Abundante presupuesto para el año de elecciones

Aprobado que fuera el dictamen de la comisión correspondiente para que el Congreso estatal autorice el oneroso préstamo que pretende obtener Emilio González Márquez, y que los jaliscienses tardaremos en pagar 25 años. Esos seis mil millones de pesos destinados —según el Gobierno estatal, que no se distingue por gastar en beneficio de la ciudadanía— a 16 obras viales, las cuales en los siguientes 25 años habrán terminado su vida útil, mientras la deuda se continuará pagando por nuestros hijos y nietos. Son frases muy repetidas, pero también muy ciertas.

Eso me trae a la memoria los 18 mil millones destinados a la Presa de Arcediano, a la que también se le dictaminan 20 años de vida útil y que acompañará en su decadencia a los túneles que truenan, a los colectores que explotan en obras públicas, realizadas con escasez de presupuesto y abundancia de quejas, porque mucho de ese gasto se destina a campañas políticas con la ingenua creencia de que los espectaculares motivan a los ciudadanos muertos de hambre a votar por sus hambreadores.

Todo ese tipo de obra pública, al estilo del nodo Colón, está destinado a colapsar la zona en que se realiza para siempre, y para muestra está el propio nodo, con su larga hilera de casas y edificios abandonados, la plusvalía de las viviendas perdida por los años de inmovilidad que causaron las construcciones del nodo. Casa y edificios deteriorados, negocios abandonados porque los clientes no pudieron acceder a ellos fácilmente, la zona llena de indigentes que ya ocupan las fincas abandonadas, y ni rastro queda de la buena zona que era para vivir. Ése es el destino de las obra realizadas para cumplir un propósito que no es el de equipar las calles citadinas para beneficio colectivo, sino por el interés de algunos grupos financieros y para llenar bolsillos de intermediarios y políticos.

El siguiente año habrá mucho dinero para obras, ya que el Fondo Nacional de Infraestructura apoyará al Estado de Jalisco con 25 millones de pesos para los proyectos de movilidad de la ciudad, que además podrán participar en un fondo federal que sumado a bolsas estatales podría obtenerse la suma de cinco mil millones de pesos que alcanzarían hasta para el tren suburbano de Tlajomulco a Guadalajara.

Ante tantas cifras y proyectos pareciera que en el resto del mundo no hay crisis económica. Ahora Jalisco será el segundo Estado con mayor deuda en el país, enseguidita de Nuevo León, cuya deuda asciende a 20 mil millones de pesos. Falta nada más que la autorización de la deuda se vote en el pleno y ahí se verán los bloques de intereses y nada de representación ciudadana. Sería un milagro que algún grupo de diputados pudiera hacer valer el sentido común como para proponer un fideicomiso o alguna medida institucional que pusiera freno al dispendio encaminado a causas sacras, de la farándula o electorales.

MARTHA GONZÁLEZ ESCOBAR / Divulgadora científica. UdeG.
Correo electrónico; marthaggonzalez@yahoo.com.mx