| Ingenio, no pánico Por: EL INFORMADOR 31 de octubre de 2008 - 23:00 hs La cascada de cifras que ha traído consigo la desaceleración económica hace pensar que además de una situación real que afecta el ritmo de los mercados, existe un componente emocional que está magnificando los efectos recesivos. Prácticamente en todas las economías del mundo los titulares de la prensa están destacando el impacto que la recesión estadounidense está teniendo sobre sus actividades, ya sean países tan cercanos a Estados Unidos como Canadá, o bien, naciones europeas como España y muchas más, hoy le dan espacios especiales a su ingreso a una etapa recesiva que poco a poco se va generalizando. Ante esto, México no esta siendo la excepción y se ha empezado a divulgar que el sector industrial cayó 1.6% en agosto, que las manufacturas descendieron 3.9%, que la tasa de desempleo abierto subió a 4.3% y que el Producto Interno Bruto sólo creció 1.7% durante el tercer trimestre, cuando hace un año, sin estar en jauja lo hacía a 3.7 por ciento. Pese a lo anterior, no todo es gris, como lo señala el hecho de que en el comercio exterior, los pedidos de las empresas no petroleras no han resentido aún los efectos negativos de la desaceleración económica mundial. Esto lleva a pensar que si bien es cierto que en un ambiente generalizado de depresión siguen existiendo nichos de oportunidad que algunas empresas tienen la habilidad de aprovechar en su beneficio, al encontrar opciones distintas a sólo quedarse esperando a ver qué sucede en los mercados y tomando iniciativas, frecuentemente agresivas, para marcar la diferencia. Como suele suceder en épocas de crisis, la diferencia en los resultados provendrá de quienes tengan la audacia para encontrar oportunidades donde no todos las ven, ya sea diversificando exportaciones, atendiendo nuevos mercados u ofreciendo en los mismos mercados opciones diferentes. Lo que resulta imprescindible es dejar a un lado el pánico que pueden crear las cifras del entorno y sólo tomar en cuenta aquellas que inciden directamente en las decisiones por tomar, ya que lo común no es atender a economías en general que se pierden en las estadísticas, sino a clientes muy particulares con necesidades definidas que sólo atenderá quien mejor las comprenda y pueda satisfacer. Es hora de explotar el ingenio. Temas Crisis economía EU Economía Mexicana Indicadores Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones