno de dar una respuesta confusa y de fracasar en su política hacia Medio Oriente.
Ambos candidatos se enfrentarán el martes en un segundo debate televisado, y la intervención de Clinton parece haber sido programada para alejar a la Casa Blanca del centro de las críticas por lo sucedido en Libia, en momentos en que los sondeos ubican a Obama en caída y a su rival en ascenso.
La semana pasada, funcionarios del Departamento de Estado testificaron en una audiencia ante el Congreso que sus solicitudes para obtener seguridad adicional en Bengasi fueron rechazadas por sus superiores.
Según CNN, Clinton también dijo que, si bien es su deber tratar de proteger al personal del Departamento de Estado en el terreno, su país no debe abandonar lugares riesgosos como Libia, que están "fuertemente necesitados del apoyo de Estados Unidos".
La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton dijo el lunes a medios de su país en Perú que asumirá la responsabilidad por las deficiencias que existieran en el manejo del ataque contra el consulado estadounidense en la ciudad libia de Bengasi.
"Asumo la responsabilidad", dijo Clinton, según las cadenas CNN y Fox, que la entrevistaron durante su visita a Lima.
"Estoy a cargo del Departamento de Estado, de sus 60.000 personas, más otros 275 puestos en el resto del mundo", afirmó a la CNN, en una breve declaración en la que intentó quitar la responsabilidad del caso al presidente Barack Obama.
"Las decisiones acerca de la seguridad son hechas por profesionales de la seguridad, pero vamos a revisar todo para asegurarnos de que estamos haciendo lo que debe hacerse en un entorno cada vez más riesgoso", dijo también Clinton, según Fox News.
El 11 de septiembre el asalto al complejo diplomático en Bengasi provocó la muerte del embajador Chris Stevens y otros tres funcionarios estadounidenses.
Desde entonces, Obama ha estado bajo el fuego cruzado de sus detractores y el gesto de Clinton es visto como un intento de desligarlo del asunto, a tres semanas de las elecciones del 6 de noviembre en las que el mandatario es candidato a la reelección.
Inmediatamente después del ataque al consulado en Bengasi, funcionarios de Washington relacionaron el hecho con las protestas en el mundo musulmán contra una película rodada en Estados Unidos considerada insultante a la fe islámica.
Pero desde entonces ha trascendido que los principales sospechosos del ataque, ahora percibido como un acto deliberado, son militantes islamistas relacionados con la red terrorista Al-Qaida.
El rival de Obama en noviembre, el republicano Mitt Romney, ha acusado al gobierno de dar una respuesta confusa y de fracasar en su política hacia Medio Oriente.
Ambos candidatos se enfrentarán el martes en un segundo debate televisado, y la intervención de Clinton parece haber sido programada para alejar a la Casa Blanca del centro de las críticas por lo sucedido en Libia, en momentos en que los sondeos ubican a Obama en caída y a su rival en ascenso.
La semana pasada, funcionarios del Departamento de Estado testificaron en una audiencia ante el Congreso que sus solicitudes para obtener seguridad adicional en Bengasi fueron rechazadas por sus superiores.
Según CNN, Clinton también dijo que, si bien es su deber tratar de proteger al personal del Departamento de Estado en el terreno, su país no debe abandonar lugares riesgosos como Libia, que están "fuertemente necesitados del apoyo de Estados Unidos".
"Asumo la responsabilidad", dijo Clinton, según las cadenas CNN y Fox, que la entrevistaron durante su visita a Lima.
"Estoy a cargo del Departamento de Estado, de sus 60 mil personas, más otros 275 puestos en el resto del mundo", afirmó a la CNN, en una breve declaración en la que intentó quitar la responsabilidad del caso al presidente Barack Obama.
"Las decisiones acerca de la seguridad son hechas por profesionales de la seguridad, pero vamos a revisar todo para asegurarnos de que estamos haciendo lo que debe hacerse en un entorno cada vez más riesgoso", dijo también Clinton, según Fox News.
El 11 de septiembre el asalto al complejo diplomático en Bengasi provocó la muerte del embajador Chris Stevens y otros tres funcionarios estadounidenses.
Desde entonces, Obama ha estado bajo el fuego cruzado de sus detractores y el gesto de Clinton es visto como un intento de desligarlo del asunto, a tres semanas de las elecciones del 6 de noviembre en las que el mandatario es candidato a la reelección.
Inmediatamente después del ataque al consulado en Bengasi, funcionarios de Washington relacionaron el hecho con las protestas en el mundo musulmán contra una película rodada en Estados Unidos considerada insultante a la fe islámica.
Pero desde entonces ha trascendido que los principales sospechosos del ataque, ahora percibido como un acto deliberado, son militantes islamistas relacionados con la red terrorista Al-Qaida.
El rival de Obama en noviembre, el republicano Mitt Romney, ha acusado al gobierno de dar una respuesta confusa y de fracasar en su política hacia Medio Oriente.
Ambos candidatos se enfrentarán el martes en un segundo debate televisado, y la intervención de Clinton parece haber sido programada para alejar a la Casa Blanca del centro de las críticas por lo sucedido en Libia, en momentos en que los sondeos ubican a Obama en caída y a su rival en ascenso.
La semana pasada, funcionarios del Departamento de Estado testificaron en una audiencia ante el Congreso que sus solicitudes para obtener seguridad adicional en Bengasi fueron rechazadas por sus superiores.
Según CNN, Clinton también dijo que, si bien es su deber tratar de proteger al personal del Departamento de Estado en el terreno, su país no debe abandonar lugares riesgosos como Libia, que están "fuertemente necesitados del apoyo de Estados Unidos".
La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton dijo el lunes a medios de su país en Perú que asumirá la responsabilidad por las deficiencias que existieran en el manejo del ataque contra el consulado estadounidense en la ciudad libia de Bengasi.
"Asumo la responsabilidad", dijo Clinton, según las cadenas CNN y Fox, que la entrevistaron durante su visita a Lima.
"Estoy a cargo del Departamento de Estado, de sus 60.000 personas, más otros 275 puestos en el resto del mundo", afirmó a la CNN, en una breve declaración en la que intentó quitar la responsabilidad del caso al presidente Barack Obama.
"Las decisiones acerca de la seguridad son hechas por profesionales de la seguridad, pero vamos a revisar todo para asegurarnos de que estamos haciendo lo que debe hacerse en un entorno cada vez más riesgoso", dijo también Clinton, según Fox News.
El 11 de septiembre el asalto al complejo diplomático en Bengasi provocó la muerte del embajador Chris Stevens y otros tres funcionarios estadounidenses.
Desde entonces, Obama ha estado bajo el fuego cruzado de sus detractores y el gesto de Clinton es visto como un intento de desligarlo del asunto, a tres semanas de las elecciones del 6 de noviembre en las que el mandatario es candidato a la reelección.
Inmediatamente después del ataque al consulado en Bengasi, funcionarios de Washington relacionaron el hecho con las protestas en el mundo musulmán contra una película rodada en Estados Unidos considerada insultante a la fe islámica.
Pero desde entonces ha trascendido que los principales sospechosos del ataque, ahora percibido como un acto deliberado, son militantes islamistas relacionados con la red terrorista Al-Qaida.
El rival de Obama en noviembre, el republicano Mitt Romney, ha acusado al gobierno de dar una respuesta confusa y de fracasar en su política hacia Medio Oriente.
Ambos candidatos se enfrentarán el martes en un segundo debate televisado, y la intervención de Clinton parece haber sido programada para alejar a la Casa Blanca del centro de las críticas por lo sucedido en Libia, en momentos en que los sondeos ubican a Obama en caída y a su rival en ascenso.
La semana pasada, funcionarios del Departamento de Estado testificaron en una audiencia ante el Congreso que sus solicitudes para obtener seguridad adicional en Bengasi fueron rechazadas por sus superiores.
Según CNN, Clinton también dijo que, si bien es su deber tratar de proteger al personal del Departamento de Estado en el terreno, su país no debe abandonar lugares riesgosos como Libia, que están "fuertemente necesitados del apoyo de Estados Unidos".