Sábado, 19 de Julio 2025

LO ÚLTIMO DE

|

Las estrellas

Por: EL INFORMADOR

Pocos espectáculos nos regala la Naturaleza que sean más bellos que la aparición de la primera estrella.

Ya hace algún tiempo que invité a mis lectores a contemplar el cielo en ese instante que todavía tiene luz que ya está acercándose a la noche, es entonces cuando la primera estrella abre su ventanilla y nos regala su luz. Es como un diamante lejano, pero tan bello, tan único, que el observador no aparta sus miradas, aunque va dándose cuenta de que enseguida otras ventanillas se abren y tantas son, que esa abundancia ya no nos permite señalar cuál fue la primera estrella, todas son como un valioso coro de luz del cual debemos disfrutar y agradecer al milagro que nos lo brinda.

Y así llega la noche como un palio oscuro repleto de alfilerazos brillantes.

El espectáculo que nos brindan las estrellas es uno de tantos que tenemos gracias a la Naturaleza amiga. Nada hemos hecho para merecerlo y tengo la seguridad de que muchos humanos no saben disfrutar de ellos, como si no los merecieran: así la eclosión de una flor, el canto mañanero de los pájaros, el correr cantarín de un arroyo, las sombras de los árboles.

Lo disfrutáramos o no, todo esto y más lo teníamos en abundancia hasta hace poco.

Se ha celebrado el Día de la Tierra, y a mí, dándome cuenta de cómo la Tierra está, me ha parecido una broma de mal gusto. No debe haber un Día de la Tierra, sino todos.

¿Qué has hecho tú... qué he hecho yo para celebrarlo... para señalarlo? ¿Escribir unas cuantas palabras? ¿Contemplar las pocas flores que hoy tiene mi jardín? Bueno, no tiro basura en la calle, no fumo, no gasto mucha electricidad... pero todo esto es poco, y menos sabiendo que hay muchos terrestres que se ríen cuando oyen la palabra ecología... Dejan las luces encendidas, se les olvida cerrar el chorro del agua, abusan de los utensilios eléctricos.

Ahí está uno de los graves problemas a resolver. Hay ciudades que en la noche son más luminosas artificialmente que en el día, y esta luminosidad unida a la gran nube de la contaminación impide ver las estrellas.

Mire usted al cielo en este caso, y sólo verá un techo negro, sin los puntitos diamantinos; así es la gran ciudad, hemos perdido las estrellas.

¿Las recuperaremos?

¿Cuántas cosas bellas nos quedan?

¡Cuidémoslas! Son hermosas. Son la vida.

GABRIEL PAZ / Escritora.
Correo electrónico: macachi809@hotmail.com

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones