Intentan sacar del olvido bosque del Iztaccíhuatl y Popocatépetl

México.- El director del Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, Zoquiapan, Alejandro López López, dijo a agencia que durante 1990 y 2000 hubo un gran deterioro, pero en ese último año se inició un proceso para revertir la situación del área.

Este parque es emblemático y se está trabajando en él porque es un símbolo nacional, un icono que internacionalmente identifica a México por sus figuras, dijo el funcionario federal.

"El futuro del bosque -dijo- es ser el pulmón del Centro de México, ese es el destino que tenemos y que debemos cumplir" e hizo un llamado a la sociedad para que participe y que los responsables del bosque den respuesta a este desafío.

El Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, Zoquiapan, conforma una unidad geográfica y biótica incuestionable, y cuenta con una superficie de 45 mil 97 hectáreas, 25 mil 679 para el Izta-Popo y 19 mil 418 para Zoquiapan.

Esta área ocupa parte de los municipios de Texcoco, Ixtapaluca y Tlalmanalco, Amecameca, Atlautla y Ecatzingo en el estado de México, así como Tlahuapan, San Salvador el Verde, Domingo Arenas, San Nicolás de los Ranchos y Tochimilco, en Puebla y Tetela del Volcán, Morelos.

El parque está localizado en los límites de los estados de México, Puebla y Morelos, y comprendido dentro del macizo montañoso denominado Sierra Nevada, que flanquea el oriente de la Cuenca de México y forma parte del Sistema o Eje Volcánico Transmexicano.

El Iztaccíhuatl tiene una altura de cinco mil 280 metros sobre el nivel del mar, y el Popocatépetl de cinco mil 482 metros.

En este parque, a partir de 1995 se empezaron a otorgar permisos de aprovechamiento forestal a ejidos y comuneros, lo que junto con otros factores provocaron que el bosque haya disminuido 30 por ciento de 1990 a 2000, según datos de la Comisión Nacional Forestal.

En este caso, el director del parque comentó que a partir de 2000, cuando se inició el programa, se ha revertido la situación en la zona y se ha reducido en 90 por ciento la tala ilegal, mientras que los incendios han decrecido en 80 por ciento y por otro lado se han restaurado cinco mil hectáreas.

Desde 2001, añadió, la reforestación promedio en el parque es de entre 800 y 900 hectáreas anuales, por lo que actualmente se tienen unas cinco mil hectáreas restauradas, y para este año se prevé contar con otras 890. , "Quizá un poco más porque nos favoreció mucho el tiempo" y diariamente se plantan en el parque entre nueve y 10 mil árboles desde que inició el programa, precisó.

Además, en el área protegida se tiene policía montada, vigilancia comunitaria en 19 comunidades, así como los operativos de Probosque y de la Procuraduría General de la República, lo que ha provocado que las organizaciones delictivas para la tala ilegal se vayan a otras áreas.

Mencionó que existen otros tipos de tala, que es la de personas que aprovechan un árbol caído para uso doméstico, lo que se tiene que regular, mientras que la tala mediana la realizan familias a las que se les debe ofrecer una actividad productiva.

López López resaltó la seguridad actual que se tiene en el parque, ya que desde el año 2003 no se han registrado asaltos ni robos de autopartes, y ya no se han encotrado abandonados autos robados.

Con respecto a la disminución de los glaciares de los dos colosos, el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl, dijo que es una hipótesis, porque "todavía no podemos sacar conclusiones de ciclos cortos, aunque destacó que es un problema complejo.

"La tendencia es que los glaciares si se han reducido, particularmente el del Popocatépetl, pero también por razones de la actividad volcánica y no por el cambio climático, ni otra posible causa; en el caso del Iztaccíhuatl se ha documentado alguna disminución donde tiene un factor importante la lluvia ácida".

Entonces, dijo, la disminución de los glaciares responde a factores múltiples, "eso es lo que se está investigando y hay mucha gente trabajando en ello, como el centro de Estudios de la Atmósfera de la UNAM, el Instituto de Geofísica y el Instituto de Geografía".

El bosque de la zona, agregó, es proveedor de una serie de servicios ambientales, como la purificación del aire, regulación del clima, dotación de oxígeno y agua, "entonces esta es la parte que nos llama a ver a futuro y a conservarlo para las futuras generaciones". NTX