Martes, 03 de Junio 2025

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Mecanismos del crecimiento vegetal

Por: EL INFORMADOR

Tratando de hacer valer el desarrollo de un organismo vegetal, tanto para que nuestros amables lectores puedan explicárselo, es que hemos puesto como titulo, parte de lo que realmente está como una constante en todo organismo en crecimiento y, particularmente en este caso el vegetal, esto es la fisiología y los procesos metabólicos; lo que bien pudiéramos entender la conversión de los elementos concurrentes tanto químico como físicos y microbiológicos en los productos finales.

En los capítulos próximos pasados expuestos en esta misma página de los domingos, nuestro interés ha sido presentar la información de la influencia que tienen los productos hormonales y los reguladores de crecimiento. Damos por descontado que para obtener la respuesta esperada en cuanto a los efectos causados en el vegetal por tales productos, dichos efectos se esperan óptimos y tienen como condición insoslayable el rango sustentado de la gama de nutrientes durante las etapas de desarrollo del organismo; esto es, desde el estado o calidad de la semilla hasta la obtención del producto cosechado. Tenemos pues, como siempre la intención de exponer la presencia e influencia de factores que, para bien y para mal, afectan un desarrollo normal, y es por ello que estaremos en la presente, dando a conocer factores de importancia.

Luz y fotoperiodo

No pasaron más de seis décadas para que el agricultor encontrara con interés, que los vegetales de su cultivo requieren de un tiempo de luz; se debió a los trabajos de investigadores, el establecimiento de las necesidades de un organismo vegetal en cuanto a la luz, y también a las necesidades de oscuridad. Así, algunas especies, sometidas a diversos fotoperiodos, dan respuestas diversas; así el efecto de la longitud del día –y esto lo decimos como ejemplo- para el florecimiento se estableció en forma definitiva. Este  “fenómeno” se conoce con el nombre de fotoperiodicidad. Significa esto, la suma de horas luz requeridas por el organismo vegetal; tenemos pues que la sociedad reconoce a las plantas como: de pleno sol, de media sombra y de sombra. Una explicación de fundamento es que el organismo vegetal que, aprovecha las horas de luz para su desarrollo, trabaja por medio de la fotosíntesis; así mismo durante las horas de oscuridad funciona con la quimiosíntesis. Hemos de aseverar de que la madre naturaleza proporciona trabajo a los vegetales durante las 24 horas y con ello, no reconoce domingo ni días festivos.

Claves de información

Las plantas que producen flores cuando los días son cortos o de poca intensidad luminosa, son conocidas como de día corto. Las que florecen cuando se alarga el período de la luz diurna son llamadas plantas de día largo. Algunas plantas que no son influidas por la longitud del día se califican de tipos indeterminados.

En el mismo grupo, el fotoperiodo crítico no es el mismo para todas las especies. En general, las plantas se clasifican según el periodo crítico, sea el límite inferior o superior de luz diurna que causa el crecimiento reproductivo. En otras palabras: una planta de día largo es la que florece sólo cuando la duración diaria de la luz excede cierto número de horas, una planta de día corto es la que florece cuando la duración del día es corta y que no florece cuando la longitud del día excede cierto tiempo. Ejemplo el agave tequilaza tiene reacciones distintas para su comportamiento final, acorde a las regiones en donde es plantado. En los trabajos de investigación encontramos que una fotoperiodicidad de hasta 16 horas, tiene como resultado calidad deseable en la industria, y esto por supuesto debe reflejarse en la economía de inversión. El descubrimiento del fotoperiodo explica las diferencias en el hábito de florecimiento de muchas plantas y tiene inmediatas aplicaciones prácticas; un ejemplo de constante observación en el comportamiento de la ornamental “noche buena” o sea, la poinsetia, la que requiere un mínimo de 60 días de no exposición a la luz.

Con la tecnología actual el manejo del fotoperiodo en los requerimientos del vegetal se puede manejar con la utilización de los plásticos de invernadero; una consecuencia económica se refleja en los mercados. Se puede obtener producto floral a discreción, con el requisito indispensable de que se conozcan estas claves que mencionamos.

Importancia del periodo de oscuridad

Desde hace más de cuatro décadas sabemos y por tanto así lo manejamos, que el factor crítico en el florecimiento no es la longitud del día, si no la duración del período de oscuridad. Considerando la importancia de la intensidad de la luz se ha vuelto una práctica el empleo de la luz artificial para prolongar el fotoperiodo natural, y así hemos visto que el efecto estimulante no depende de la intensidad. No podemos menos que mencionar una creencia vernácula: aquélla de que la luz de la luna actúa sobre las plantas, sobre todo en las de jardinería. Que la luz de intensidad baja es suficiente para romper el periodo de oscuridad, es un hecho que sorprende en varias ocasiones a quienes operan invernaderos; esta columna viajera da testimonio del hecho en las visitas a las diferentes regiones de nuestro Estado, en donde hay instalaciones de plástico.

Fitocromo

El término nos sugiere “colores vegetales”.
Se ha establecido que las angiospermas poseen un pigmento que activado por ciertas longitudes de ondas de luz, estimula el florecimiento (estamos hablando de un factor físico-químico). El hecho de que el máximo de absorción está al final del rojo, en el espectro sugiere que el pigmento es azul o verde: ejemplo los crotos. Aislar e identificar el pigmento fue todo un reto  para los investigadores. Afortunadamente, las plantas tienen otras reacciones fisiológicas a los estímulos de la luz roja, una de éstas es el alargamiento de tallos; además, las plántulas albinas reaccionan a la luz roja en forma tan efectiva como lo hacen las plantas verdes. Esto se debe y sirve para eliminar la clorofila como pigmento foto-receptor en el estímulo del florecimiento. Las plántulas albinas lógicamente son incoloras o bien, tienen cantidad insignificante del pigmento que absorbe la luz roja. Durante el periodo de investigación, aunque el pigmento inductor no había sido aislado, los fisiólogos se convencieron de su presencia, por lo que le llamaron fotocromo.

Latencia y la luz

Como latencia se entiende el estado de función mínima en la fisiología de la planta, otro término utilizado es el de dormancia; comúnmente se dice que es cuando la planta reposa o se va a dormir.
La relación de la luz con la latencia es un tanto complicada. Ante todo se le puede considerar como un factor necesario para la germinación de unas semillas e inhibidor para otras. Como ejemplo tenemos al maíz, al frijol, algunos tréboles, etc. Que germinan igual en la luz que en la oscuridad.
    
Micronutrientes como influencia determinante

Con una constante de preguntas podríamos concluir que las hormonas y los reguladores de crecimiento funcionarán óptimamente, cuando las necesidades totales de nutrición de un organismo vegetal bajo cultivo están presentes.

Ha sido difícil en muchas ocasiones identificar al creador de un nuevo concepto en la ciencia. Así, como información histórica tenemos que muchos de los antiguos investigadores de las soluciones de nutrición observaban efectos estimulantes al añadir elementos que no se consideraban esenciales. Raulin encontró en 1869 que el zinc era indispensable par el desarrollo del hongo Aspergillus níger, y fue de la opinión de que este elemento también sería necesario en las plantas superiores. En contraposición Javillier, en 1912, pensaba y asaz lo sabía que el zinc era un contaminante de los compuestos químicos “puros”, y que podía ser introducido en las soluciones por las paredes de vidrio de los recipientes.

En 1915 Mazé con sus trabajos con el maíz, demostró que las plantas superiores necesitan leves cantidades de ciertos elementos; sin embargo, (paradojas en el mundo científico) el trabajo de Mazé no fue aceptado sino muchos años después.

La importancia de los microelementos pasó inadvertida por las siguientes razones: 1) Las llamadas sales puras que se usaron en antiguas investigaciones estaban contaminadas por estos elementos, y nadie se dio cuenta de que esta pequeña cantidad era suficiente para las plantas.

Las fórmulas y dosificaciones en la nutrición vegetal han sido y siguen siendo de importancia vital para la consecución de máximas cosechas; por ello consideramos necesario pedir la venia y podamos continuar con el tema en próximas colaboraciones.

ROBERTO SIERRA B. / Ingeniero agrónomo, asesor y consultor.
Correo electrónico: ing.sierra@yahoo.com

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