Lunes, 17 de Febrero 2025

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Horas de tomar

Por: EL INFORMADOR

¿Cuál es el papel del Estado en relación con el consumo de bebidas alcohólicas? Ésta es la pregunta clave a responder cuando se trata de legislar los borrachazos y surge invariablemente el tema de los horarios de los bares. La pregunta no es de fácil respuesta y sobre todo, nunca vamos a estar de acuerdo.

Las posiciones de corte moralista tenderán a sostener que son actividades que deben ser reguladas por el Estado en función del beneficio de todos, y las posiciones más liberales sostendrán que el horario de consumo no es tema de las autoridades sino de las personas, y que la responsabilidad del que toma es la misma a las 5:00 de la tarde que a las 5:00 de la madrugada.

El asunto a tratar no es ni cuánto ni cómo ni a qué horas toma la gente, sino la responsabilidad de quien toma o se droga, y maneja.

Lo que queremos evitar son los accidentes, no la embriaguez, por más que para algunos ésta sea indeseable. Podemos argumentar que el alcohol provoca una serie de cosas a nivel personal y en términos del costo de salud del Estado. Las cosas personales no son materia del Estado, y el asunto de los efectos colaterales de salud se resolvió, hace ya muchos años, por la vía de los impuestos: si es necesario subirlos más porque el consumo de alcohol está incidiendo en los costos de la salud pública, subámoslos, pero ese es otro tema y hay que discutir una sola cosa a la vez. En este momento la discusión es si deben o no limitarse los horarios de cierre de los bares y de la venta de alcohol por razones de seguridad.

Las 3:00 de la mañana suena excesivo para unos y muy limitado para otros. Los argumentos para poner hora de cierre son que entre más se prolonga la noche, más probabilidades hay de que una persona consuma alcohol en exceso y luego maneje. Los argumentos en contra son, por un lado, que sacar a la calle a todos los asiduos de los bares a la misma hora es una verdadero peligro; da igual si la hora de cierre es a la 1:00, a las 2:00, a las 3:00 o a las 5:00, aunque por supuesto, entre más tarde sea el cierre, menos comensales llegarán al final; los borrachos se dosifican a sí mismos.

Actualmente los municipios deciden a qué hora se cierra, y por lo general la ponen temprano porque la mordida es por hora.

El papel del Estado en estos temas no es ni puede ser moral; su papel es protegernos a todos en la mayor libertad posible. Si la libertad de tomar pone en riesgo o molesta a otros, ahí se acabó la libertad. Punto. El papel del Estado debe regir en la calle y en la convivencia, no en la vida privada. No se trata de acabar con los borrachos ni de promover valores, eso le toca a otros y en otros espacios. Se trata de evitar accidentes. Y en eso lo único que ayuda es evitar, por la vía del convencimiento o la sanción, que se maneje en estado de ebriedad. En ese sentido, el proyecto de ley cumple a cabalidad con las necesidades. Le sobra, a mi juicio, la limitación de horario.

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