Italia quiere patrullar Túnez para evitar flujo migratorio

ROMA, ITALIA (14/FEB/2011).- El flujo de inmigrantes africanos a la isla italiana de Lampedusa continuó ayer, a pesar de que el Gobierno italiano decretó el sábado un “estado de emergencia humanitario”.

Ayer llegaron 977 inmigrantes procedentes del Norte de África, en su mayoría de Túnez, que se sumaron a los casi cinco mil indocumentados que han arribado desde hace cinco días, de acuerdo con la Guardia Costera.

El comandante de Capitanía de Puerto de la pequeña isla italiana, Antonio Morana, informó que además rescataron a 107 personas que intentaban llegar a Italia en una embarcación que terminó hundiéndose.

Según la Policía local, en la pequeña isla mediterránea hay en este momento dos mil 134 indocumentados: unos 700 se agolpan en el muelle Favaloro, próximo al aeropuerto de Lampedusa, y el resto aguardan en un campo de fútbol a que puedan ser llevados a los centros de primera acogida de otras localidades italianas.

“Apreciamos que los inmigrantes hayan sido acogidos en territorio italiano y esperamos que siga siendo así, pero, a la vez, sorprende que, en tal situación de emergencia, un centro preparado para acoger miles de inmigrantes como el de Lampedusa no esté disponible”, dice Laurens Jolles, representante regional del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

Jolles pidió “recibirlos, asistirlos y acogerlos”, pero Italia tiene otros planes. Ayer el ministro del Interior, Roberto  Maroni, dijo que solicitarán poder desplegar sus policías en  Túnez para tratar de impedir la salida de más inmigrantes, y también tienen la intención de patrullar las aguas tunecinas.

La ayuda es indispensable

Maroni criticó la ausencia de una acción europea concertada. “Europa no hace nada. Estoy muy preocupado y he pedido la intervención  urgente de la Unión Europea (UE) porque el magreb está explotando. Como siempre, nos han dejado  solos. Gestionamos la urgencia humanitaria con la única protección civil. Una intervención de Europa es indispensable”.

Túnez  respondió de inmediato a través del portavoz del Gobierno,  Taieb Baccouche, quien calificó de “inaceptable” la idea de tener policías italianos en su país.

A cambio, dijo que pidió al ministro tunecino de Relaciones exteriores la autorización para  que las fuerzas del país puedan intervenir para bloquear los flujos.

“Las fuerzas de la guardia marítima trabajan día y noche para cesar ese  flujo. Detuvieron a muchos individuos que trataban de cruzar las fronteras y ya fueron enviados refuerzos”.

Baccouche lamentó que Maroni dijera que “el sistema tunecino está a punto de derrumbarse”, aunque dijo no sorprenderle, pues el ministro italiano del Partido Liga del Norte pertenece a la “extrema derecha racista”.

FRENTE A FRENTE
Conflicto de injerencia

"Pediré al ministro tunecino de Relaciones Exteriores la autorización para que nuestras fuerzas puedan intervenir en Túnez para bloquear los flujos"
Roberto  Maroni,
ministro del Interior.

"Es inaceptable. El pueblo tunecino rechaza el despliegue de soldados extranjeros en su territorio. El control de nuestro litoral compete a las autoridades tunecinas"
Taieb Baccouche,
portavoz del Gobierno de Túnez.