Cultura
Reafirma Rowling el poder de sus letras
Se trata de la apuesta de la autora de la saga de Harry Potter por la ''literatura para adultos'', a los cuales también conquistó
CIUDAD DE MÉXICO (02/FEB/2013).- De muy grata lectura resulta Una vacante imprevista, la nueva novela de la inglesa J.K.Rowling, editada por Salamandra y distribuida en nuestro país por Océano.
Se trata de la apuesta de la autora de la saga de Harry Potter por la “literatura para adultos”, en un trabajo que por más famosa y millonaria que sea –y lo es-, significó para la escritora un desafío de peso, aun cuando ella dijera en entrevistas que no necesitaba probar nada con su escritura.
Con apenas 47 años, una de las mujeres más poderosas de las letras del mundo, apostó y ganó. Su novela Casual vacancy resultó uno de los 25 libros más vendidos en su natal Inglaterra y, como era de prever, ya se vendieron los derechos a la BBC, que realizará una miniserie.
Cuando hablamos de esta rubia que escribe a mano y con bolígrafo, cuya escritora favorita es Jane Austen (Orgullo y prejuicio), no hablamos sólo de literatura, claro está, sino también de un fenómeno comercial que produce hechos extraordinarios como el tiempo récord en que se hizo la traducción al español de su libro, con la lógica pretensión de la editora Salamandra de que la novela saliera casi en simultáneo con el mercado inglés.
“Barry Fairbrother no quería salir a cenar. Llevaba casi todo el fin de semana soportando un palpitante dolor de cabeza e intentando terminar a tiempo un artículo para el periódico local. Sin embargo, durante la comida su mujer había estado tensa y poco comunicativa y Barry dedujo que con la tarjeta de felicitación de aniversario no había logrado atenuar su delito de pasarse toda la mañana encerrado en el estudio. No ayudaba el hecho de que hubiera estado escribiendo sobre Krystal, por la que Mary, aunque lo disimulara, sentía antipatía.
—Quiero llevarte a cenar fuera, Mary —mintió para rebajar la tensión—. ¡Diecinueve años, niños! Diecinueve años y vuestra madre está más guapa que nunca”.
Un pueblito inglés imaginario de nombre Pagford es el escenario donde Rowling ubica a sus criaturas, hombres y mujeres de la mediana edad, de la media clase, de la medianía, obsesionados por no perder un céntimo de su posición, mirando por encima del hombro a sus vecinos de Los Prados, un vecindario pobre y marginal que les ha adosado el municipio contiguo.
Barry Fairbrother, el joven alcalde del pueblo, muere inesperadamente a causa de un ataque cerebral, dejando su puesto vacante y a lo más granado de la sociedad en pugna por ocupar su silla todavía tibia.
Con altas dosis de humor negro y una mirada crítica aunque no cínica sobre sus compatriotas, la escritora británica construye un paisaje nacional que bien podría ser la contracara de esa “tierra de las maravillas” dibujada por Danny Boyle en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
De hecho, la crítica, que la ha castigado y premiado en partes iguales sin dar un resultado definitivo que se incline hacia un lado o el otro de la báscula, ha dicho que se trata de una novela “dickensiana”, un calificativo que obviamente halagó mucho a Rowling.
Una vacante imprevista es la novela de una escritora. “Puedo decir con la mano en el corazón que nunca escribiré por otra razón que no sea el deseo ardiente de hacerlo”, dijo a la BBC, en una declaración que en sus labios resulta honesta.
Así como muchos autores no leídos y marginales son tratados desde el lugar del olvido, desde la frontera que divide al ostracismo de la popularidad, muchos escritores, entre ellos Rowling, deben pedir a cada rato disculpas por su éxito masivo.
Lo cierto es que ni lo uno garantiza nada, ni lo otro desestima todo.
La tabla de calidad, se sabe, la alimentan por un lado la crítica y por el otro los lectores. A estos últimos se debe Rowling, “puesto que a ellos no se les paga por tener una opinión”, ha dicho, lo que no le impidió aceptar en su momento que “cualquier escritor que dice que no siente escalofríos cuando se acerca la fecha de publicación, por supuesto que es un maldito mentiroso”.
Con información de Agencia Sinembargo.mx
Se trata de la apuesta de la autora de la saga de Harry Potter por la “literatura para adultos”, en un trabajo que por más famosa y millonaria que sea –y lo es-, significó para la escritora un desafío de peso, aun cuando ella dijera en entrevistas que no necesitaba probar nada con su escritura.
Con apenas 47 años, una de las mujeres más poderosas de las letras del mundo, apostó y ganó. Su novela Casual vacancy resultó uno de los 25 libros más vendidos en su natal Inglaterra y, como era de prever, ya se vendieron los derechos a la BBC, que realizará una miniserie.
Cuando hablamos de esta rubia que escribe a mano y con bolígrafo, cuya escritora favorita es Jane Austen (Orgullo y prejuicio), no hablamos sólo de literatura, claro está, sino también de un fenómeno comercial que produce hechos extraordinarios como el tiempo récord en que se hizo la traducción al español de su libro, con la lógica pretensión de la editora Salamandra de que la novela saliera casi en simultáneo con el mercado inglés.
“Barry Fairbrother no quería salir a cenar. Llevaba casi todo el fin de semana soportando un palpitante dolor de cabeza e intentando terminar a tiempo un artículo para el periódico local. Sin embargo, durante la comida su mujer había estado tensa y poco comunicativa y Barry dedujo que con la tarjeta de felicitación de aniversario no había logrado atenuar su delito de pasarse toda la mañana encerrado en el estudio. No ayudaba el hecho de que hubiera estado escribiendo sobre Krystal, por la que Mary, aunque lo disimulara, sentía antipatía.
—Quiero llevarte a cenar fuera, Mary —mintió para rebajar la tensión—. ¡Diecinueve años, niños! Diecinueve años y vuestra madre está más guapa que nunca”.
Un pueblito inglés imaginario de nombre Pagford es el escenario donde Rowling ubica a sus criaturas, hombres y mujeres de la mediana edad, de la media clase, de la medianía, obsesionados por no perder un céntimo de su posición, mirando por encima del hombro a sus vecinos de Los Prados, un vecindario pobre y marginal que les ha adosado el municipio contiguo.
Barry Fairbrother, el joven alcalde del pueblo, muere inesperadamente a causa de un ataque cerebral, dejando su puesto vacante y a lo más granado de la sociedad en pugna por ocupar su silla todavía tibia.
Con altas dosis de humor negro y una mirada crítica aunque no cínica sobre sus compatriotas, la escritora británica construye un paisaje nacional que bien podría ser la contracara de esa “tierra de las maravillas” dibujada por Danny Boyle en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
De hecho, la crítica, que la ha castigado y premiado en partes iguales sin dar un resultado definitivo que se incline hacia un lado o el otro de la báscula, ha dicho que se trata de una novela “dickensiana”, un calificativo que obviamente halagó mucho a Rowling.
Una vacante imprevista es la novela de una escritora. “Puedo decir con la mano en el corazón que nunca escribiré por otra razón que no sea el deseo ardiente de hacerlo”, dijo a la BBC, en una declaración que en sus labios resulta honesta.
Así como muchos autores no leídos y marginales son tratados desde el lugar del olvido, desde la frontera que divide al ostracismo de la popularidad, muchos escritores, entre ellos Rowling, deben pedir a cada rato disculpas por su éxito masivo.
Lo cierto es que ni lo uno garantiza nada, ni lo otro desestima todo.
La tabla de calidad, se sabe, la alimentan por un lado la crítica y por el otro los lectores. A estos últimos se debe Rowling, “puesto que a ellos no se les paga por tener una opinión”, ha dicho, lo que no le impidió aceptar en su momento que “cualquier escritor que dice que no siente escalofríos cuando se acerca la fecha de publicación, por supuesto que es un maldito mentiroso”.
Con información de Agencia Sinembargo.mx