Preservativos y vuvuzelas rojas en un país castigado por el sida

JOHANNESBURGO, SUDÁFRICA (13/JUN/2010) - En el país con la cifra oficial récord  de 5.7 millones de afectados por el virus del sida, las autoridades sudafricanas y los organizadores han previsto un gran reparto de preservativos  para los días del Mundial y distintas campañas, incluyendo la difusión de  vuvuzelas rojas.

Ese color (que simboliza internacionalmente la solidaridad con las  víctimas) en las tradicionales trompetas que plagan las gradas de los estadios  de fútbol en Sudáfrica se acompaña con la leyenda "Haz ruido contra el VIH".

El objetivo es claro: evitar que la afluencia masiva de visitantes traiga  nuevas complicaciones y enfermedades venéreas a la población, y que los hinchas  no abandonen el país tras haberse contagiado del virus de la inmunodeficiencia  adquirida (VIH).

Tradicionalmente, los Mundiales son propicios para una mayor actividad  sexual y un incremento de la prostitución, ante lo que la organización ha  pedido prevención para evitar enfermedades.

"Vamos a tener muchos visitantes. Sabemos que habrá muchos turistas que  vendrán para tener relaciones sexuales. No se puede ocultar eso. Es algo que  ocurrirá, pero, ¿cuáles serán los efectos para el país?", se preguntó hace unas  semanas el ministro de Salud de Sudáfrica, Aaron Motsoaledi.

Para combatir las prácticas de riesgo, el equipo médico de la organización  anunció que la información y la distribución de preservativos será clave  durante los días del evento.

"Habrá una afluencia importante de gente al país y un espíritu festivo que podría desencadenar una mayor demanda de preservativos", dijo el  responsable médico del Comité Local de Organización de la cita mundialista,  Victor Ramathesele en una conferencia sobre salud en febrero en Sun City.

Según la agencia antisida de Naciones Unidas (ONU), Sudáfrica es el país  con mayor número de seropositivos del mundo, con 5.700.000 de una población de  48 millones, lo que constituye una tasa del 12%.

Las estimaciones de las autoridades también apuntan a la llegada al país de  40 mil prostitutas y Sudáfrica ha pedido colaboración internacional para cubrir  una partida extra de mil millones de preservativos, en previsión de la  llegada esperada de algo menos de medio millón de personas.

El mundo del fútbol también ha querido implicarse en la lucha contra el  VIH/sida y desde la Federación Internacional (FIFA) se han fomentado distintos  centros y proyectos de ayuda al país, entre otros los destinados a la batalla  contra la enfermedad.

"Creamos una plataforma para que las comunidades puedan hacer frente a  cuestiones sociales tales como los derechos de la infancia, la educación, la  salud y la prevención del VIH/sida. Dejaremos un legado en África que durará  mucho tiempo", señaló el presidente del  organismo, Joseph Blatter.

La FIFA inauguró 20 centros de "Fútbol por una Esperanza" para proteger a  los jóvenes.  

Seis de ellos están en Sudáfrica y el resto por distintos puntos del  continente. "No hay necesidad de jugar al fútbol si no se hace nada por la  salud de los jóvenes", apuntó el dirigente suizo.

Algunos rostros conocidos del mundo del fútbol han participado también  recientemente en campañas y anuncios de televisión por este motivo, como el  marfileño Didier Drogba, el italiano Fabio Cannavaro o el argentino Javier  Mascherano.

En otros países también se ha aprovechado el evento para lanzar una  campaña, como en México, donde el Centro Nacional para la Prevención y el  Control del VIH/Sida (CENSIDA) lanzó el proyecto "El fútbol te da la revancha,  el Sida no", con información sobre el Mundial y datos sobre la prevención y la  enfermedad.

Varios países han aconsejado a sus hinchas que extremen la precaución en un  país donde el VIH causa estragos y la preocupación se ha extendido en caso de  visita a los países vecinos, donde la enfermedad también alcanza cotas  dramáticas: Suazilandia, por ejemplo, se mueve en niveles que superan el 30% de  tasa de infección.