| Proteger el bosque Por: EL INFORMADOR 21 de junio de 2008 - 23:00 hs En las semanas recientes se ha avivado la discusión pública acerca de la protección al Bosque Los Colomos, que constituye el principal pulmón con que contamos dentro de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), y que ha sido objeto de presiones urbanísticas ocasionadas por el desarrollo de áreas habitacionales y la construcción de vialidades que sirven precisamente para conectar a los nuevos conglomerados de vivienda y comerciales. La decisión adoptada por el gobernador de Jalisco, Luis Curiel, a finales del siglo XIX de concretar arreglos jurídicos con los propietarios de esa vasta zona de manantiales, para dotar de agua a Guadalajara, marcó un hito en lo que sería el desarrollo de la ciudad, ahora convertida en una gran metrópoli. En las décadas recientes, las presiones de desarrollos inmobiliarios hacia la zona de Los Colomos ha hecho que se tomen algunas medidas desde las instancias gubernamentales, tanto en el Estado como en los municipios de Guadalajara y Zapopan, con el pretendido propósito de preservar el área que quedó en posesión estatal (incluyendo la porción que fue entregada en comodato al Ayuntamiento zapopano) de posibles invasiones que mermarían la extensión del bosque. Sin embargo, ya en años más cercanos a la fecha, parece privar una especie de desconcierto (en su acepción de desorden o desavenencia) entre las dependencias gubernamentales que deben intervenir para, por un lado, autorizar los permisos de construcción que no afecten la zona protegida, y por otro hacer valer la posesión del bosque y evitar invasiones. En las últimas administraciones municipales de Guadalajara y Zapopan se han venido dando permisos para desarrollos comerciales y habitacionales que han desatado polémica y litigios en los tribunales porque dos o más partes interesadas se dicen poseedores legítimos de los predios. El marco normativo ha llevado a que se realicen procedimientos administrativos y judiciales muy largos y complejos que pasan de una instancia a otra y no terminan, mientras que las construcciones avanzan. Por todo ello, parece asomar una buena decisión que llevaría, por lo pronto, al Ayuntamiento de Zapopan y al Gobierno del Estado a comenzar a dilucidar con todos los argumentos jurídicos en la mano, cuáles terrenos son posesión estatal y cuáles deben quedar a salvo en manos de sus legítimos propietarios. Luego vendrá la parte en que las autoridades municipales procedan a determinar si han sido correctas las licencias que se han otorgado para los constructores; de haber irregularidades en las autorizaciones, éstas deberán quedar sin efecto, porque no se puede seguir violentando la ley, ni afectando el patrimonio de los jaliscienses. El Bosque Los Colomos debe ser defendido por todos, ciudadanos y autoridades, en lo que es su superficie, la que se le dotó a la ZMG como fuente de aprovisionamiento de agua y oxígeno; ni un metro más, pero ni un metro menos. Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones