Tren

Los sueños son la forma embrionaria de los proyectos. El del tren suburbano que eventualmente llegara a unir a Guadalajara con Tlajomulco, y que en el futuro pudiera tener otras ramificaciones, vale —mejor dicho: puede valer— como botón de muestra...
—II—
Tlajomulco, ya se sabe, es el municipio de la zona metropolitana hacia donde tiende, por razón natural, el crecimiento de la mancha urbana. En esa zona hay lo que en otras hace falta: territorio. Eso explica que tienda a convertirse en la “ciudad dormitorio” de Guadalajara.
Aún no hay un documento que la oficialice. La noticia, empero, consiste en que el director de Transporte Ferroviario y Multimodal, de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Óscar Corzo Cruz, aseveró que es factible pensar en que los terrenos y la infraestructura que fueron de Ferrocarriles Nacionales de México, puedan facilitarse para el tren suburbano que sería la vía de comunicación ideal del núcleo de la zona metropolitana con las colonias y desarrollos que se ubican en el presente y que se ubiquen en el futuro hacia el sureste de la misma.
Vaya: una vez que el macrobús esté en operación, y si este sueño se transforma en proyecto y luego se vuelve realidad, podría pensarse en recorridos desde el extremo norte de Guadalajara, casi desde la ceja de la Barranca de Huentitán —la zona aledaña al Zoológico— hasta el punto más extremo al que llegara el tren suburbano, en unos 45 minutos: mucho menos de lo que normalmente se haría, en automóvil, en horas pico, del mismo punto a Catedral, pongamos por ejemplo.
—III—
El problema, dicen, consiste en que el proyecto implicaría una erogación del Gobierno federal, del orden de los dos mil 500 millones de pesos.
Empero, si se considera que una inversión de ese tipo nivelaría los números rojos que por diversos conceptos tiene a los ojos de la ciudadanía local el Gobierno del Estado, es probable que la Federación abra la llave. Todo con tal de recuperar algo de lo mucho que se ha perdido en lo que va del partido... y por conservar a Jalisco como el bastión panista que históricamente ha sido.
(Como dicen que dijo José Feliciano: “Ya veremos...”).

JAIME GARCÍA ELÍAS