Internacional | Luego de reunirse con la Corte, Insulza se encontró con jerarcas católicos y más tarde con diplomáticos La Corte dice a la OEA que la salida de Zelaya es irreversible El presidente del tribunal Jorge Rivera “le dijo a Insulza: nuestra decisión está tomada y es irreversible Por: EL INFORMADOR 4 de julio de 2009 - 01:20 hs TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La Corte Suprema de Justicia hondureña notificó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, que la decisión de apartar del poder al presidente Manuel Zelaya es “irreversible”, indicó un portavoz del tribunal. El presidente del tribunal Jorge Rivera “le dijo a Insulza: nuestra decisión está tomada y es irreversible, hagan ustedes lo que quieran”, indicó Danilo Izaguirre, portavoz de la Corte. El representante de la OEA dijo que no hay disposición en Honduras para restituir al depuesto presidente y anunció: “La OEA sigue reconociendo a Zelaya como el legítimo presidente de Honduras, donde se cometió una ruptura grave del orden constitucional”. Insulza llegó ayer a Tegucigalpa para notificar a las autoridades hondureñas de una resolución de la OEA de dar un ultimátum --que vence hoy-- para restituir a Zelaya, so pena de expulsar al país centroamericano del organismo. Luego de reunirse con la Corte, Insulza se encontró con jerarcas católicos y más tarde con diplomáticos. El secretario de la OEA comenzó a gestionar ayer de manera directa la restitución de Zelaya como presidente de Honduras pese a la firme negativa del Gobierno designado de Roberto Micheletti, de permitirlo. Insulza tuvo su primer encuentro con el presidente de la Corte Suprema, Jorge Rivera, quien le señaló que sobre Zelaya pesa una orden de captura. “Insulza pidió que Honduras restituya en la presidencia a Zelaya, pero el presidente de la Corte le contestó contundentemente que hay una orden de capturarlo”, dijo Izaguirre. Añadió que el presidente de la Corte le presentó la documentación legal que sustentó la expulsión de Zelaya. El gremio de juristas hondureños reconoció que fue ilegal la expulsión del país del destituido presidente, pues debió ser removido del cargo y sometido a los tribunales por delitos como traición a la patria. La premio Nobel de Paz (1992), Rigoberta Menchú, aseguró al llegar a Tegucigalpa que el derrocamiento del presidente Manuel Zelaya “es un golpe de Estado” contra “los más pobres” que exige la solidaridad internacional. Temas América Latina Golpe de Estado en Honduras Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones