Ejemplos del arte de la Naturaleza

Ayer... y hoy

Tal como lo prometí en mi colaboración anterior que por falta de espacio no se concluyó, como hay lugares en el mundo que por su belleza abrumadora y esplendor inigualable impactan a quienes los visitan y por lo mismo todo ser humano debe conocer en su tránsito por este mundo, en esta entrega mencionaré algunos de los que considero que todo ser humano debe disfrutar a fin de enriquecer su cultura y ampliar sus conocimientos.

1.- En China se encuentra Güilin o Kuelin, una región geográfica que es ya reconocida en el mundo como de las más bellas en todo el país; no obstante sus grandes atractivos que la convierten en un ejemplo del arte de la Naturaleza, durante siglos fue desconocida para el resto del mundo, pues el país asiático no permitió visitarla, a fin de evitar su contaminación, y fue hasta hace pocos años cuando permitió recorridos por la zona; el que esto escribe fue lo que vio y disfrutó en ella: como resultado de la erosión de milenios, se formaron montañas de formas extrañas y caprichosas, canales subterráneos de gran hermosura con nombres tan sugestivos como “La colina de las siete estrellas”, “La colina de los mil colores”, así como la famosa gruta “Refugio del dragón” y “Las orquídeas de jade” que subyugan a quienes tienen la aventura de mirarlas. Si quiere cultivarse culturalmente y engrandecer su amor por la Tierra (el hogar de todos), debe conocerla.

2.- Otra grandeza de la Naturaleza: montañas cubiertas de bosques, aroma de pinos, duraznos y liquidambar; sorprendentes y altivas cascadas, extrañas y llamativas rocas con increíbles equilibrios, tantos que a esa manifestación de grandiosidad cualquier superlativo de bello le queda chico, ya que eso y más es “La Barranca del Cobre”, en el Estado de Chihuahua, México, cortadura más profunda y extensa que el tan publicitado “Gran Cañón del Colorado”, en territorio de Estados Unidos de Norteamérica y que por desgracia pocos mexicanos la conocen, a pesar de ser parte de la patria.

3.- Uchisar, Goreme, Pasabag y Zelbe, son nombres que de inmediato lo trasladan a uno a otra de las maravillas naturales del mundo, a Capadosia, en Anatolia, la parte central de Asia Menor en la actual Turquía; son valles que se han formado a lo largo de los siglos por la erosión producida por el agua y el viento, convirtiendo a la región en un verdadero paisaje lunar por las rocas cónicas, llamadas por el pueblo “Chimeneas de las hadas”, grandes rocas excavadas, el gran valor visual, las cuales deben ser conocidas y admiradas por todo ser humano amante de la Naturaleza y con deseos de superación.

ADOLFO MARTÍNEZ LÓPEZ / Escritor.