| El año de las acciones Por: EL INFORMADOR 31 de diciembre de 2009 - 23:00 hs Ha llegado el año 2010. Ya ha transcurrido la primera década del siglo XXI que dejó como enseñanza que aquél que no se adapta a la nueva realidad, quedará inevitablemente rezagado. En este año que comienza, México tendrá una doble celebración: el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución. Acontecimientos que marcaron el rumbo de esta Nación llena de riquezas naturales y culturales. La fiesta para los mexicanos es prácticamente un gen que llevamos en la sangre, y recordar a quienes nos dieron Patria y a quienes lucharon por los derechos de los más pobres, es un deber para este 2010. Sin embargo, no son estos acontecimientos lo más importante en la agenda social y política para este año. Más allá del festejo y el recuerdo, la fecha nos exige que ha llegado el momento de revolucionar a México, de hacer los cambios necesarios que garanticen la prosperidad y reimpulsen al país. La Nación requiere de reformas estructurales que urgen, pero además ya son impostergables. La primera “ola” de estos cambios se inició desde el sexenio de Miguel de la Madrid, con la apertura comercial que después concretó Carlos Salinas de Gortari con la firma del Tratado del Libre Comercio de Norteamérica. Fue precisamente con Salinas donde ocurrieron el mayor número de reformas, como la serie de privatizaciones, corrección del déficit público y la relación Iglesia-Estado, entre otros. Con Ernesto Zedillo Ponce de León, se hicieron cambios en el sistema de pensiones, y la reforma electoral. Aunque son perfectibles, esas reformas nos han llevado a donde hoy estamos, y es hoy cuando sabemos que México requiere con urgencia de nuevas políticas y reglas para aumentar la competitividad, para ser más atractivos a la inversión. Necesitamos crecer a tasas altas y sostenidas para crear millones de empleos que den como resultado finanzas públicas sanas, pero más allá de eso: una prosperidad justa para los que habitamos este país. El año 2010 no es para celebrar los triunfos del pasado, sino una nueva fecha que nos reta a realizar acciones que nuestros hijos y nietos puedan festejar en el futuro. Temas Año Nuevo Bicentenario Independencia Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones