En el oriente y centro de Guadalajara se concentran las colonias con las redes de drenaje y colectores más antiguos de la ciudad, con una antigüedad que va de 50 a 92 años, según la plataforma “Zoom Metropolitano” del Imeplan, con datos del SIAPA de 2023.Entre estas colonias se encuentran el Centro Histórico, la Moderna, Analco, Santa Tere, San Juan de Dios, La Perla, el Santuario, San Rafael, la Olímpica y Mezquitán Country, zonas con la mayor incidencia de socavones.Los hundimientos se generan por la antigüedad de las redes de drenaje, las fugas, la mala calidad de los tubos y colectores instalados, así como la falta de mantenimiento, explicó Luis Valdivia, académico de la Universidad de Guadalajara.“Se dan donde la red hidráulica es antigua y con mal mantenimiento, por ejemplo, toda la parte oriente de la ciudad es muy propensa. Al no recibir atención inmediata, las fugas aumentan, se crean oquedades y se generan problemas mayores”.En los últimos días, se registraron hundimientos en colonias como La Duraznera, La Penal y El Bethel. En esta última, un socavón de 20 metros de largo causó daños en tres vehículos y dejó cuatro lesionados el pasado 4 de julio.Este socavón pudo originarse por las lluvias, que ocasionaron que la red pluvial trabajara a presión y no resistiera el flujo de agua, afirmó el director del SIAPA, Antonio Juárez.“Ese movimiento puede ocasionar que se abra y tenga ligeras aberturas. Por ahí sale agua, que comienza a arrastrar los materiales que rodean la tubería y se genera la oquedad bajo la cinta asfáltica, fuera del colector pluvial”.Arturo Gleason, también académico de la UdeG, agregó que las redes de drenaje no soportan la cantidad de agua que escurre de las calles, lo que desgasta las tuberías y provoca fugas, que derivan en el colapso del drenaje y, posteriormente, de las vialidades.Josué Sánchez Tapetillo, especialista en gestión de recursos hídricos, señaló que el incremento en socavones en meses recientes se relaciona con la urbanización acelerada. Para el mantenimiento del drenaje, recomendó la instalación de mangas, un sistema que funciona en tuberías pequeñas y no tan antiguas, evitando abrir calles.Cuando no sea posible instalar mangas, se debe renovar completamente la red de drenaje. El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, calculó que esta renovación tendría un costo de nueve mil millones de pesos y debe realizarse de forma paulatina, iniciando en las zonas de mayor riesgo.Para detectar fallas en la red hidrosanitaria, los especialistas recomiendan usar herramientas como el georradar y sistemas de videoinspección en colonias con redes antiguas. Gracias a estas tecnologías, el SIAPA detectó un socavón a menos de 100 metros del que apareció en avenida Malecón el 4 de julio.También sugieren implementar sistemas de monitoreo de escurrimientos subterráneos para identificar colectores colapsados, lo que permitiría prevenir accidentes y reducir el desgaste de las redes de drenaje en la ciudad.En los últimos días, han surgido nuevos socavones en distintas zonas de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), fenómeno que se ha intensificado con la llegada de la temporada de lluvias y que evidencia las deficiencias en la infraestructura subterránea de la ciudad.Uno de los casos más graves ocurrió el pasado 4 de julio en la colonia El Bethel, en el municipio de Guadalajara. Un socavón de aproximadamente 20 metros de largo provocó el colapso de un tramo de la avenida Malecón. El incidente causó daños en tres vehículos y dejó como saldo cuatro personas lesionadas. Días después, a tan solo 100 metros del sitio, personal del Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) detectó un segundo hundimiento durante las labores de inspección, aunque en este caso no se reportaron daños adicionales.El 8 de julio, a la madrugada, otro socavón se abrió en el cruce de Privada Misioneros y Frailes, en la colonia La Duraznera, en San Pedro Tlaquepaque. El hundimiento alcanzó una profundidad de cinco metros, con una longitud de 12 metros y seis de ancho. Afortunadamente, no hubo personas afectadas ni daños materiales considerables.Ese mismo día, por la tarde, un camión recolector de basura cayó en un socavón en el cruce de Álvaro Obregón y la calle Pánfilo Pérez, conocida como la 72, en la colonia La Penal, también en Guadalajara. El incidente volvió a encender la alerta sobre la fragilidad de las vialidades en distintos puntos del área metropolitana.A estos hechos se suman otros reportes, como un hundimiento en el cruce de las calles Santos Degollado y Colón, en la colonia Cerro del Cuatro, en Tlaquepaque, y otro más en la calle Garibaldi, a escasa distancia de la avenida Federalismo, en Guadalajara.Para los especialistas, la explicación técnica de este fenómeno es clara. Josué Sánchez, experto en gestión de recursos hídricos, atribuye la aparición de los socavones al colapso de las redes de drenaje, especialmente en temporada de lluvias. “Surgen más en esta época del año porque los drenajes están trabajando a presión. No se diseñaron para el caudal que hoy están recibiendo. Con la urbanización acelerada, se incrementa el volumen de agua que se canaliza a través de las tuberías y se rebasa su capacidad”, explicó.Sánchez añade que al generarse fugas, el agua comienza a arrastrar el material del subsuelo que rodea a las tuberías, formando cavidades subterráneas. Estas fallas, conocidas como “cavernas”, se agravan con el paso de vehículos pesados o por la mala calidad de los materiales utilizados en la red hidráulica.Arturo Gleason, académico de la Universidad de Guadalajara, coincide en que el problema radica en una red de drenaje saturada y con mantenimiento insuficiente. “Las tuberías se llenan y como no cabe el agua, se genera presión y se provocan fugas. Eventualmente, esto lleva al colapso del sistema y de las calles”, indicó.Ambos especialistas advierten que, si no se atienden con urgencia las condiciones de las redes de agua y drenaje, los socavones seguirán multiplicándose con cada temporal.LA VOZ DEL EXPERTOLuis Valdivia, académico de la Universidad de GuadalajaraJosué Sánchez, especialista en gestión de recursos hídricos.Especialistas en temas hídricos recomiendan aplicar tecnologías como el georradar y los sistemas de videoinspección en las colonias con redes de drenaje más antiguas, con el fin de prevenir la aparición de socavones en la Zona Metropolitana de Guadalajara.Una muestra de su utilidad es el nuevo socavón detectado por el SIAPA a menos de 100 metros del que colapsó la avenida Malecón el pasado 4 de julio. Gracias al uso de estas herramientas, el organismo pudo identificar oportunamente el hundimiento y evitar afectaciones mayores.Luis Valdivia, académico de la Universidad de Guadalajara, hizo un llamado al SIAPA para implementar un programa sistemático de detección y atención de fugas, especialmente en zonas donde ya se han registrado daños previos.“Donde ya tienen identificadas zonas, hay que recorrerlas para ver si, donde inicia la fuga, se da una atención rápida. Eso soluciona el problema”, explicó.Por su parte, Josué Sánchez, especialista en gestión de recursos hídricos, recordó que el SIAPA cuenta con un equipo de georradar que ya fue utilizado en la colonia El Bethel, donde se localizó otro hundimiento. Por ello, subrayó la importancia de usar esta tecnología de forma constante, sobre todo en áreas con mayor vulnerabilidad.“Debería haber cuadrillas del SIAPA cuyo trabajo diario sea recorrer la ciudad para revisar las redes de agua, incluso las secundarias. Que al menos una vez al año se utilice el georradar para detectar socavones más grandes y peligrosos”, propuso.Ambos especialistas coinciden en que el radar es una herramienta útil para identificar puntos críticos, aunque también sugieren la realización de estudios más especializados para ubicar las zonas con mayor riesgo estructural dentro del área metropolitana.EVITE ACCIDENTESEvite intervenciones propias: no rellene ni circule por el socavón; esto puede agravar la falla, contamina acuíferos o pone en riesgo su integridad.Emergencias: llame a Protección Civil, Bomberos, SIAPA o al 911 para que evalúen el riesgo.Se asegura el área: se coloca cinta de seguridad o barricadas para evitar que personas o vehículos se acerquen al borde, ya que puede ceder más terreno.Según el caso, se evacuan inmediaciones: mantienen a la población y vehículos a distancia segura hasta que evalúen si las viviendas o vialidades colindantes están comprometidas.Se documenta evidencia: toman fotografías desde puntos seguros para facilitar inspección técnica o trámites ante aseguradoras.TELÓN DE FONDOEn los últimos meses, han brotado más socavones en la Zona Metropolitana de Guadalajara. Por ello, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, aseguró que el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) está obligado a renovar la red de drenaje.Lemus indicó que el SIAPA debe comenzar por atender las colonias con más riesgo de que se presenten socavones. Para ello, se ha hecho un cálculo de hasta 9 mil millones de pesos para renovar la red hidrosanitaria del SIAPA, pero se debe hacer de forma paulatina.“El SIAPA está obligado a mejorar el servicio de calidad de agua potable en la ZMG, pero también en la renovación de la infraestructura de colectores para evitar inundaciones y riesgos para la población y evitar este tipo de cosas (socavones)”.“Tiene que ser paulatino e iniciar en las zonas de mayor riesgo. Empezamos una nueva zona cercana a la colonia El Bethel, en la colonia Benito Juárez, pero hay otras zonas que se han detectado en Tonalá, en Tlaquepaque y que tenemos que entrar de una manera muy decidida”.Josué Sánchez sugiere la instalación de mangas, sistemas que funcionan para tuberías pequeñas y no tan antiguas, que evitan abrir las calles.“Existe alternativa de rehabilitación de los drenajes con mangas, es como un forro interno que se instala desde adentro sin necesidad de parar la operación de la tubería y sin necesidad de abrir las calles”.Pero en casos donde haya redes de drenaje o colectores más grandes o con mayor antigüedad, la solución es el cambio de las tuberías.“Se tiene que pensar en renovar la tubería, los ductos o los grandes colectores que se construyen ahí en el lugar, porque a veces no hay tubos de esos tamaños para sustituirlos. Es la (solución) más costosa, la más cara y la que más molestias produce, pero es la que reduciría los socavones cuando menos 20 o 30 años”.CLAVESProblema. Ante la creciente aparición de socavones en la Zona Metropolitana de Guadalajara, especialistas y autoridades plantean diversas acciones para prevenir y atender estos hundimientos, especialmente en colonias con infraestructura hidráulica antigua.Georradar. Una de las principales medidas es la implementación de tecnología como el georradar y los sistemas de videoinspección, herramientas que permiten detectar oquedades y filtraciones sin necesidad de excavar, lo que ayuda a identificar fallas antes de que se conviertan en riesgos mayores.Monitoreo. También se propone reforzar el monitoreo constante de las redes de drenaje, con personal especializado que recorra las zonas más vulnerables de manera periódica. Otra alternativa es la instalación de mangas dentro de las tuberías, un sistema que permite rehabilitarlas sin romper el pavimento. Esta técnica prolonga la vida útil del drenaje y reduce las afectaciones a la vialidad.Renovación. A largo plazo, resulta indispensable la renovación total de la red de drenaje, especialmente en puntos críticos.Relleno. Además, para evitar fallas estructurales, se debe cuidar la correcta instalación y unión de los tubos, así como el relleno adecuado de las zanjas, utilizando materiales como arena amarilla y grava que permitan la compactación y soporte del terreno.